Estaban en el auto cuando Taehyung recibió una llamada de su otro trabajo, le estaban diciendo que ese día no asistiera y que al día siguiente tampoco; se había roto un caño de gas y el bar estaría cerrado.
— Agh, maldita sea — se quejó Tae guardando su celular.
Jungkook lo miró.
—¿Qué sucede?
—Nada, es solo que es la tercera vez que me dicen que no asista al otro trabajo. Es un bar un poco problemático, siempre pasa algo.
—D-deberías conseguir otro bar.
—Es que en este me pagan por día y me pagan bien. Necesito el dinero hasta que se cumpla el mes de mi trabajo en la escuela. Luego mi ingreso será alto y no estaré tan mal. Quiero decir... no es que esté mal, pero me irrita no tener el sueldo fijo y odio tener que esperar un mes.
—Debe ser feo.
—Pues sí. Es horrible.
Taehyung dobló una cuadra y estacionó en un semáforo. Miró a su menor de reojo.
Le parecía tan bonito...
—¿Quieres ir a tu casa? Debes estar exhausto.
Era verdad, pero una parte de Jungkook quería compartir la tarde con Taehyung.
—Me gustaría... si puedo... pasear contigo en el auto.
Taehyung contuvo la felicidad que le produjo oír eso. No supo porqué pero Jungkook lo maravillaba de una manera inexplicable.
—Perfecto. ¿Te importa si voy a mi casa a buscar a mi perro? No puedo dejarlo sin hacer sus cosas por tanto tiempo.
— Está bien. Solo que... me dan miedo los perros.
—Ah. El mío es la cosa más pequeña y adorable del mundo. Ya lo verás.
. . .
Taehyung dejó pasar al menor a su apartamento. Jungkook se iba a quedar parado en la entrada pero tuvo que sentarse en una silla porque sus partecitas le seguían doliendo.
—¿Estás seguro que no quieres que te lleve a un doctor? — le preguntó Taehyung sirviéndole el vaso de agua que Jungkook le había pedido.
— Estoy bien...
— A mi no me parece que estés bien. ¿Estás seguro que no tienes ningún moretón o algo de lo que debamos preocuparnos?
—Solo me golpeó, estoy bien. No es para tanto.
— No, no solo te golpeó — le dijo Tae sentándose en una silla a su lado. Su perro, Yeontan estaba persiguiéndolo por todos lados — Te apretó, luego te golpeó y te volvió a golpear la nariz. Así que no creo que estés bien.
Jungkook se alzó de hombros.
— Es normal que a todos los hombres les duela — comentó Jungkook. El perro de Tae lo fue a saludar, pero Jungkook no le devolvió el saludo. Le daba miedo.
Taehyung no pudo evitar observar ese comportamiento.
— ¿No te agradan los perros, cierto?
Jungkook sacudió la cabeza de forma negativa.
— Cuando era pequeño me mordieron. No quiero saber nada con perros desde ese entonces.
Ah, pero Yeontan lo seguía mirando con cara animada y algo semejante a una sonrisa perruna desde el suelo. A Jungkook le dio un poco de pena el animal, tan solo quería mimos, pero él le tenía miedo.
— Es muy amigable— le dijo Tae alzando a su mascota en brazos, este lo lamió — lo adopté porque tiene problemas de corazón y nadie lo quería.
— ¿De verdad? — ahora Jungkook se sentia mal por el animal.
— Así es. Pero es tranquilo y hasta ahora no me ha dado problemas— Tae se levantó para ir a agarrar la correa de Yeontan y se la puso — ¿vamos?
Jungkook se levantó despacito. La verdad era que quería estar tirado en su cama sin hacer nada. Aquel día había sido agotador.
Pero quería quedarse más tiempo con Taehyung. Le agradaba estar a su lado.
Ambos salieron de la casa y Taehyung tomó la decisión de que seria mejor sacar a Yeontan en la misma cuadra y volver, porque no quería hacer caminar a Jungkook demasiado tiempo.
—Oye si sientes que te caes o que no puedes caminar tómame del brazo — le dijo Tae a Jungkook — No tengo problema en que me utilices como bastón humano.
Jungkook sin pensarlo soltó una risita y Tae se lo quedó viendo fascinado. ¿Por qué su voz le sonaba tan armoniosa?
El mayor le ofreció su brazo a Jungkook y este lo tomó con timidez. Caminaron así una cuadra más, mientras Yeontan hacia sus cosas de perro. Mientras pasaban entre casas y tiendas, Taehyung preguntó:
— ¿Tú cantas?
Jungkook se quedó estático por la pregunta. Luego lo miró de reojo.
— ¿Cómo lo sabes?
Tae le sonrió.
— Resulta que tengo el oído muy afinado, Jungkook — le dijo regresándose las cuadras para volver a la casa y dejar a Yeontan para después llevar al menor a su hogar —.Cuando te ríes suenas melodioso, por lo que interpreto que tienes una buena voz para cantar.
— No soy bueno cantando — dijo el menor bajando la cabeza.
— ¿No eres bueno o te han dicho que no lo eres?
El menor evitó su mirada.
—Ambas cosas.
—Lo dudo — pararon frente al auto de Taehyung — te dije que sé reconocer el talento cuando lo tengo de frente, así que quizás te hayan dicho cosas malas para desvalorizarte, pero si tu crees que eres bueno, eso es lo más importante. No importan las opiniones de los demás.
—¿Entonces porqué debería importarme lo que tu digas?
Taehyung le hizo una mueca y se acercó a él para hacerle un mimo en el cabello.
— Porque yo te estoy diciendo cosas buenas, y los demás cosas malas.
— Pero al fin y al cabo eres "alguien más".
— Lo sé, lo sé — Tae se rió y se pasó la mano por la frente desacomodando sus cabellos rubios —En fin, no importa. ¿Quieres esperarme en el auto? dejaré a Yeontan en casa y te llevaré a la tuya ¿sí?
Jungkook evitó hacer un pucherito delante de Taehyung.
—Está bien, llévame a casa.
"No quiero irme"— pensó entrando al auto.
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Lovely Boy |Tk| ✔
Teen FictionJungkook es un estudiante de 17 años que se ve obligado a participar de un taller de música especial ya que sus padres quieren que sea más sociable con sus compañeros, de hecho sus padres están muy preocupados porque su hijo no tiene ni un solo amig...