Impossible Love

✳️ 017 ✳️

Suspiré y me tiré a la cama.. no podía creer lo que había hecho.. o talvez había sido solo una alucinación por tantas drogas que había consumido el día anterior.

Tomé mi celular y miré la hora, mi padre no tardaría mucho en llegar. Me quité el pantalón y note mi ereccion, Aron es él único que con solo una caricia provoca esto en mi.. Aunque no sólo una caricia fue lo que me dio.

Me quité la ropa interior y me fui al baño.. una relajante ducha de agua fría me quitaría esto.

Después de unos minutos salí del baño un poco mejor.. la verdad no podía borrar las imágenes de Arón besándome y tocandome, si seguía así volvería a tener una ereccion.

Me vestí sencillo por que no había una ocasión especial que ameritara la buena vestimenta.. busqué una gorra y unos lentes oscuros, me puse un poco de maquillaje para tapar mi mala cara y volví a suspirar como por milésima vez en lo que iba del día. Abrí el cajón y saqué dos pastillas para el dolor de cabeza, tomé mi celular, mi billetera y salí hacia el primer piso.

A la mitad de las escaleras me detuve y respiré profundo.. tomé fuerzas y fui directo hacia la cosina.

-Hola mamá–La saludé con una sonrisa.

-Hola, ¿como estas?–Preguntó sin verme.

-Bien, ¿y tu?–Me tomé las pastillas y la miré.

-Bien.. salí a comprar cosas para prepararte un buen almuerzo–Sonrió y me sentí como la misma mierda.

Dejé el vaso a un lado y jalé a mi madre para abrazarla, ella no era perfecta pero no se merecía lo que le estaba haciendo. La abracé fuerte y le dí un suave beso en el cabello, la culpa me consumía.

-¿Que pasa Dennis?–Preguntó mamá preocupada.

-Nada mamá–La solté y limpié mi rostro que ya tenía lágrimas.

-¿Por que lloras?.

-Por nada–Tomé un poco de agua y le sonreí.

Tocaron el timbre y sabía que ese era mi padre.. lavé el vaso y lo guardé, le di otro beso a mamá y decidí salir...

-Dennis–Volteé al escuchar la voz de mamá.

-Dime.

-Feliz cumpleaños–Me sonrió y me asentí.

Iba hacia la puerta y Arón me tomó del brazo.

-Sobre lo que pas..

-Adiós–Me solté suave y traté de no llorar.

-Feliz cumpleaños, que te diviertas–Asentí y le sonreí.

Abrí y salí par encontrarme con el padre que se cree perfecto.

-¡Hola hijo!–Saludó sonriendo.

-Hola–Le dije de manera seca.

Me puse mi gorra y mis lentes para caminar hacia el auto, entré en el asiento de copiloto y papá entró después.

-¡Hola hermano!–Miré por el retrovisor y ví a un niño con una sonrisa que ya no tenía todos los dientes completos.

-Hola pitufin–Lo saludé y volteé, él se acercó y besé su mejilla.

-¡Feliz cumpleaños!–Me dio un dibujo y sonreí.

-Gracias pitufin–Le di otro beso en agradecimiento y se sentó otra vez.

-Este es tu regalo–Mi padre me dio una caja pequeña y la abrí.. era un reloj. -Tu abuelo quería que lo tuvieras.

Lo tomé y suspiré.. mi abuelo fue un gran hombre, digno de llamarse hombre.. amó y respetó a su familia hasta lo último, según él en esta vida lo único importante es la familia. Cuando papá nos dejó por su otra mujer mi abuelo lo desheredo y no le volvió a hablar hasta el día de su muerte que fue hace un año.

-Le dije que esto era para un museo.. dijo que era un regalo que le dio su padre, ese día sonrió mucho–Lo guardé otra vez en la caja y suspiré. -¿A donde vamos?–Pregunté.

-Iremos a desayunar unos deliciosos panqueques y luego iremos a los bolos.. día de hombres–Mi padre miró a Jack Junior y este sonrió.

-¿Bolos?–Miré a mi padre con las cejas fruncidas por que él sabía perfectamente que eso no me gustaba.

-Si, a Jack le gustan–Miré a mi hermano y él estaba feliz.

-Ujum está bién–Me acomodé en el asiento y me puse el cinturón.

Papá encendió el auto y nos fuimos.. dirán que si es mi cumpleaños se debe ir a donde me gusta pero mi papá siempre hace lo que quiere. No protesté por que mi hermano estaba feliz y hace mucho no lo veía.

Llegamos a una cafetería que se me hacía muy conocida pero no dije nada.. salimos del auto y mi hermano me tomó la mano feliz.

Entramos y buscamos una mesa para sentarnos, me senté cerca de la ventana y papá se sentó al lado de Jack. Hicimos el pedido y después de unos minutos llegó el desayuno y empezamos a comer tranquilos.