CELDA 001 [+21] [LIBRO 1] [TERMINADO]

CAPÍTULO 64

BABI

Me quedo en shock ante la noticia que me da mi amiga. Lo veía tan imposible que viviera aquí que deseché la idea.

– ¡Dios! - exclamo abrazándola – Es lo mejor que podrías haberme dicho, de verdad.

– Ahora vamos a poder estar juntas – sonríe de oreja a oreja.

– Estarás contento, ¿no? - le pregunto a mi padre.

– Mas de lo que te imaginas – asiente.

– Me alegro un montón de verdad – los abrazo.

– Tenemos que irnos – dice mi padre – pero mañana nos vemos y nos cuentas sobre tu ecografía. Tenemos unas ganas increíbles.

– Claro. Veniros a cenar – les digo.

– Dale la noticia a Varek de nuestra parte.

– En cuanto llegue le digo – aseguro – Tendréis que celebrarlo, ¿no?

– Si, por eso nos vamos. He reservado en un restaurante – sonríe mi padre.

– Pues pasarlo bien – le doy un beso a cada uno – nos vemos mañana.

Me despido de ellos y espero a que Varek llegue de hacer la compra. Lo he mandado solo poniendo la excusa de que estaba cansada. En verdad es que hoy no me apetece salir de aquí. Tengo unas pintas horribles y no tengo ganas de cambiarme.

De haber sabido que vendrían ellos no le hubiese dicho que fuera. Pero bueno, luego le daré la sorpresa. Seguro que se alegra de que Shana esté con nosotros.

Preparo la cena para que cuando venga esté lista. Por lo menos que vea que hago algo por la vida.
- Barbie – exclama desde el salón – estaba el supermercado petado. Que asco de gente, ya no voy más.

- ¡La próxima voy yo! - digo desde la bañera.

- ¿Donde mierda estás? - exclama perdido.

- En la bañera – me río cuando lo escucho en el pasillo.

- Anda que esperas. Yo como un tonto comprando y tú como una reina.

- Lo soy – lo miro cuando entra por la puerta.

- Desde luego – afirma mirándome.

- Entra corre – le hago sitio – tengo algo que decirte.

Se quita la ropa rápidamente y entra sentándose frente a mi.

– Barbie cabrona – pone cara de dolor – está el agua ardiendo.

– Es que tenía frío – me encojo de hombros.

– No tienes ni idea de regular el agua – dice negando con la cabeza.

– Cállate y escuchame – le echo agua en la cara.

– A ver, dime.

– ¡Shana va a vivir con mi padre! - exclamo chapoteando en el agua.

– ¡¿Qué dices?! - grita sorprendido.

– Si – aplaudo – ya está aquí. Han venido esta tarde.

– ¿Y ya se queda para siempre?

– Si – sonrío – excepto algunos días que irá a visitar a sus padres. Pero si ya se ha instalado.

– Vaya alegría. Por fin estamos todos juntos.

– Es fantástico – chapoteo de nuevo llenándole la cara de espuma.

– Estate quieta – se limpia con fastidio.

– Es que estoy feliz – lanzo agua a su cara de nuevo.