Parte 41

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Hari se removió en su lugar mientras iba despertando poco a poco y se giró para poder ver a Jimin a su lado, el cual aún seguía dormido.

Hari sonrió más que contenta y llevó una de sus manos a la mejilla del contrario, para comenzar a acariciarlo lentamente.

Jimin en ningún momento se despertó, por lo que la menor se levantó sin hacer ruido alguno y miró la hora.

5:46 am.

Jimin despertaría en unos minutos más, por lo que la menor no dudó en alistarse y cambiarse para salir de la habitación y hacerle el desayuno.

La alarma del mayor sonó, despertándolo al instante, se removió con pesadez en su lugar y se sentó para poder apagar el reloj. Su entrecejo se frunció al no ver a Hari a su lado y se levantó para buscarla y ver si estaba en el baño, pero no había señales de su pelinegra.

Abrió la puerta de la habitación y salió al pasillo para dirigirse a la sala principal. Un delicioso aroma a panqueques lo hicieron voltear a la cocina, encontrándose con una Hari concentrada en que los panqueques no se quemaran.

El pelinegro sonrió enternecido y se acercó a ella para abrazarla por detrás, logrando que Hari se asustara y diera un pequeño salto por la impresión. Y de no ser porque Jimin la alejó del fuego rápidamente, ella hubiese salido herida.

— ¡Jimin! — lo reprendió un poco molesta — Pudiste haber causado un accidente.

— Lo siento. — se disculpó con una sonrisa culpable. — Sólo quería sorprenderte.

— Y vaya que lo hiciste. — le dijo mirándolo fulminante para después regresar a la estufa.

— ¿Cómo amaneciste hoy? — le preguntó abrazándola por detrás para empezar a dejar pequeños besos en su cuello.

Hari sintió su piel erizarse y se giró rápidamente para verlo de frente y tratar de empujarlo, colocando ambas manos en el pecho del contrario.

— ¿Qué haces? — le preguntó ella con nerviosismo.

— ¿Dándote besos?

— No es verdad. Tú quieres algo más. — Jimin soltó una risita y la miró inocentemente.

— ¿Qué cosa? — Hari lo miró con los ojos entrecerrados y no respondió. Volvió a su labor de antes, con Jimin mirándola coquetamente. — Te ves muy bien cocinando. Me da ganas de comer otra cosa. — Hari levantó una ceja y lo miró preocupada.

— ¿No quieres esto? — le preguntó triste mientras se refería al desayuno que estaba haciendo. Jimin soltó una risita burlona y la abrazó enternecido.

— A veces creo que solamente te haces a la inocente. — Hari levantó una de sus cejas y se giró para verlo de nuevo.

— ¿Por qué lo dices?

— ¿De verdad no entendiste mi indirecta? Es decir, creo que ya estás lo suficientemente grandecita para poder entender. Creo que, hasta ya has experimentado... Ciertas cosas.

— De verdad, no sé de qué estás hablando. — le dijo retirando la sartén para llevarla a la mesa y comenzar a servir el desayuno.

Jimin la miró empezando a ponerse serio y sintió la molestia invadirlo al recordar algo.

— De tu juego de caricias y besos con Jeon. — Hari se estremeció al recordar aquello y sin querer mirarlo a los ojos, siguió sirviendo el desayuno.

— Ah... Eso.

— Sí... — Jimin se colocó frente a ella para que lo mirara — Eso.

— ¿Por qué estás hablando de eso ahora? Es pasado y no pasó a más.

Jimin la ignoró y la siguió mientras la pelinegra dejaba la sartén en la estufa de nuevo.

— ¿Por qué lo hiciste? — Hari rodó los ojos y lo miró molesta.

— Jimin, por favor.

— ¿No se suponía que yo te gustaba?

— Jimin ...

— Hari, cuando alguien te gusta, no intentas acostarte con otro.

— Ya me dijiste eso. — le dijo para después caminar lejos de él.

— ¿Por qué permitiste que él te tocara? — le preguntó siguiéndola.

— Jimin, por favor, ya basta.

— Desde ese día, cada vez que recuerdo aquello, me hierve la sangre. No puedo olvidar cómo estaba sobre ti, besándote y tocándote. Hari, pude haber asesinado a Jeon en ese momento.

— Eres tan exagerado. Además, ya te dije que eso es pasado.

— Pero no me has dicho por qué lo hiciste.

— Estaba confundida. ¿Sí? — le confesó deteniendo lo que estaba haciendo para mirarlo de frente — Después de lo que me hiciste, Jungkook fue el único que estuvo conmigo todo el tiempo.

— ¿Jungkook? ¿Qué hay de Jin y Taehyung?

— Ellos no pueden estar al pendiente de mí todo el día.

— A mí se me hace que sentías algo por él.

Hari, ya enojada, lo miró sin mucha importancia y se dio media vuelta para querer irse del lugar.

— ¿Y qué? ¿Tiene algo de malo? — después de haber dicho aquello, Jimin la tomó del brazo para después girarla y hacer que lo mirara de frente.

Hari lo miró algo nerviosa, debido a que el pelinegro se veía bastante enojado por su comentario.

— No puedes sentir algo más por alguien que no sea yo. — le dijo para mirarla amenazante y llevar una mano a su mejilla — No mires a nadie más.

Hari nunca había visto a Jimin de esa manera. Sí, lo había visto antes enojado o hasta un poco celoso de que ella estuviese con Jin y con Taehyung, pero ahora, Park estaba siendo totalmente posesivo con ella. Y eso la hacía sentir... Extraña.

Park llevó su otra mano a la cintura de la contraria y la atrajo a él bruscamente, haciendo que Hari soltara un jadeo por la repentina acción, más no hizo nada para detenerlo.

Los labios de Jimin atacaron los de ella y fue retrocediendo hasta poder subirla en la mesa y abrir sus piernas para poder colocarse entre ellas.

Hari jadeó mientras un extraño recuerdo le llegaba a la mente, Jimin no era el primero en hacerle eso, por lo que empezó a sentirse un poco incómoda al recordar a Jungkook.

La menor colocó ambas manos en el pecho del pelinegro y lo alejó de ella, recibiendo una mirada confundida del mayor.

Jimin, quién aún tenía la respiración entrecortada, la miró preocupado y su preocupación aumentó más al notar cómo su pelinegra iba poniéndose cada vez más deprimida.

— ¿Qué sucede? — le preguntó Park mientras la miraba angustiado.

— Yo... Tengo hambre. — le respondió ella rápidamente, para después bajar de la mesa y empezar a acomodar el desayuno. — Vamos. Desayunemos o se te hará tarde.

Jimin seguía sin salir de su confusión, pero no preguntó nada más. Pensó que, tal vez, ella se sentía algo nerviosa con sus toques y sus besos. Pero ya se las arreglaría más tarde para ir acostumbrándola.

Editada 23/Enero/2023

Little Cat (Jimin y tú) +18Donde viven las historias. Descúbrelo ahora