Corazón de Cristal #1

•Capítulo 10•

Maratón 3/3

•RECUERDOS DOLOROSOS•

LISSA

—Papá eres tú...

Veo borroso por las lágrimas que derramó, estoy sentada en la sala de la clínica psiquiátrica, la figura a lo lejos se parece a mi padre, pero por más que lo llamo el no voltea a mirarme.

—Ven por favor...... —me levanto en para caminar tras la figura que está cerca del patio, un lugar donde he pasado la mayoría de las tardes con la mirada perdida.

Necesito decirle que lo siente, que no pude cumplir con lo que me pidió, no soy tan fuerte como el pensaba. —el pecho me duele, siento un nudo en la garganta que no me permiten hablar—trato de caminar más rápido, pero la figura se pierde entre los árboles del patio.

—Papá no te vayas... —grito trato de buscarlo pero ya no está. La figura desaparecio entre mis manos.

Otro día más que no lo alcanzo.

—Lo prometiste.... —digo al aire— Prometo ser más fuerte papá, prometo salir de aquí. —susurro lo último entre sollozos que no me permiten escuchar nada más que las voces a lo lejos.

Me levanto exaltada de la cama. Estoy sudando y mi corazón palpita muy fuerte. Tenia más de 6 meses sin soñar con el, es un tema demasiado delicado para mi.

Respiro lentamente para calmar mi corazón.
—Necesito una ducha fría— digo en voz alta, me levanto para bañarme y cepillar mis dientes, tenia mucho sin soñar con él.

Cuando terminó me pongo mis bragas y sostén de algodón, sólo uso encaje para otras ocasiones.

Elijo un shorts azul y una blusa blanca con una sola manga y mis tenis Nike, me hago una coleta y sólo me pongo brillo labial y crema para disimular las ojeras.

—Buenos días, —digo cuando entro en la cocina, Abi hizo chocolate y me lo puso en mi termo— gracias, eres un amor.

—Yo también. —dice Liah desayunando su waffle con nutella de maní, solo bebo chocolate amargo y caliente por las mañanas, Abi esta desayunando con un jugo verde, la que menos saludable come es mi loca.

Espero que terminen de desayunar mientras las espero todavía pensando en la pesadilla, Liah me mira sabiendo que volví a tener las mismas pesadillas pero solo niego.

No quiero hablar sobre eso.

                                                *****

Estoy en mi última hora de clase con la señora Stella, ella es la que nos pone planos y demás, nos mandó hacer un plano para un edificio de 10 plantas pero que cada uno les de su toque.

Miro a Alex, desde aquella noche nunca volvimos a hablar más de lo necesario, aunque me parece buena persona, por eso lo elegí cuando la profesora dijo que para hacer los planos tenía que ser en pareja.

—Hola Lissa, —dice sonriendo— ¿cuando empezamos?

—Hola, —le devuelvo la sonrisa— puedes ir a mi casa mañana a las 4 PM.

—Mañana no puedo, ¿podría ser hoy?

—Esta bien, pero tendría que ser aquí en la biblioteca.

—No tengo problemas con eso. Te busco a las 4pm.

La clase termina, y voy directo al gimnasio.

Saludó a todas las chicas cuando llegó, después voy a la oficina para hablar con mi manager.