La oscuridad y el silencio me rodea, no sé dónde me encuentro. Abro los ojos lentamente mirándome caer despacio, como si volara y estuviera descendiendo.
Tardo un poco, pero llego a lo que parece ser mi destino, un lugar lleno de fuego y lava, el silencio que antes predominaba ahora se llena de gritos de agonía y dolor por todos lados.
De la nada unas cadenas salen del suelo y se clavan en mi cuerpo haciéndome sentir un gran dolor que me obliga a gritar uniéndome al coro que se escucha en este lugar.
Caigo de rodillas al suelo ardiente sintiendo un dolor desgarrador, más que una maldita bala o el salami de zonic dándome con una fuerza descomunal.
-vaya, vaya, vaya, ¿que tenemos aquí?- escucho frente a mí, levanto la mirada encontrando aun ser horripilante
Un tipo de erizo negro como la oscuridad misma, sus ojos brillantes como las brasas de este maldito lugar, una enorme cola y alas como la de un murciélago. Sus manos no poseen dedos, tienen garras en forma de cuchillas tan filosas como un bisturí y en su boca sobresalen unos filosos colmillos.
Me encuentro en la presencia de un demonio
-¿qué pasa?, ¿ya te arrancaron la lengua?- me toma de las mejillas causándome más dolor por la fuerza que posee, y sus garras –scourge- susurra sonriendo –un gran criminal, adicto a matar de la forma más sádica posible, mataste a más de mil personas tanto de forma directa como indirecta, solo para tener esa estúpida cosa que les encanta a los mortales, el tonto dinero- habla de manera juguetona, como si se burlara de mí y me lo restregara en toda la cara. –ho, pero tú eres una reencarnación, antes eras una dama, una enfermera en una de las tantas guerras que han existido-
-¿qué?- ¿yo era qué?
-sí, te llamabas scarlight, moriste en un ataque al campamento donde trabajabas, pero no quisiste irte de la tierra porque... pfff- suelta y de la nada comienza a reír a carcajadas, carcajadas maliciosas, con una gran fuerza que resuena en todos los muros del lugar –esto es perfecto, un alma más para mí-
Lo miro totalmente confundido de sus palabras.
-debo agradecértelo- me suelta -sin ti, zonic no tiene escusa y regresará a donde pertenece- sonríe –a mis garras- me muestra las mismas
-¿que?- sigo confundido
-no importa, no es algo que te interese- se aparta de mi –te veré después idiota, debo reclamar un alma- el demonio se va
Me quedo un segundo mirando hacia donde se fue sin entender ni una puta palabra de lo que dijo. Eso es hasta que las cadenas comienzan a jalarme con fuerza, haciendo que grite de dolor.
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-maldición- gruño al verme de nuevo encerrado en estas malditas jaulas de cristal
Después de ver a scourge morir, nosotros desaparecimos, parece que al no estar nuestro amo somos pasados a otro.
Chasqueo la lengua y comienzo a golpear el maldito cristal hasta cansarme. No tiene caso que lo intente, no podré huir de este lugar nunca.
Bajo la cabeza dejando que las lágrimas, que siguen cayendo desde que llegué, mojen el suelo. Debí hacer algo más, debí salvarlo, debí, debí confesarme antes que esto pasara.
Maldito perro, supo cómo entrar a mi corazón, supo enamorarme. Aunque fuera un maldito hijo de perra, logro conquistar mi corazón, y aun no tengo ni idea como fue que lo hizo. Pero, lo consiguió y ahora ese idiota ya no está. ¡Para que putas me enamora si se va a morir!
-scourge- susurro sintiendo esas amargas gotas salir de mis ojos involuntariamente.
-ho, puedo hacer que lo veas de nuevo- una voz gruesa habla cerca de mi
Levanto la cabeza desconcertándome, ya no me encuentro en esas jaulas, sino que me encuentro en este lugar lleno de fuego y sufrimiento.
Y a quien tengo frente mía es al demonio, creo que es el mismo que me metió en esa app en primer lugar.
