Parte 2

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So Hye miraba a la pequeña con una mirada impresionada. Jamás había visto a un ser así.

Pero por el otro lado, Jimin caminaba de un lado a otro, tratando de entender lo que pasaba.

— Increíble. — dijo la pelinegra. — ¿Dónde la encontraste?

— De regreso a casa. Casi la atropello. — So Hye lo miró con los ojos muy abiertos — ¿Qué?

— ¡Casi la atropellas!

— ¡No era mi intención! Me pareció ver a una niña, pero cuando bajé del auto, ya no había nada. Me encontré con un leopardo blanco y ... Lo traje a casa. Pero cuando lo acariciaba ... Se... Se convirtió en una niña.

— Y no le has dado nada para cubrirse. — habló la joven decepcionada — Eres increíble, Park.

— ¿Darle algo? Puede convertirse en gato si tiene frio. — So Hye lo miró fulminante y se acercó a la menor — So Hye ... So... No lo hagas. No te le acerques.

— Por Dios, Jimin, es una niña. — habló quitándose la chaqueta que tenía puesta — La pobre debe tener frío.

— No sabemos lo que puede hacer. Llamaré a los de control animal. Vendrán por ella dentro de poco.

So Hye lo miró asustada.

— ¡No puedes hacer eso!

— ¿Por qué no?

— Ella no es un leopardo normal. Es una hibrida.

— ¿Hibrida? — soltó una risita amarga — Hibrida o no, ella se irá de aquí. Es peligrosa.

— ¿Peligrosa? Jimin, es una ...

— ¡No es una niña! ¡Y ni se te ocurra acercarte a ella, Hye! Quedas advertida. — La joven lo miró para luego ignorarlo. Se acercó a la menor y le colocó la chaqueta alrededor de los hombros. — ¡Hye!

— Listo, pequeña. — le regaló una sonrisa a la pequeña pelinegra — ¿Te sientes mejor? — la menor la miraba con desconfianza, pero aún así, asintió y So Hye le regaló una sonrisa que la hizo tranquilizar. — ¿Ves? Es inofensiva.

— So Hye, aléjate de ella.

La joven se puso de pie y caminó hacia su amigo.

— No vas a llamar a control animal.

— ¿Quieres probarme?

— Jimin. Esta pequeña no es un animal, es una híbrida. Y cuando las personas se enteren, van a hacerle muchas cosas malas. Van a lastimarla, harán muchos experimentos con ella y ... Probablemente la maten. — le habló con una mirada suplicante.

— ¿Qué insinúas que debemos hacer? ¿Quedárnosla? So Hye ... No sabemos lo que puede hacer.

— Jimin... Es una niña de... Aproximadamente cinco años. No nos hará daño.

— ¡¿Entonces sí piensas quedártela?! Estás loca. Y en todo caso, sería como cuidar a una niña normal. Nosotros no podemos So Hye. Estamos siempre ocupados. Esta niña necesita a una madre y a un padre.

— Y casualmente nos tiene a ti y a mí en este momento.

— Ni lo pienses. Estás loca.

— Jimin. Sólo piénsalo. — el pelinegro suspiró callado — Iré a prepararle algo para comer.

Se acercó a la pequeña y la tomó de la mano para ir juntas a la cocina.

— ¿Tienes hambre? — la menor asintió tímida — No te preocupes, te haré algo rico para comer, ya verás. ¿Tienes nombre? — la niña negó — ¿No? ¿Tu madre y tu padre?... — la niña volvió a negar — Oh... Lo siento. ¿Qué edad tienes? — la menor se quedó callada — ¿No sabes o... No sabes hablar?

Little Cat (Jimin y tú) +18Donde viven las historias. Descúbrelo ahora