54

680 84 25
                                    

Reino Unido observó a su hijo caminar apresuradamente detrás de Rusia y no pudo evitar preguntarse si ya se iba

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

Reino Unido observó a su hijo caminar apresuradamente detrás de Rusia y no pudo evitar preguntarse si ya se iba. Apenas había llegado hace menos de una hora. ¿Ocurrió algo? ¿Se sentía mal?

La música bajó un poco de volumen y las luces volvieron a la normalidad, permitiéndole buscar a México y Canadá con la mirada, quizá ellos sabrían algo.

Sus propios amigos tampoco estaban, seguramente se habían ido a coger por ahí en algún rincón del salón. Siempre hacían eso. Las amistades de su pareja seguían ahí, en su mesa junto a él, pero parecían no tener ánimos para hablar.

Serbia y Croacia armaban barquitos de papel con las servilletas, decorándolos con dulces y haciendo una competencia por quien hacía el mejor. En opinión de Reino Unido, Croacia estaba dejando ganar a su pareja. Eso o realmente era un desastre haciendo manualidades.

Dirigió su atención a Suiza que se había separado de sus hermanos para buscar a su mejor amigo. Reino Unido nunca entendió eso. Suiza realmente no era pariente de los nórdicos, sin embargo, ellos se trataban como tal.

Tampoco entendió como alguien como España se hizo amigo del suizo. ¡Es que eran tan diferentes!

Suiza seguía desanimado. Aunque no tanto como semanas atrás. Al británico le agradaba Suiza, pero también le daba mucha pena su vida personal.

―¿Qué estás haciendo?―España llegó a sentarse a su lado después de ir a robarle el centro de mesa a Francia e Italia. Esperaba que no se dieran cuenta. Lo dudaba, ya que la pareja estaba muy ocupada comiéndose la cara -como le decía- y era imposible que su atención fuera a otro lado.

―Ame y Rusia ya se van―señaló.

España encaró una ceja y rio.

―Felicidades, vas a ser abuelo―se burló mientras buscaba a alguien con la mirada.

―¿A quién buscas?―el británico cuestionó a su novio.

―Austria dijo que Portugal estaba muy borracho―dijo moviendo la cabeza en varias direcciones, todavía buscando.

―¿Portugal bebe? Creí que no le gustaba.

―Lo hace, aunque no le gusta decirlo―dijo―pero Austria dijo que Portugal estaba vomitando en el baño hace media hora y todavía no aparece.

España se puso un poco enfermo ante la idea de su amigo bebiendo. Sabía que el portugués no era un bebedor, a menos que estuviese desesperado o muy triste y buscara compañía con una buena y fuerte bebida.

Tendía a alcoholizarse mucho en la época de la independencia de sus hijos. Brasil no lo sabía, porque su proceso de independencia fue relativamente tranquilo, pero Portugal sufrió mucho ante la idea de dejarlo ir, a todos de hecho.

―¿Quieres ir a buscarlo?―ofreció mostrándose también un poco preocupado.

―Iba a ir, pero no sé que tanto me odie ahora Portugal―suspiró.

|| On The Ground ||Donde viven las historias. Descúbrelo ahora