Chapter 37

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Jungkook estaba dudoso sobre qué hacer. Puesto que a pesar que realmente deseaba ir detrás de su novio, quería respetar el hecho de que Taehyung necesitaba estar solo para pensar las cosas.

Era bastante curioso como todo había dado un giro, si se pone a pensar en el momento en que le dijeron que tendría que dejar Corea para venir a Thomasville jamás se habría imaginado que realmente este sitio le ayudaría a dar un gran cambio.

Aunque le hubiese encantado conocer desde antes a Kim, él es un fiel creyente de que las cosas pasan a su debido tiempo.

Y sin importar lo complicado que a veces son las cosas, realmente está disfrutando del hoy.

Tiene curiosidad, hay mucho que no sabe a cerca de su novio, la historia con los que solían ser sus amigos es una de las cosas que le gustaría saber. No ha querido presionar a Taehyung y preguntarle más sobre eso, porque es bastante evidente que para el castaño aquello todavía es algo doloroso.

Si algo ha aprendido en este tiempo es que una de las cosas que más detesta es que le hagan daño a su chico, jodidamente le molesta verlo triste. Por eso, al pensar en perdonar a Yoongi hay algo que le mortifica, pues no es que tenga algo en contra del pelimenta pero el hecho de que haya lastimado a Tae es más que suficiente para sentirte enojado.

Sus pensamientos son un caos, ha estado caminando sin darse cuenta que terminó afuera del aula donde su chico suele esconderse, su refugio.

La luz está encendida y sabe que está dentro, el almuerzo ya terminó y ambos deberían estar en clases pero parece que eso no va a suceder.

Jungkook está dudando en si debía tocar la puerta, sus ganas de ver a su novio y abrazarle le carcomen el alma.

¿Pero Taehyung querrá verle justo ahora?

Respira profundo y se deja caer frente a la puerta, quizás lo mejor sea darle más tiempo para pensar las cosas y cuando necesite de él entonces se encontraría esperándole.

Su corazón se siente agobiado al igual que la primera vez que se sentó en este sitio, las cosas son diferentes ahora evidentemente pero no puede evitar pensar en eso. Ha cambiado mucho y lo sabe, se atrevería a decir que ya no es el mismo chico que solía ser en Corea, ese imbécil arrogante que le gustaba estar por sobre los demás.

Ahora, ya no desea miles de ojos sobre sí. Solo quiere unos, cafés y brillantes, solo desea que sea Taehyung quién tenga sus ojos puestos en él y se sentirá satisfecho.

Deja caer su cabeza hacia atrás y se recarga en la pared, cierra los ojos e intenta no pensar en nada que le agobie, tiene que ser paciente.

Y lo hubiese sido de no ser por el fuerte estruendo que proviene del aula donde su novio está, se pone rápido de pie y sin dudarlo abre la puerta. Taehyung es el único ahí y parece estar pasando por una crisis, pues está lanzando todo contra el suelo. Sus ojitos y nariz están rojas, prueba de que ha estado llorando y Jungkook siente su corazón romperse al verlo de esa manera.

Se acerca a él a toda prisa e intenta detenerle.

— ¡Tae basta! — pide tomándolo de los brazos para que deje de lanzar cosas.

El castaño no le escucha y sigue forcejeando, buscando zafarse del agarré de Jungkook, mientras llora con más fuerza, porque su corazón está confundido y duele.

Mierda que si.

— ¡Déjame! — pide desesperado — ¡Jungkook suéltame! — insiste pero el azabache no le suelta, si no todo lo contrario, se aferra más este y le atrae hacia sí para envolverlo entre sus brazos, Taehyung se sigue resistiendo pero poco a poco deja de forcejear — P-por favor... Solo, d-déjame.

・⁺ 𝐒𝐏𝐑𝐈𝐍𝐆 𝐃𝐀𝐘《𝙺𝚘𝚘𝚔𝚅》Donde viven las historias. Descúbrelo ahora