・⁺ 𝐒𝐏𝐑𝐈𝐍𝐆 𝐃𝐀𝐘《𝙺𝚘𝚘𝚔𝚅》

Chapter 5

01 de abril.

El equipo de baloncesto estaba a solo un día del esperado partido, se la pasaban entrenando más de lo normal y debido a eso Jungkook no había tenido tiempo de ver al castaño más que en las pocas clases que compartían juntos. Se sentía frustrado pero no podía decepcionar al equipo que contaba con él.

Después de muchas suplicas de parte de Taehyung el azabache finalmente accedió a dejar el rencor atrás que tenía hacia Yoongi por haberlo golpeado, sin embargo en una que otra ocasión aprovechaba los partidos de practica para desquitarse un poco con él.

El entrenamiento terminó y Yoongi los mandó a descansar para estar listos para el día de mañana.

— ¡Jeon, ven acá! — llamó en un grito el pelinegro.

Jungkook quién estaba tirando algunas canastas se acercó a él.

— ¿Qué pasó? — cuestionó confundido ante la sonrisa que este le daba.

— Lo has estado haciendo bien en los entrenamientos, así que tengo algo para ti.

— ¡Joder! No me digas que te vas a hincar y me darás un ramo de flores. — exclamó fingiendo miedo.

— Ya quisieras. — se burló. — ¡Hobi, tráelo! — pidió en un grito e inmediatamente después el moreno llegó donde ambos estaban.

— Haz crecido tanto, mamá está orgullosa. — fingía llorar mientras abrazaba a Jeon.

— Ya Hobi, dáselo. — regañó al moreno.

Este extendió sus brazos y le entregó lo que estaba ocultando. El azabache tomó aquella tela roja y al extenderla se encontró con una playera del equipo que tenía su nombre grabado con un enorme numero 10. No pudo evitar sonreír grande al verse formar parte oficialmente del equipo, esa sensación de pertenencia que tanto le gustaba, aquella que confirmaba que existía.

— No vayas a llorar. — bromeó Yoongi. — Ahora vete que mañana tienes que estar al 100. — palmeo el hombro del contrario dándole una sonrisa.

Después de que se despidieran Hoseok se fue con Yoongi mientras que Jungkook salió a toda prisa a aquella aula con la esperanza de poder encontrar aún al castaño. Cuando estaba a punto de llegar logró divisar la luz encendida todavía y el corazón de este se emocionó demasiado.

Una vez frente a la puerta se asomó por aquel cristal opaco y logró divisar a Taehyung en una silla, giro la perilla y antes de decir algo notó que este se encontraba totalmente dormido recargado en la mesa que tenía frente a él. Jungkook entró lo más sigiloso posible para no despertarlo y se sentó en la silla que estaba justo al lado del castaño.

Estaba completamente fascinado con la escena frente a él, tanto que no pudo evitar mandar unos pequeños cabellos de este hacia los costados para poder visualizar mejor el rostro de Taehyung.

— Eres hermoso incluso cuando duermes. — susurró para sí mismo con cuidado de no despertar al contrario.

Una enorme sonrisa adornó su rostro. Una que se desvaneció cuando posó sus labios en la frente de Taehyung y lo sintió arder. Rápidamente llevó la mano a la frente de este y pudo sentir lo caliente que se encontraba. Se puso de pie y tomó al castaño de uno de sus hombros y comenzó a moverlo con cuidado buscando despertarlo, un enorme hueco se formó en el estomago de Jungkook cuando a pesar de las sacudidas este no se despertaba.

— ¡Tae, Tae! ¡Despierta, por favor despierta! — pedía con desesperación mientras agitaba con más fuerza a este.

Estaba comenzando a sentir su ansiedad aparecer, no fue hasta que Taehyung agarró las manos de este y las sacó con brusquedad de sus hombros.