・⁺ 𝐒𝐏𝐑𝐈𝐍𝐆 𝐃𝐀𝐘《𝙺𝚘𝚘𝚔𝚅》

Chapter 63

No sé porque a algunos no les está apareciendo este capítulo TT

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El ambiente en aquel lugar se hallaba saturado con un torbellino de emociones negativas, tejiendo una atmósfera inusualmente opresiva. Jungkook estaba consciente que esto no se sentía como otras veces. El transcurso del tiempo parecía haberse alargado, dejándole en la incertidumbre acerca del estado de Taehyung, lo cual lo llenaba de una alarmante inquietud. Una sensación de agobio se aferraba a él como una sombra persistente. La situación seguía siendo esquiva para su mente; apenas momentos atrás, había estado celebrando con exuberancia la victoria en el torneo, pero en un abrir y cerrar de ojos, esa efervescencia se esfumó al ver a Taehyung derrumbarse en el suelo.

Un dolor punzante retorcía su estómago, mientras un torbellino de emociones se agitaba en su interior como una vorágine insaciable. Los nervios lo acosaban, pero el miedo predominaba con una intensidad abrumadora. De repente, todas las alarmas en su ser se activaron, permitiendo que una realidad que había evitado obstinadamente durante demasiado tiempo se abriera paso ante él.

Se aferraba con desesperación a la necesidad de mantener una perspectiva positiva, consciente de que cada vez que permitía que su mente se sumergiera en la situación, la inquietud se intensificaba, horadando sus pensamientos como una plaga persistente. Sin embargo, la culpa acechaba en las sombras, se anidaba en su interior con una pesadez que parecía aplastante.

Lamentaba profundamente no haber ejercido más presión sobre Taehyung en relación a su salud. Recordaba vívidamente cómo había decidido respetar la petición de su novio de darle tiempo para discutirlo, pero ahora se atormentaba con la idea de que tal vez esa consideración había sido un error. Los "y si" invadían su mente: ¿Y si hubiera insistido más? ¿Y si hubiera profundizado en sus preocupaciones?

La realidad le golpeaba como un vendaval de arrepentimiento. Jungkook se reprochaba no haber sido más enérgico en su afán por entender la situación de Taehyung. La incertidumbre se tejía con la retrospección, y el peso del arrepentimiento era difícil de sobrellevar. Cada vez que recordaba la imagen de Taehyung desplomándose, una sensación de impotencia lo inundaba. Había una lucha constante entre el deseo de haber actuado de manera diferente y la realidad inalterable que enfrentaba.

Los recuerdos de la última vez que se sintió de esta manera parecían esfumarse en la distancia, mientras sus ojos ardían con una urgente necesidad de liberar las lágrimas que amenazaban con brotar. Sin embargo, aunque la tentación de dejar que esas lágrimas fluyeran era fuerte, se aferraba a una determinación inflexible, consciente de que debía contenerlas. Había una voz interior que insistía en que debía mantener la fe en que todo se resolvería, a pesar de la sombría incertidumbre que se alojaba en lo más profundo de su ser. Se convertía en un acto de fuerza mantener esa esperanza, como si su mera voluntad pudiera obrar algún tipo de magia y cambiar el curso de las cosas.

Mientras el tiempo pasaba en esa sala de espera, su mente se llenaba de un torrente de promesas silenciosas. Juró ser un guardián más vigilante de la salud de su novio, asumiendo la responsabilidad personal de garantizar que cada medicamento se tomara en el momento preciso, y que las dietas prescritas fueran rigurosamente respetadas. Era como si estuviera haciendo un pacto consigo mismo para evitar que la agonía de situaciones similares se repitiera. Esta era la segunda ocasión en que se encontraba esperando en esa misma sala de hospital, pero ahora había una diferencia abismal en su percepción. La intensidad emocional era abrumadora, una sensación completamente distinta a la vez anterior. No podía evitar temer que esta intensidad aumentara aún más si en el futuro tuviera que volver.

La angustia y el anhelo se entrelazaban en una danza tumultuosa en el escenario de su mente. Las promesas que había tejido eran su ancla en medio de esta tormenta emocional, una forma de darle sentido y propósito a la incertidumbre que le rodeaba. Con cada latido de su corazón, renovaba su compromiso consigo mismo y con Taehyung, aferrándose a la creencia de que su cuidado y atención podrían marcar una diferencia crucial en el camino que tenían por delante.