-tú- desconcertado con su presencia
-eres mío- pronuncia con una gran sonrisa en su rostro para luego sujetarme del cuello y apretar con fuerza clavando sus garras en el mismo sitio
Me sostengo de su brazo mientras me alza y me lleva con él, tirándome al suelo. En ese momento cuchillos enormes atraviesan mis extremidades causándome un dolor horrible, obligándome a gritar.
-zo..nic- alzo las orejas y levanto un poco la vista encontrando a scourge siendo torturando por un demonio, quien clava con fuerza un arma en su cuerpo
-que hermoso, la linda pareja se reúne para sufrir por la eternidad juntos- su voz tiene un tono de burla, me quejo y volteo a verlo sin entender por qué estoy de nuevo aquí, pero no me deja preguntar, clava algo en mi espalda baja y grito por el dolor dejándome caer en el caliente suelo –espero estén listos, porque esta vez, nadie los salvará- comienza a reír con fuerza, causándome un fuerte escalofrío y luego un grito cuando golpea donde me ha clavado.
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Abro los ojos volviendo a estar en esta cárcel de cristal, no entiendo como todo volvió a estar del asco. Era tan feliz con el moco andante. Pero mi vida siempre ha sido una mierda, desde mi niñez, hasta mi adultez. Era de imaginarme que las cosas terminarían mal, siempre terminan mal.
Supongo que el señor limpieza y la banana andante deben estar en estas jaulas también. Comenzando con esto nuevamente, teniendo un nuevo amo, quien maltratará de nosotros como le dé la gana hasta el cansancio y nos tiren como basura. Como lo que somos.
-ho, que guapo- alzo la mirada a la gran pantalla frente a mi
Una mangosta me mira y toca frente a mí, seleccionándome, de la nada aparezco en una sala, idéntica a la que tenía el moco en su aparato, y esta vez estoy acompañado de varios mobians. Todos amarrados de la espalda y arrodillados.
De la nada aparece una cuerda y me amarra los brazos igual que a los demás y caigo de rodillas. Lo normal en este sitio.
-perfecto, ya tengo con que jugar cuando me aburra- escucho frente a mi viendo una sonrisa extraña de la quien sería mi nueva ama
Luego comienza a tararear algo tocando la ventana que ella usa para hacernos sufrir.
-agh!- me quejo al sentir algo moverse en mi trasero, uno de esos juguetes extraños de esta época.
Pronto el lugar se llena de gemidos y quejas mientras esas cosas entran en nosotros embistiendo salvajemente.
Yo simplemente gimo, pelear no sirve de nada, y lamentarme tampoco. Solo ser el juguete obediente.
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Nuevamente terminé aquí, en espera de un nuevo amo. Extraño a scourge, fue el mejor amo que he tenido, y el único que me dejó disfrutar de la sangre de sus víctimas, deliciosa y hermosa sangre.
Llevo ya tiempo aquí, esperando, viendo como vienen y van amos y slaves. Supongo que no soy atractivo o les doy igual. Es deprimente.
-este parece interesante- una voz retumba en el lugar, no levanto la vista, debe ser el nuevo amo de alguien
Yo me mantengo mirando hacia abajo, llorando la perdida de alguien que no pensé llegar a amar. Es tonto, pero, me enamoré, como nunca antes. Y pensar que tuve que llegar hasta aquí para sentir eso.
-oye, levanta la cara- escucho
No sé si me hablan a mí, pero siempre levanto la cara, encontrándome en este lugar, como se llamaba... sala, si, sala, significa que tengo nuevo amo.
Volteo a ver esa ventana mágica, allí encuentro a un erizo, azul oscuro, se parece al señor militar, zonic, solo que mi nuevo amo tiene los ojos color rubí, y por alguna razón me parecen familiares.
-soy exe y ¿tú eres?- pregunta
-flettwey amo, mi nombre es fletwey- contesto
Exe, me suena, tan familiar.
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My Slave App (+18) (Sonadow, Infirokie, Silvephiles, Scourgexfletxmanicxzonic)
Randomsolo es una aplicacion, tu no eres real, no deberias ser real. Pero, aun asi, siento algo por ti, sera que mi mente esta jugando sucio conmigo?