Chapter 59

5.6K 731 155
                                    


Entre el bullicio ensordecedor del lugar, Yoongi luchó contra las olas de gente a su alrededor, decidido a abrirse camino hasta el lugar donde los chicos y su madre se encontraban. Sin embargo, al llegar, se encontró con una sorpresa desconcertante: no había rastro alguno de Hobi y Taehyung. La confusión se apoderó de su mirada, reflejando su preocupación mientras se acercaba al sitio.

— ¿Y los chicos? — fue lo primero que preguntó, su voz llenándose de inquietud.

Su madre, visiblemente sorprendida por su presencia, parpadeó un par de veces antes de observarlo con desconcierto.

— Cariño, ¿qué estás haciendo aquí? Ellos fueron a comprar algo para beber — respondió, tratando de comprender la situación.

Yoongi asintió, tratando de calmarse mientras procesaba la información. — Hmm, ya veo — dijo con comprensión. — Solo quería dejarle mi celular a Hobi. Me siento más tranquilo si sé que él lo tiene.

— Si quieres puedo entregárselo cuando vuelva— su madre ofreció, a lo que el pelimenta aceptó entregando el aparato.

— Gracias — dijo con una leve sonrisa, su mirada escaneando nerviosamente el entorno en busca de cualquier señal de su novio. — ¿Hace mucho que se fueron?

La mujer consultó rápidamente la hora, frunciendo el ceño al darse cuenta de que había pasado más tiempo del esperado.

— Sí, ha pasado un buen rato. Seguramente la cafetería está bastante llena en este momento. No te preocupes, estoy segura de que no tardarán mucho en volver — aseguró, intentando tranquilizarlo.

Quizás Yoongi estaba permitiendo que su mente divagara demasiado, dejándose llevar por la inquietud que sentía en su pecho. Tal vez, esta sensación se debía a su conocimiento de que había cierto rubio con el que podrían cruzarse. Recordó vívidamente la última vez que tuvo que intervenir para proteger a Taehyung durante su encuentro con Jimin. Fue precisamente porque no ignoró la posibilidad de que algo así pudiera suceder que logró evitar que la situación se saliera de control. Aquel día, se sorprendió enormemente al ver a Taehyung en las gradas, sin tener idea en ese momento de que era a Jungkook a quien iba a ver. Sin embargo, cuando consideró la posibilidad de que él y Jimin pudieran encontrarse, se mantuvo en estado de alerta. Y fue gracias a eso, que pudo intervenir a tiempo y evitar consecuencias desastrosas.

Su madre continuaba diciéndole que no se preocupara, que era mejor que se marchara pues no faltaba mucho para que fuera el turno de su equipo para jugar. Pero aunque intentaba mantener la calma, una pequeña voz de preocupación continuaba susurrando en su interior. No podía evitar sentirse nervioso. Por lo cual decidió dejar de dudar y eliminar las inquietudes por su cuenta.

— Me pasaré rápido por la cafetería. Estaré mucho más tranquilo si puedo asegurarme de que todo está en orden — declaró con determinación, sin darle tiempo a su madre para responder.

Aunque comprendía que para su madre su comportamiento pudiera resultar extraño, sabía que había aspectos de la situación que eran difíciles de explicar completamente. A pesar de haber compartido gran parte de lo sucedido en su ausencia, había detalles que prefería mantener en silencio.

Sin esperar más, se alejó decidido, con la intención de disipar las inquietudes que lo acechaban. Mientras caminaba hacia la cafetería, una mezcla de nerviosismo se apoderaba de él. En el fondo, esperaba sinceramente que sus temores resultaran infundados y que estuviera exagerando la situación.

Se imaginó que los chicos habrían ido a la cafetería más cercana, así que prácticamente corrió para llegar lo más rápido posible. Al divisar la gran cantidad de personas presentes, sintió un pequeño alivio, tratando de convencerse a sí mismo de que todo estaba bien y que quizás tal como su madre mencionó, la demora de los chicos se debía a la multitud en el lugar.

・⁺ 𝐒𝐏𝐑𝐈𝐍𝐆 𝐃𝐀𝐘《𝙺𝚘𝚘𝚔𝚅》Donde viven las historias. Descúbrelo ahora