Capítulo trece

105 13 3
                                    

Descanzando en mi alcoba una inoportuna noticia se desato por todo el palacio. Mi mano derecha, el primer ministro vino a primera hora para hablarlo antes de que todo empeore.

—¿Qué hizo qué?—frunso el ceño.

—Su alteza el princie Eun Woo se tomo la libertad de investigar el pasado de esa mujer, con ello acorralo a el hombre misterioso que viene a verla seguido sacandole información.

—¿Qué tipo de información?

—La señorita Nae-Yeun estuvo embarazada, tuvo un hijo con un desconocido y ese tipo desagradable lo ha estado cuidando.

—¿Qué?—abro los ojos impresionada por lo enterado.

—Así es señora y tengo los documentos que lo comprueban, antes de que su hermano fuera detenido me los entrego personalmente para desenmascarar a esa mujer.

—¿Y ya lo sabe el rey?

—No lo sé mi reina, pero estoy seguro de que ya esta al tanto, de hecho ahora mismo ire a hablar con él.

Taehyung

Desde que traje a una amante al palacio todo se ha envuelto en un caos, problemas con todo el jodido mundo. La relaciones de estado con otros paises han bajado de nivel y los tratados internacionales son escazos.

La comunicación con Eun-Ji ha empeorado bastante, no hay día que no discutamos o nos vayamos a la cama enojados.

Y con mayor razón debo estarlo puesto a que mi mano derecha me informo que le habian llegado cartas últimamente y que en su mano posee un anillo disntinto al que yo le regale hace unos días.

Debo estar al tanto de ello.

Pero ahora necesito enfocarme en la desgracia que mi primo Eun Woo cometio. Acorralo a ese tipo golpeandolo hasta matarlo para sacar trapos sucios sobre Nae-Yeun.

He decir que estoy decepcionado con ella por haberme ocultado que tenia un hijo con otro hombre.

Aunque me duela debo tomar una decisión.

—¿Ya se ocuparon de mi primo?—pregunto al primer ministro.

—Si, esta en su casa y no causara más problemas. Su majestad, ¿Ya decidio que va hacer con la señorita Nae-Yeun?

—Decidí que voy a solicitar el divorcio.

—Excelente decisión majestad, la señorita Nae-Yeun pagara...

—No me entiende primer ministro.—Le interrumpo.—Me voy a divorciar de la reina.

—¿Qué?—Se exhalta.— ¿Por qué?

—Más allá de lo desilucionado que este con Nae-Yeun, ella espera un bebé mio. Si la castigo ahora, seria lo mismo que castigar a mi propio bebé.

—Su majestad, no le parece que divorciarse de la reina es una solucióm muy extrema.—Se levanta de su asiento golpeando con los puños mi escritorio.—Disculpe si estoy fuera de lugar pero, su majestad le ruego que lo considere. Si es por su alteza el principe Eun Woo, puede castigarlo sin afectar a la reina.

—Si castigo a Eun Woo, segundo en la linea del trono de nuestra familia eso pondria en peligro el lugar que ocupa en la sociedad y Eun-Ji terminaria en una situación dificil.

—Pero majestad-

—Si eso sucede, habra detractores que la criticaran por ser insensible cuanto más intente cumplir con sus tareas.

—¿A qué se refiere señor?—Frunce el ceño.

—Pienselo primer ministro, si castigo a mi primo y me divorcio de Eun-Ji la gente pensara que soy muy cruel. Por tradición las reinas no se casan por segunda vez, así que si me divorcio de ella quedara soltera. La gente sentira lastima, mientras hare reina a Nae-Yeun.

Amor & Deber | Jungkook + Taehyung ©Donde viven las historias. Descúbrelo ahora