Corazón de Cristal #1

•Capítulo 15•

•SU SONRISA•

DAREL

Son las 7am cuando despierto, ayer el día fue muy movido y beneficioso, —siempre he pensado que estás ferias valen la pena— me encontré con el señor Stafford uno de los dueños de Intepridec Staff. Un gran amigo de mi padre, Además de gran empresario. Desde que tengo memoria siempre voy junto a mi padre a sus viajes de negocios, Mamá pensaba que no me gustaba pero lo cierto es que ponía atención a todo lo que veía y me enseñaba mi padre.

Voy al restaurante después de ducharme y resolver algunas cosas desde aquí, deje el club a cargo de Joshua, no fue la mejor idea, pero confío en el y se que puede encargarse de todo, aunque haga de las suyas.

—¿Que vas a pedir? —pregunta Ryan, cuando llego a su lado.

—Salmón con queso de trufas, y zumo de naranja sin azúcar. —ya que en este restaurante no tienen nada que llame mi atención.

Lo sé, culpen a mi madre.

El se levanta para hacer los pedidos. Cuando veo que Laurel entra con mi fiera, le hago una señal para que se sienten conmigo, hace una mueca pero le sonríe a Lau para venir con nosotros. Sonrió recordando lo enojada y sonrojada que se puso ayer cuando le hablé.

¿Que me estas haciendo pequeña fiera?

—Buenos días.  —saludan al conjunto.

Le hago un asentimiento, miestras mi amigo les responde, se sientan una a cada lado de nosotros, para después pedir su desayuno. —Lissa pide, panqueques, miel y frutas con un vaso grande de chocolate amargo, miestras Lau pide todo lo grasoso y cero saludable, con un vaso de agua.

Desayunamos cómodamente, hablando de tribales y de sus experiencias en la feria, no puedo negar que este año la feria a mejorado significadamente, aunque estoy seguro que la razón principal es, el cambio de los administradores que estaban a cargo. Estaban robaban todo el dinero de las recaudaciones sin hacer nada importante ni útil para los universitarios.

—¿Como la está pasando Joshua en el club?. —pregunta Lau, la miro divertido.

—Pues ya te imaginarás.

—Ojala y no crea un desastre de aquí al lunes. —río porque estoy seguro que hará más que eso.

Miestras Lau habla, observó a mi amigo, —ahora entiendo todo— ¡joder! Estaba delante de mis narices y yo no me di cuenta.

—Buen provecho, yo me retiro. —dice la fiera, la miro y me devuelve la mirada enojada, le sonrió.

—Gracias, —digo fingiendo estar desinteresado. —igual nos veremos en un rato. —la molesto.

—Espérame que te acompaño. —cuando las chicas se retiran, miro a mi amigo.

—¿Que? —pregunta el.

—¿Por qué no me dijiste?.

—¿Decirte que? —dice el haciéndose el confundido.

—¿Como que, el que? Por Dios Ryan, no nos guardamos nada —le digo exasperado— mucho menos entre nosotros.

—Que querías que te dijera, si Joshua ya le viera puesto el ojo.

—Si, pero no es lo mismo, —le digo, lo obvio —además lo rechazó.

—Si, eso mismo, —dice apartando la mirada— qué te hace pensar que no me dirá lo mismo.

—Joder hermano, que dices.

—Dejemos el tema, Laurel es prohibida, no haré nada para cambiarlo.

—No me digas que estás pensando el el pasado. —lo miro— Ryan eso no fue tu culpa y lo sabes.