Episodio 42 - Yo gane

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Influenciemos al mundo

Había sido un día lleno de emociones y ahora azabache y pelimiel se proponían descansar después de su ajetreado día.

Ash no tardó mucho tiempo en caer completamente dormido, mientras que Serena, ya acostada, pero sin conciliar el sueño alzaba la mirada al mismo tiempo que su mano contemplando el anillo que ahora descansaba en su dedo anular.

El solo recordar el cómo Ash se arrodilló ante ella en la playa hacía que su corazón se acelerara y no pudiera ocultar una sonrisa tan grande como el hermoso brillo que emanaba la piedra del anillo de compromiso.

Escuchando la profunda de respiración de Ash dio media vuelta y cerró los ojos esperando tener un sueño relacionado con su futura boda.

Serena abrió los ojos, fue grande su decepción al ver que había vuelto a aquel lugar, el balcón del laboratorio del Profesor Ciprés en la Región Kalos había sido el escenario de la misma pesadilla desde que probaron el humo onírico en Unova

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Serena abrió los ojos, fue grande su decepción al ver que había vuelto a aquel lugar, el balcón del laboratorio del Profesor Ciprés en la Región Kalos había sido el escenario de la misma pesadilla desde que probaron el humo onírico en Unova.

No recordaba cuando había sido la última vez que había estado ahí, pero para estas alturas sabía casi a la perfección lo que ocurriría a continuación.

Justo como lo había previsto, una versión de ella comenzó a discutir con un Ash creado desde lo más profundo de su subconsciente.

Todo ocurría con normalidad hasta que las versiones del sueño de Ash y Serena se detuvieron un momento, Ash le entregó algo a la Serena del sueño con una expresión de decepción en la cara.

La Serena real, que solo era una espectadora viviendo la misma historia una y otra vez, fue sorprendida al percatarse de que lo que le entregaba a su otra yo no era nada más y nada menos que el anillo con el que Ash le acababa de pedir matrimonio.

Serena: ¿El anillo?, ¿Cómo?-.

Miro su mano, el anillo descansaba en su dedo, pero de un segundo a otro desapareció desvaneciéndose en un humo tan negro como la misma noche.

Comenzó a asustarse, eso jamás había ocurrido, pues lo que antes era una simple argolla plateada ahora era una réplica exacta del anillo que Ash le había entregado.

El Ash de su sueño se marchó y al igual que otras versiones de su sueño fue capaz de escuchar todo a partir de ese momento.

Ash: Pensé que tú eras diferente-.

Su voz sonaba distorsionada, pero el escuchar esas palabras seguía doliéndole a ambas Serena.

La verdadera pelimiel quiso saber si algo había cambiado en su versión del mundo de los sueños y se sorprendió al darse cuenta que la ropa que llevaba había sido cambiada por un vestido de novia.

Serena: ¿Pero qué...-. Dio un paso hacia atrás.

Casi tropieza consigo misma al percatarse de que sus propias ropas también habían cambiado por un vestido idéntico al de la Serena que yacía en el suelo sin decir una sola palabra.

Influenciemos al mundo [Amourshipping]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora