2

2.1K 199 294
                                    

El clima era frío, casi como si el mundo supiera que era lo que estaba por pasar

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

El clima era frío, casi como si el mundo supiera que era lo que estaba por pasar. No había mucha gente en las calles, las carreteras estaban casi vacías de autos y algunas gotas de lluvia caían del cielo.

Maldita suerte la que se cargaba.

El auto rumbo a la sala de juntas se detuvo en un semáforo mientras el estadounidense bebía una malteada.

No tuvo tiempo para desayunar en la mañana, su chofer y guardaespaldas simplemente habían aparecido horas atrás, arrastrándolo fuera de la cama para llevarlo a una reunión con el consejo.

Al parecer los periodistas habían hecho su trabajo excepcionalmente bien alertando a toda la población, quienes no pararon de hacer publicaciones y pedir una respuesta a lo que acontecía.

Para USA era sólo un accidente, pero al parecer su gente lo veía como una posible declaración de guerra.

Estaban exagerando todo y eso lo ponía en muchos aprietos.

Tal y como había predicho noches atrás, fue convocado a una reunión de emergencia con su gobierno para hacer frente a la situación.

Mientras viajaba, logró hacer una llamada con uno de sus abogados, quien no se escuchaba para nada feliz. USA tampoco lo estaba.

Una vez llegaron, USA fue escoltado dentro del edificio, elementos de seguridad cubriéndolo de los camarógrafos.

Llegó a la sala de juntas y abrió la puerta con cuidado, ganándose las miradas de todos los que ya estaban adentro.

— Toma asiento, América. —Dijo uno de los hombres más viejos del aula.

Él rubio sacó una silla y se sentó en ella, quedándose en completo silencio, pues no quería hacerlos enojar.

De pronto, en la pared se comenzaron a mostrar varias diapositivas con las imágenes de lo sucedido en la fiesta.

Mentalmente se alagó al ser tan fotogénico incluso en esas situaciones.

Oh, ¿por qué eres tan atractivo, América?

Vio las bocas de los viejos y señoras moverse, pero su cerebro no alcanzó a registrar ninguna palabra.

— Entonces, tienes dos días para prepararte y viajar a Rusia— su abogado dijo, llamando su atención—. ¿Algo que agregar?

¿Ir a Rusia? ¿Qué? ¿Cómo? ¿Cuándo? ¿Dónde? ¿Qué se había perdido?

— ¿Ir a dónde?— se inclinó en su dirección.

Stephen entrecerró los ojos. USA no había estado prestando atención.

—A Rusia— habló entre dientes— tienes que viajar a su territorio y dejarte ver como si fueran amigos.

USA separó los labios. ¿Amigo de Rusia? Golpeó las manos contra la mesa.

|| On The Ground ||Donde viven las historias. Descúbrelo ahora