Lovely Boy |Tk| ✔

Cap. 19

Aquel día cuando Jungkook llegó a casa solo estaba su madre. Se sorprendió de verla ya que pensaba que estaría en la oficina.

Él le preguntó porqué estaba tan temprano en casa y ella le dijo que se habían quedado sin luz en la oficina, así que estaría sin ir tres días hasta que lo arreglaran.

— ¿Qué tal ha ido tu primera clase del taller? — le preguntó su madre al ver que iba a dejar la guitarra a su cuarto.

—No sé.

—¿Cómo es que no sabes?

Jungkook se alzó de hombros.

— Es que no me gusta estar con otras personas. Ya lo sabes.

—Pero no puedes ser una persona tan solitaria, hijo... A tu padre y a mi no nos agrada verte solo.

—Pero estoy con ustedes — esa era la excusa que él siempre usaba — Con ustedes comparto cosas, ¿Para que quiero compartir esas mismas cosas con otra persona?

—Me parece que ese no es el problema Kook.

Jungkook apartó la mirada.

—Es que la gente no me quiere — Terminó por confesar él — No puedo acercarme a personas que no me quieren.

—Entonces acércate a personas que sí te quieran como amigo.

Jungkook volvió a poner una mueca en la cara.

—Nadie me quiere como amigo, mami.

Jungkook solo le decía "mami" cuando estaba realmente triste y eso la señora Jeon lo sabía perfectamente. Así que dejó sus lentes en la mesa y apartó la silla para levantarse. Llegó con su hijo le dio un abrazo.

Los padres no tienen la costumbre de abrazar adolescentes y viceversa. Pero los Jeon eran muy cariñosos por suerte.

Jungkook se apoyó en el hombro de su madre y dejó descansar allí la cabeza.

— De verdad, no necesito amigos.

Pero sí los necesitaba y su pobre corazón lo sabía. Sabía que todos sus compañeros tenían amigos, que salían al cine o a los centros comerciales juntos o iban a cenar juntos, de fiesta o a bares o compartían algún deporte. 

Y él... bueno, él estaba encerrado en su casa leyendo o escribiendo. Solamente salía para ir a la escuela y acompañar a sus padres a algún lado o pasear Solamente con ellos los fines de semana cuando no estaban cansados.

Jungkook no conocía lo que era la vida social. No sabía qué era compartir un gusto en común con otra persona.

No lo conocía y eso estaba mal. Le hacía mal a él por más que se negara.

—Los necesitas hijo. Urgentemente.

. . .

Luego de un momento de abrazar a su madre, Jungkook fue a encerrarse a su cuarto una vez más. No planeaba hacer otra cosa más que dormir para quitarse el cansancio del día, pero su celular sonó.

Eran sus compañeros hablando mal de él en el grupo de WhatsApp. Algunos de los mensajes decian:

"¿Ya vieron la foto nueva de perfil de Jeon? Parece un pato con esos labios tan horribles" decía la chica que siempre lo molestaba.

"Incluso se ve taaaan gay haciendo ese gesto".

"JAJAJA tienes razon" comentaba otro.

"Jungkook es un maldito marica, apuesto a que nadie se lo fallaría ni en un millón de años".

"Sí, seguro muere virgen". Comentaba el chico de siempre.

Después de leer eso último Jungkook se quedó con el celular en la mano, viendo los mensajes una y otra vez.

— ¿Para qué rayos quiero un amigo? — susurró bajito acostándose en la cama como una bolita.

Jungkook abrió el WhatsApp otra vez y eliminó los mensajes, pero sus compañeros seguían burlándose de su apariencia, de lo muy "marica" que era y de ser un tonto asocial y rarito. Luego el chico que lo molestaba y que también estaba en el taller de música con él, les empezó a contar a todos que Jungkook había sido un completo desastre con la guitarra.

Volvió a eliminar los mensajes.

Entonces pensó en el profesor Kim y recordó las bonitas palabras que le había dicho.

Pero luego (sin querer) recordó sus dedos sobre los suyos y su estómago dio una voltereta.

Un mensaje interrumpió sus pensamientos. Jungkook no quería abrirlo porque sería alguien más burlándose de él, pero luego empezó a caer un mensaje atrás del otro.

Y otro más y otro y otro.

Jungkook terminó por revisar el WhatsApp y se encontró con que lo habían incluido a un grupo de WhatsApp nuevo.

"Oh, no" — pensó Jungkook de mala gana.

Pero al abrir el grupo nuevo se encontró con unos nombres familiares.

Ahí estaban los cinco chicos que habían cantado Fuyu no Hanashi ese mismo día en la hora del taller.

Jungkook se rascó la cabeza confundido, ¿Por qué lo unían a ese grupo?

Entonces de pronto en su pantalla apareció una video llamada grupal.

— No, no, no, no... — Jungkook rechazó la llamada y apagó el wifi de su celular.

No quería que lo juzgaran. Les tenía miedo, ellos eran demasiado hiperactivos y él era tan callado...

No combinaban para nada según él.