Mi jefa

Cap 50

El jardín de mi casa parecía un parque de atracciones, mis sobrinos se lo merecían, era su primer cumpleaños y yo no dude en poner mi jardín y mi dinero.

-Te has pasado Malú.

Me rec
rimia Gustavo.

-Es su primer cumpleaños.

-Ellos no se enteran de nada.

-Ya les enseñaré yo las fotos.

Así llevaba horas haciendo fotos a los niños y a todo.

-Te gusta despilfarrar.

-Déjame en paz con mi dinero hago lo que me da la gana.

El rueda los ojos y se aleja con Laira, los críos han empezado andar como pequeños patos, cojo uno en brazos y el otro lo tengo agarrado de mis piernas, los subo en el tiovivo conmigo se ríen a carcajadas y verlos con esa cara de felicidad para mi es suficiente.

Gustavo viene a por ellos los invitados están llegando y los anfitriones tienes que hacer eso de anfitriones, yo me voy mezclando con los invitados hasta que mis ojos lo ven mi querido Padre al que hace que no veo y hablo desde meses desde mi última discursion con el nombre de Gillian en la mesa.

Pienso en que el no estaba en mi lista de invitados, lo veo hablar cariñosamente con Laira desde cuando se les ve tan complices, llega Gustavo con los niños, los besa los carga en brazos, que yo recuerde conmigo nunca lo hizo, me dan celos para que mentir.

A su lado una chica rubia posiblemente de mi edad o más joven, la coge de la cintura, su novia seguro, pero que viejo verde podía ser su hija, me entra mucha rabia, dejó la conversación que tengo con unos de los invitados, cojo una copa y voy hacia ellos que hablan sin prestar atención, el muy cabron ni se ha dignado a saludarme y me ha visto por que nuestras miradas se han cruzado pero si quiere jugar lo haremos.

-Papá.

Le digo al llegar a su lado.

-Malú hija.

Se acerca a darme dos besos fríos.

-No sabía que venías.

-Laira me invito.

La miró la fulmino con la mirada esta agacha la vista y susurra un lo siento se me olvidó avisarte.

-Hija te presento a mi novia Cleo.

Se acerca y me da dos besos sonoros y húmedos.

Gustavo por lo bajini me dice.

-Tu nueva mama....

-Imbécil..

Es mi contestación.

Mi padre sigue convensando con ellos sin importarle una mierda que estoy al lado me sigue castigando con su ignorancia

Gustavo se los lleva a una de las atracciones y entonces me quedo con Laira, no me apetece entablar una conversación con ella, estoy enfadada con el mundo, pero cuando intento irme ella me agarra.

-Espera Malú tenemos que hablar.

-No quiero discutir contigo.

-Yo tampoco pero necesito que me escuches.

-Esta bien tu dirás?

-Se que no te gusta que te pida perdón pero lo siento de verdad se me pasó, con los niños y el trabajo voy de cabeza, no tengo tiempo para nada.

-Te he dicho mil veces que bajes el pistón puedes trabajar en casa, cuida de los niños.

-Soy como tu activa, me gusta trabajar, quiero a mis hijos, quiero todo.