Pude abrir los ojos unos instantes apenas tenía fuerzas para mantenerlos abiertos, la luz era cegadora, me entraba el pánico dormir y no volver a despertarme me desesperaba, mis lágrimas volvían a salir, sentía pánico y dolor mi cuerpo me dolía todo, no se cuanto tiempo llevaba así.
Volví abrir los ojos los cerraba y volvía abrir hasta que me acostumbre un poco a la luz, de pie a mi lado había una mujer mayor con uniforme que pensé que sería de enfermera, ella miraba uno de los aparatos, quería hablar pero no podía, moví mi mano con bastante dificultad hasta tocar su bata, ella se dio la vuelta y al verme con los ojos abiertos sonrió y acarició mi frente.
-Hola guapa por fin veo esos ojos abiertos, como estas.? Te duele?
Movi la cabeza en señal de si.
-Es normal, te subiré el calmante y verás como te encuentras mejor, en unos pocos días ya verás como escuchamos tu voz, no hay que tener prisa niña, estás muy débil, has perdido muchos kilos.
Debía de tener un aspecto horrible por que yo me lo notaba
-Tendras ganas de ver a tu familia?
Negué con la cabeza lo que menos quería es que me vieran así parecía una muerta.
-No me digas que no quieres ver tampoco a tu novia?
Mi novia pensé yo no tengo novia, pensé en Malak pero no podía ser desde que lo habíamos dejado no la había vuelto a ver y no creo que supiera de mi enfermedad yo no le dije nada.
-No puede ser que no quieras verla no sabes lo preucupada que ha estado por ti no se ha separado ni un segundo de tu lado, si no hubiera sido por ella ahora tu y yo no estaríamos hablando, ha luchado mucho por ti se nota lo mucho que te quiere.
Cómo decirle que no tenía novia y que no sabía de que me hablaba hasta que gire mi cabeza y entonces caí de quien se trataba Malú todas sus cosas estaban esparcidas por la habitación con su desorden habitual, su abrigo tirado en una de las sillas y no pude evitar sonreír pensar en que no lo había soñado cuando escuchaba su voz era de verdad había cuidado de mi todo este tiempo según la enfermera había estado a mi lado pero por que.
-Entonces que hago la hago pasar?
Asentí con la cabeza moría de ganas de verla.
En estos días volvía a morir con volver a fumar, no quería volver a caer en este maldito vició, ahí estaba paseando por el pasillo mientras una de las enfermeras arreglaban y aseaban a Gillian, cuando después de más de media hora salió me avalance a ella de lo normal siempre tardaban diez minutos y al tardar tanto me estaba preucupado demasiado, siempre pensando mal.
-Esta todo bien?
-Si si señorita Malú, a abierto los ojos.
-En serio esta despierta?
-Si y se muere de ganas de verla, cuando le he dicho que su novia estaba aquí y que no se había separado de ella sonrió esta esperando que entre, pero tenga paciencia aún no puede hablar.
-Muchas gracias.
Entre a toda prisa a la habitación y cuando la vi con esos ojos abiertos esos ojos que me volvían loca empecé a llorar, todos esos nervios acumulados salieron en ese instante, me agarre a ella llorando como un bebé su mano se enredo en mi pelo.
Así estuve unos minutos sollozando, cuando levante mi cabeza sus ojos se volvían aguados y brotaban las lágrimas que con mis dedos intenté pararlas.
-No llores, ya lo hago yo por ti, no sabes que susto llevo metido en mi cuerpo, pero por fin estas despierta, no sabes lo feliz que soy, ya veras todo va a salir bien, yo me ocuparé de todo te lo prometo, cuidare de ti no dejaré que te pase nada otra vez.....
Levanto su mano y uno de sus dedos se posaron en mis labios en señal de que callara estaba hablando por los codos de mi mismo nerviosismo.
Cuando entro en la habitación mi cuerpo se revolucionó, estaba muy guapa, eso sí tenía ojeras de no descansar lo suficiente, se acerco y se puso a llorar en mis brazos yo quería tranquilizarla pero apenas tenía fuerzas, mi voz aún no quería salir de mi garganta, solo pude mover una mano y acariciar su pelo mientras escuchaba sus lloros y no pude evitar que mis lágrimas volvieran a salir y sus dedos las pararon con una gran ternura, luego empezó hablar sin parar puse mi dedo en sus labios para que se tranquilizara.
-Lo siento lo siento, he hablado sin parar..... Estoy tan contenta..... Quieres algo agua?
Moví mi cabeza en señal de si tenía la boca seca cogió una botella la lleno de agua y muy despacio me fue dando sorbos de agua.
Malú fue muy atenta en los siguientes días, por las mañanas volvió a la oficina y por la tarde y las noches me hacía compañía, estaba a mi lado sobre mi aspecto parecía la novia de un cadáver, apenas podía hacer algo por mi misma y me daba mucha vergüenza que tuviera que hacerlo ella, Malú siempre sonreia estaba feliz a mi lado y yo al de ella, pasaba el rato hablando y escuchándola, hablaba de cualquier cosa trabajo como iba todo por la oficina que todos preguntaban por mi, me contaba chistes bastante malos en los cuales yo reía solo por ver el entusiasmo que Malú ponía por entretenerme, me leía el periódico sobre todo lo que a mi no me gustaba solo por hacerme rabiar, me gustaba tenerla a mi lado, la pillaba muchas veces mirándome y sonriendo pero nunca ninguna de las dos hablábamos de nuestros sentimientos, yo sabía lo que yo sentía por ella, estaba enamorada sobre todo lo que habíamos pasado, conocía sus dos caras y las dos me atraían pero no me atrevía a decirle que me moria por besarla, miedo a su rechazo, que podía ella ver en mi, siempre me había dicho que yo era una niña comparado con ella una mujer adulta pero joven forrada de pasta hasta morir, me dije a mi misma disfrutar de su compañía.
Uno de los días apareció con ella mi amigo Leo, sabía que había venido cuando yo estaba en coma que había sufrido mucho, tenerlo unos días a mi lado en el hospital gritando y riendo como solo el sabía.
Mi hermano seguía fuera llamaba todos los días los primeros días lo hacía con Malú yo apenas tenía fuerzas poco a poco fui pudiendo mantener una pequeña conversación, estaba con Laira quería madurar por sus hijos dos niños, hacíamos videollamadas los cuatro a Laira ya le empezaba a notarse su barriga pero lo extrañaba demasiado.
Ya llevaba un mes y medio en el hospital con terapia respiratoria mi pulmón iba mejorando pero aún me cansaba mucho al caminar pero Malú me obligaba todos los días a caminar con su ayuda aquel pasillo que ya me sabía de memoria, pero ese paseo iba a ser diferente, cuando los vi agarrados de la mano, quise correr pero no podía si lo hizo mi hermano abrazándome levantándome al aire y llenandome de besos.
![](https://img.wattpad.com/cover/290184297-288-k758428.jpg)
ESTÁS LEYENDO
Mi jefa
FanfictionMalú un diosa una fiera egocèntrica la principal heredera de una empresa multinacional, Gillian terminada de salir de la universidad una, estudiante brillante las mejores notas, en ninguna de las dos entraba en sus planes enamorarse un camino lleno...