CELDA 001 [+21] [LIBRO 1] [TERMINADO]

CAPÍTULO 60

BABI

Salgo del coche corriendo y abro la puerta de casa con una sonrisa.

– ¡SHANA! - grito nada mas entrar.

– ¡BABI! - grita saliendo desde la cocina.

Dejo caer el bolso y me lanzo a sus brazos. Las lágrimas se me saltan y no puedo contener lo feliz que me hace tenerla conmigo de nuevo.

– Estaba deseando verte – me dice dándome besos.

– Yo también – le sonrío.

– ¿Como va todo?

– Muy bien. Tengo mil ganas de enseñarte mi casa.

– Ya quiero verla – aplaude.

– ¿Te vas a quedar con nosotros?

– Creo que me voy a quedar aquí – hace un gesto nervioso.

– Sabes que no nos molestas, ¿verdad?

– Ya, pero aquí tampoco – sonríe.

– Bueno, piénsatelo.

Me levanta la camiseta emocionada y abre la boca.

– Tia ya se te nota un poco – dice ilusionada.

– Ya – me río – Varek me lo recuerda cada dos segundos.

– Estás guapísima – asiente – te está sentando genial.

– A ver si la siguiente eres tú – levanto las cejas.

– Uf, mejor no. Contigo me basta – se ríe.

La vuelvo a abrazar y voy a la cocina a saludar a mi padre.

– ¿Y Sarah? - le pregunto.

– Ha salido con Drake. Vendrán en nada.

– Vale.

Vuelvo al salón y Varek está abrazando a mi amiga. Me encanta ver a toda mi familia junta.

– ¿Cómo te está yendo por allí? - le pregunta.

– Pues antes se lo estaba comentando a Tom, está todo bastante tranquilo. Tenemos mucho trabajo por la falta de personal pero en cuanto a los presos demasiado bien.

– Eso es bueno – asiente.

– ¿No has notado nada raro? - pregunto sentándome con ellos en el sofá.

– Que va tía. Es increíble el cambio que está pegando en tan poco tiempo. No hay a penas peleas, no se meten con nosotros...

– Vaya – me sorprendo – ojalá hubiera sido así cuando estaba yo.

– Yo creo que ha sido porque los problemáticos no están. Ya sabes que los demás no daban problemas.

– Gracias – dice Varek aludido.

– Yo te quiero Varek, pero eras un coñazo – ríe Shana.

– Lo confirmo – le digo sonriendo.

– En fin – nos mira con mala cara – voy a saludar a Tom.

Le lanzo un beso y niega riendo.

– ¿Y tú? - me pregunta - ¿Tienes alguna novedad?

– Poca cosa. Desde que te conté lo de la amenaza no ha pasado nada más.

– A ver si sigue así por largo tiempo. He tenido miedo la verdad – dice en voz baja.

– Yo también. Entre nosotros nos protegemos pero me da mas miedo por ti. Que estés allí sola no me gusta nada.