Prológo.

902 43 0
                                    

El principe Kim Jeong se dirigía a toda velocidad al despacho de su padre con el objetivo de hablar de manera sensata sobre el futuro de los nietos de la familia.

Sorprendido encontro al rey junto a su amante en un ambiente poco intimo. Una vez que notaron la presencia del principe ambos se separaron manteniendo distancia.

—Imagino que ya tomaste tú decisión.—Hablo el principe despectivamente mientras mantenia la mirada fija en aquella mujer que habia atormentado a su familia.

—Lo hice, me temo que no me agradeceras por ello.—Respondio el rey mientras tomaba de su cigarrera un tabaco.

—¿De verdad lo vale?, son solo niños.

—Es lo mejor.—El hombre enciende su cigarrillo dandole una gran calada burlandose sobre los sentimientos de su hijo.

—Por supuesto pero, ¿más que sus sentimientos?, ¿el escrutinio?, ¿más que tú gente?, ¿más que tú propia familia y más que tús hijos?

—Estaran bien. Tendran un futuro excelente juntos como soberanos y con ello herederos también.

—Mi hija, esto va destrozarla.—Suspiro exhausto, cansado de discutir por decima vez.—Si enserio tomas esa decisión al ver por tí que por los sentimientos de tús nietos quiero que tú y esa mujer se vayan, para siempre.

—Un hijo se puso encontra de su padre...

[...]

Los dos pequeños de la familia real se encontraban en su cuarto de juegos donde comúnmente pasan las tardes divirtiendose después de sus lecciones reales.

Aturdidos voltearon a la puerta que se abria de par en par, mirando fijamente al secretario privado de su majestad el principe Kim Jeong padre de la princesa Eun-ji y tío del principe Kim Taehyung, hijo de su hermano que fallecio hace dos años a causa de Leucemia.

—Señorita Lee, su majestad quiere ver al principe y a la princesa.—hablo dirigiendose a nuestra nana.

—Claro, vamos niños.—La mujer tomo de la mano a los pequeños dirigiendose al salón principal donde les esperaban.

Al llegar el principe los recibe con una sonrisa, que en su interior estaba luchando con la decepción y la tristeza.

—Su abuelo nos decepciono a todos, puso el amor antes que a la familia. Ahora quiero que me prometan una cosa, que ustedes jamás pondran a nada ni a nadie antes que su deber, y relación como futuros esposos.

Los niños expresaron confusión en sus delicados rostros cuyos denotaban sorpresa, sin tener alto conocimiento de lo que su padre y tío les acababa de comentar.

—Son familia sobre todas las cosas y jamás deben defraudarse, ¿entendido?

—Jamás...—Con una dulce voz respondio el pequeño principe mirando feliz a su futura prometida.

Jamás.—culmino la princesa.

Amor & Deber | Jungkook + Taehyung ©Donde viven las historias. Descúbrelo ahora