Cap 23

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Acepte ir a cenar con ella, la vi muy agobiada y me dio bastante pena o ese creí en un principio.

Agarro mi mano y esta vez no la solté, era la primera vez que me tocaba y su  piel era fina, su mano grande con unos dedos largos y uñas perfectas, al levantarme y estar tan cerca de ella mire su cara perfecta, su piel blanca sin ninguna arruga, baje la vista avergonzada.

-Vamos algo de comer te sentera bien, sigues muy pálida.

Las dos salimos de mi despacho ella delante y yo unos pasos detrás, se dio la vuelta y casi tropezamos.

-Perdón he parado sin avisar...

-Esta bien no pasa nada.

-Estás bien necesitas que te ayude para caminar.

-No.... No estoy bien...

Solo me faltaba que ella me agarrara entonces si que podría tener un desmayo menuda vergüenza.

Sonrió de manera tierna y se dio la vuelta, empezó a caminar y yo detrás de ella con un nudo en el estómago empezaba arrepentirme de haber aceptado su invitación.

Subimos en el ascensor en silencio, Malú accióno el botón del sótano donde estaba el pàrquing privado.

Yo seguía detrás de ella sin poder dejar de mirarla aunque estuviera de espalda, tenía un cuerpo atletico se notaba que le gustaba hacer deporte todo lo contrario que yo una negada me daba demasiada pereza.

La falda que llevaba era de tubo el cual le hacía un culo perfecto, no podía dejar de babear y en mi cabeza se vinieron imágenes de películas donde los protagonistas paraban el ascensor y daban rienda suelta y hasta creí por un momento que iba a suceder, ella levantó el brazo en dirección a los botones pero luego lo bajo, me decepcione para que negarlo.

La puerta del ascensor se abrió Malú salió primero y yo después, sacó del bolso un mando a distancia y un vehículo se encendieron las luces y menudo coche madre mía un Mercedes de alta gama no podía ser de otra manera.

-Que cochazo!

Exclame.

-Te gusta?

-Mucho.

Pasé mi mano por la carrocería, el coche estaba impoluto ni una mota de polvo, Malú abrió la puerta del copiloto para que subiera y al hacerlo me invadió un olor a nuevo, si por fuera estaba como nuevo por dentro podías reflejarte.

Malú subió y encendió el coche.

-Conduces tu?

Le pregunte.

Malú haciéndose la graciosa mirando detrás del coche y luego a mi.

-Solo  estamos tu y yo y a ti no pienso dejarte conducir.

-Por qué?

Me cruce de brazos haciéndome la ofendida

-Dicen que el coche y la novia no se dejan.

Me dice toda en serio mientras pone la primera y va saliendo del pàrquing.

-Pensé que no conducias?

Ya le pregunto cuando salimos a la carretera.

-Por que?

-Como siempre te llevan pensé que no tenías carnet.

-No tengo carnet pero como mi chófer se ha ido.

-No me jodas Malú para quiero bajar.

-Niña cuida esa boca..... Si que tengo carnet, no suelo conducir me gusta que me lleven.

Mi jefa Donde viven las historias. Descúbrelo ahora