✳️ 044 ✳️

222 28 2
                                    

Cuando puse las llaves en la perilla de mi casa y abrí escuché un fuerte ruido en el segundo piso.. Era el estruendo de una puerta al ser cerrada violentamente. Caminé unos pasos y vi la luz de la cosina encendida, me asomé y Arón estaba que hechaba humo de lo enojado que estaba.

Solo tenía una pregunta en mi cabeza... ¿Le hablo o no le hablo?.

-Tu eres el que dice que esta mal espiar...

Tragué saliva al escuchar la sería voz de Arón, no podía negar que se veía intimidante pero también muy sexi.

-No quiero problemas y menos ahora que estas... Mmm... ¿Enojado?–Pregunté dudoso.

-No estoy enojado, solo es estrés–Arón suspiró.

Nos quedamos en silencio unos segundos, Arón se asomó a la puerta de la cosina y al ver la luz del segundo piso apagada cerró la puerta y me miró.

-¿Dónde estabas que llegaste a esta hora?–Preguntó al elevar una ceja.

Me alejé de él y sabía que no podía decirle lo que hice con Nicky.

-Estaba aburrido y salí, así como tu y ella estaban aburridos y se fueron a pasar tiempo a solas–Sonreí levemente y me recosté al mesón.

Arón rio suave y se me acercó acorralandome.

-Si lo que insinúas es que tu madre y yo nos acostamos, te informo que no pasó nada, estábamos en la casa de tus abuelos–Susurró mientras acercaba su rostro al mío.

-¿Enserio?–Pregunté dudoso.

-Ujum, enserio, además sólo quería estar aquí para besarte... Llegué temprano para eso pero no estabas...

Me mordí el labio y me di un golpe mental, y yo pensando que se habían ido en plan romántico y por eso accedí a verme con Nicky, quería pagarle con la misma moneda.

-¿Y cuando piensas besarme? –Pregunté cuando puse mis manos en su pecho.

Arón sabía que con esas palabras le daba la autorizacion para hacer conmigo lo que quisiera... Así que así lo hizo... Unió nuestras bocas en un beso lento pero muy profundo, bajó sus manos de mi cintura a mis piernas y me subió al mesón metiendose entre ellas acercando más nuestros cuerpos.

Enredé mis dedos en su sedoso cabello y lo apreté con fuerza cuando mordió mi lengua.

-¿Y eso por que fue?–Pregunté agitado cuando dejé sus labios.

-Por qué hueles a un perfume que no es tuyo y mucho menos mío–Arón pasó sus labios a mi mejilla. -Me aprendí de memoria el olor de todos tus perfumes... Y este es muy fuerte...

-Se pudo pegar–Hablé jadeante por sus labios que estaban en mi cuello. -No importa...

-Dejemos ese tema–Arón volvió a acercar nuestros rostros y sonrió. -No quiero sentir ganas de matar a alguien..

Eso había sonado lo mas tóxico y posesivo del mundo pero a mi me gustaba... Me encantaba para decir la verdad.

Nuestros labios se volvieron a unir en un apasionado beso mientras nuestras manos recorrían nuestros cuerpos otra vez. No negaria que tenía unas enormes ganas de subir a la habitación y gemir a gritos sin control por estar con él pero el solo recuerdo de mi madre me hacia sentir una punzada en el pecho.

Nuestras camisas desaparecieron, me recosté sobre el mesón y cerré mis ojos disfrutando de los besos de Arón sobre mi abdomen y por que tenía su lengua en mi hombligo... Su lengua recorrió mi cuerpo hasta llegar a mis pesones, tomó uno entre sus dientes y lo empezó a moder suave mientras pasaba su lengua.

Cuando iba a gemir con fuerza la puerta fue tocada.. Nos separamos rápidamente para mirar hacia allá y al ver que la perilla se movía mucho nos pusimos nerviosos.

-¡¿Arón por qué cerraste la puerta con seguro?!–Preguntó mi madre con algo de molestia.

Me bajé del mesón y tomé mi camisa, Arón tomó la suya y se la puso, me iba a ir por la puerta trasera pero él me tomó del brazo y me dio un casto beso para dejarme ir.

Mi madre seguía refunfuñando de mal humor mientras peleaba con la puerta.

No me fui y me asomé un poco por la pequeña ventana para curiosear.

-¿Por qué cerraste la puerta con seguro?–Preguntó mi madre sería cuando Arón abrió la puerta.

-Pues... Por que...–Arón hizo silencio nervioso un cuarto de segundo hasta que tomó una postura más firme. -Eso no importa, lo importante es saber si ya estas mejor, ¿ya se calmó tu humor?.

-Un poco–Ella suspiró y se cruzó de brazos. -Sigo enojada por qué no me quieres dar un hijo..

-Lorein, por favor no otra vez con ese tema–Arón suspiró y fue a la nevera por una cerveza. -Ya lo hablamos y tus padres están de mi parte...

-Arón soy una mujer hecha y derecha, no tengo 15 años para que se metan en mi vida, te recuerdo que tengo 37 años y puedo hacer con mi vida lo que quiera...

-Pues bien–Arón se giró a verla. -Quieres un bebé tenlo con quien quieras menos conmigo... Te lo repito, tengo muchas deudas como para pensar en un hijo ahora...

-¡¿Acaso crees que no podré trabajar para ayudar?!–Mi madre se puso histérica nuevamente. -¡Bajé para hablar tranquilamente contigo pero no quieres!.

-La única que grita eres tú Lorein–Arón suspiró pesado. -Ademas tu misma lo dices, ya no eres una jovencita... 37 años y un embarazo a tu edad no se sabe que complicaciones traerá...

-Mejor me voy antes de que te golpee Arón, pero esta noche duermes en el sofá... No quiero verte por que no respondo por lo que haga...

Mi madre se fue enfurecida y Arón se sentó en el mesón abrumado... Y yo pensando que ellos dos no peleaban, pero ahora me doy cuenta que lo hacen es a escondidas mía.

¿Que mas cosas ocultara mi madre?.

Impossible LoveDonde viven las historias. Descúbrelo ahora