Lovely Boy |Tk| ✔

Cap 69

Yeonjun y Jungkook tenían acordado volver a verse una vez que la cita con Taehyung acabara. Yeonjun le dijo que estaría esperándolo en el McDonald que quedaba a dos cuadras y que para esperar le había dicho a Soobin que fuera.

Así que Jungkook volvería a la casa junto a Yeonjun y Soobin, sus padres no sospecharían nada y él podría tener su cita en paz.

Cuando Taehyung se encontró con Jungkook en la entrada lo abrazó como a un oso pero no lo besó frente a las personas ya que se notaba demasiado quien era menor y quien mayor. Si lo hacia en público había riesgos. Era mejor que la gente pensara que Jungkook estaba acompañando a un primo o a un hermano mayor.

Aquel día no habría besos ni dedos entrelazados. Sólo una cita y una linda charla.

—Mañana cuando vengas a casa por las lecciones de piano podríamos hacer algo divertido para compensar este día.

Taehyung le había susurrado eso al oído, provocándole un escalofrío al menor.

—¿Algo "divertido"? —preguntó confundido porque no sabía si se refería a divertirse de ver una película o si harían algo sexual como el otro día.

Jungkook pensó que ojalá fuera la segunda opción porque sus hormonas adolescentes estaban revolucionadas desde lo que había ocurrido la última vez.

Tae le sonrió y le guiñó el ojo.

Esa fue su única respuesta.

Y Jungkook tenia muchas dudas.

"Es obvio que vamos a tener sexo, ni modo, debo prepararme mentalmente para que mi pobre trasero sea profanado de una vez por todas ¡Fighting!" — se dijo Jungkook mentalmente.

Pero Jungkook ya estaba planeando que mañana temprano le pediría a Gyu que fuera a su casa para que le diera consejos rápidos sobre relaciones sexuales.

"Ya que él es un maldito experto" —volvió a pensar Jungkook con una sonrisa.

—Mira. Esta es una replica de la Mona Lisa —le dijo Tae señalando una sección de cuadros pequeños en donde se representaban obras importantes y reconocidas.

Jungkook admiró las obras una por una y miró a la obra de arte viviente que admiraba los cuadros a su lado.

Entonces Jungkook sacó su celular y le tomó fotos a Taehyung.

—Tú eres lo más lindo del museo —Jungkook intentó hacerle su mejor piropo por lo que consiguió que su Hyung se pusiera colorado.

Le sacó muchas fotos más y las guardó todas para si. Luego se tomaron una selfie en un espejo que un artista amateur había hecho. Estaba todo pintado y se veía bonito con colores pasteles y opacos en la parte de abajo.

Ellos se veían bien juntos.

Y lo peor era que no podían presumirse.

. . . 

Jungkook le había contado que quería ser escritor cuando Tae lo llevó por la sección de esculturas en donde había una maquina de escribir labrada en madera. 

—¿De verdad? — preguntó el mayor atónito —Vaya, no me sorprende, porque eres muy inteligente.

El menor sonrió amablemente mirando a la nada por esas palabras tan halagadoras. 

—Planificar una novela es muy complicado —explicó Jungkook mientras los dos salían del museo —. Tambien hay que saber representar perfectamente las personalidades de los personajes en todos los diálogos, así como las frases características de cada uno. Tienes que saber los arcos especiales y los giros argumentales de la historias más las tramas secundarias que a veces importan mucho ya que pueden mezclarse con la trama principal del libro o para ayudar a que la profundización de los personajes sea más compleja. Eso es lo más complicado de todo, pero al fin y al cabo escribir es un trabajo tan hermoso como tedioso. A todo eso puedes sumarle que las editoriales nunca ven el potencial que tienes porque te pagan menos de lo que te mereces — Jungkook tomó un poco de aire porque se dio cuenta que había estado hablando muy rápido — Dicen que nunca deberías aceptar un contrato con una editorial por menos del siete por ciento.