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Estaba durmiendo pero sentía unas cosquillas en mi mejilla... Se sentía tan bien que no quise abrir mis ojos para seguir disfrutándo pero esa linda voz en mi oído me hizo remover.

-Oye dormilón, despierta-Habló Arón en mi oído.

Sonreí y me giré para abrazarlo pero no abrí mis ojos.

-Dennis...

-Dejame dormir-Protesté metiendo mi rostro en su cuello.

-Por más que quiera no puedo, debo decirte que hoy vendrán tus abuelos, tu padre y tu hermano a almorzar...

Abrí mis ojos de inmediato y lo miré.

-¿A que vienen?-Pregunté con molestia obvia.

-Tu madre los invitó, tus tíos también estarán...

Bufé y me senté molesto, miré el reloj y eran más de las nueve..

-¿A que horas llegan?-Pregunté.

-A las 11 llegan tus abuelos, ayudarán con la preparación del almuerzo...

-Gracias por avisarme, me voy-Me levanté pero Arón tomó mi mano y me jaló para sentarme en sus piernas. -Arón...

-¿No puedes quedarte?-Preguntó suave.

-No me quedaré a ver como hablan mierda de mi, el único ser que vale la pena de los invitados es Jack y quiero verlo pero...

-Quédate en casa, no tienes que estar con nosotros en la mesa-Él tomó mi mano y la besó. -Diré que estas resfriado y que te quedaste en la habitación, verás a Jack y además no te tendré lejos...

Cuando iba a hablar él me besó... Mi voluntad se doblegó a él y olvidé todo para seguir su beso, sus brazos me rodearon pegándome más a él a lo que mi cuerpo reaccionó con un temblor.

-Me encanta como haces cada vez que te tengo entre mis brazos-Susurró Arón mientras me dejaba sobre la cama.

Sonreí contento cuando metió su mano debajo de mi larga camisa, eleve un poco mi trasero y dejé que bajara mi ropa interior.

-Arón-Gemi cuando tomó mi miembro.

Él volvió a besarme y me empezó a masturbar en un ritmo constante, mis gemidos eran cayados por los hambrientos besos que nos dábamos hasta que me obligué a dejar sus labios para sacar de mi el placer que daba.

Arón me miraba disfrutando de verme gemir sin control alguno por los movimientos de su mano... Cuando pensé que no podía sentirme mejor él movió su mano más rápido haciéndome correr en un gran orgasmo.

-Te vez muy lindo cuando empiezas a gemir descontrolado-Arón me dio un casto beso y rio suave.

Le dí un suave golpe y busqué refugio en su pecho.

-Te traje desayuno pero ya se enfrió... Lo caliento y te lo subo otra vez?-Preguntó dándome besos y caricias.

-No, quédate así hasta que me duerma otra vez-Elevé mi rostro y le di un suave y lento beso en los labios. -Me gusta verte así y no con cara de puño...

-Digamos que tus gemidos me quitan todos los malos ratos.

Reímos suave y suspiré... Todo parecía tan bonito, tenerlo así para mi y estar entre sus brazos, sus besos y sus caricias, todo era como un sueño que acabaría en menos de dos semanas.

-¿Ellos vendrán por tu boda verdad?-Pregunté con desánimo.

-Ujum...

Esperé algo más pero Arón no dijo nada.

-¿Ya compraste tu traje?-Elevé mi vista y él asintió. -¿Ella ya tiene su vestido?.

-Se lo entregan la otra semana-Arón suspiró pesado. -Ya Dennis, no quiero hablar de eso...

Arón se alejó de mi y se levantó de la cama molesto.

-¿Por qué te molesta que hable de tu matrimonio?-Pregunté serio.

-Por qué si.. Y no quie....

-Esa no es una razón Arón-Me levanté y lo miré fijamente. -Ya estás muy grandecito como para dar razones estúpidas... No te debe afectar por que debes estar feliz, no muchas personas se casan con las personas que aman...

-Dennis...-Habló entre dientes.

-¿Que te molesta?-Volví a preguntar. -¿Acaso cuando le propusiste matrimonio a mi madre no la amabas? Por que ella si esta muy entusiasmada del amor que se tienen y de los hijos que le darás...

-¡Ya Dennis!-Su molestia aumentó. -¡No te responderé por que ni yo mismo tengo la respuesta, me enoja que me presiones de esta manera como si quisieras que dijera que amo a tu madre y solo estoy contigo por diversión!.

Me acerqué a él y lo miré a los ojos.

-¿Acaso no es así?-Pregunté con una sonrisa. -Te debe divertir la situación, después de todo lo nuestro sería imposible así que por eso lo haces...

-No pongas palabras en mi boca que no he dicho...

-No debes decirlas para que yo las cepa-Me separé y le di la espalda para acercarme a la ventana. -Después de todo yo no te amo, no espero que tu lo hagas conmigo...

Esperé algún reclamo de Arón pero cuando me giré él abría la puerta para irse.. Me di cuenta que estaba furioso por que tiró la madera muy fuerte sacando un estruendo.

Mi mirada pasó a la ventana y de un momento llegó el llanto... Dolía decirle que no lo amaba cuando por dentro mi corazón pedía a gritos estar con él... Jamás se es demasiado joven para sufrir por amor.

Impossible LoveDonde viven las historias. Descúbrelo ahora