AMOR SUFRIDO. {Resubida} ©️

10) Entonces, acepto.

—Quita esa cara —ordenó como todo un papá regañón—. Sino quieres que te digan las cosas como son debes de dejar que los demás se expresen, ¿Ok? —me dió una sonrisa de labios cerrados—. A lo que vine.

—¡Eh! ¿No que ya habías dicho todo? —lo mire como una payasa.

—Dijiste que si quería hablar que lo hiciera y es lo que voy hacer, pero solo te diré una cosa más.. —suspiró exageramente, como dándose ánimo.

¿Una cosa más? qué será..

—¿Y que es..? —me puse a jugar con mis dedos.

—Este.. uhm, es algo bastante complicado.. —¿Soy yo o Joon-gi se ve adorable nervioso? Se me escapó una risita—. ¿De que te ríes? —me miró todo confundido.

—Eh, ¿Yo? —alzó una ceja con obviedad—. Yo no me he reído de nada —puse todo mi empeño en no reírme de nuevo—. ¿Y que es lo que me quieres decir? —pregunté toda nerviosa, no se que puede ser o quizá si lo se.

—Es algo complicado..

Se rasco la nuca nerviosamente, subió la mirada al techo y luego respiró hondo, para después mirarme a los ojos donde pude ver su determinación, pero lo nervios se le notan a leguas también.

—De seguro no es tan complicado —trate de tranquilizarlo, aunque estoy nerviosa también, pero al verlo más nervioso que yo trate de consolarlo un poco.

—Sarah, quiero proponerte que oremos juntos por un año —soltó rápidamente—. Ya sé que es apresurado, pero quiero hacerlo contigo. ¿Que dices? —me miró más nervioso que antes, así que le di una sonrisa tranquilizadora cosa que lo calmó un poco.

—¿Un año no es mucho? —indague mirándolo a los ojos también—. Digo.. es que estoy aquí de paso.. y cuando se cumpla el año ya no estaré aquí.

—Si Dios lo confirma, te buscaré donde quiera que estes, eso incluye el fin del mundo —en su voz se nota la seguridad de que habla en serio. ¿Puede ser más imperfectamente perfecto?

—Entonces, acepto.

Le di una sonrisa, una tan grande que por poco me parezco al gato de Alicia del país de las maravillas. El me la correspondió y me dio un abrazo.

—Gracias —murmuró muy feliz.

—¡Aw! Que lindos se ven —al escuchar la voz de Leonor nos separamos como si somos alérgicos el uno del otro. La mire y Ella nos ve como si somos la cosa más hermosa del universo—. ¡Ay! Mi nena ya creció —fingió estar llorando disque por mí y solo pude verla como si es en serio.

—¿Puedes dejar de hacer eso, Leonor? —la mire aburrida.

—¡Ay! Pero que aguafiestas eres, de verdad —me miró feo, luego su mirada se fijó en Joon-gi, se le acercó, le susurró algo y después salieron ambos de la casa.

—¿Que fue eso? —indague para mi misma toda confundida.

En fin, recogí la carpeta roja que Leonor había dejado en el sofá y la revise; mi jefe se está buscando algo que no se le ha perdido. Entre a mi habitación y la aventé en el escritorio que tengo en mi habitación y me tiré en la cama, aún estoy cansada..

🔮🔮🔮

Las tres y veintidós de la tarde, hora en la que me desperté por un fuerte ruido, y cuando mis sentidos despertaron por completo me di cuenta de que es Leonor con una música al topé que se titula: "sigues amándome" es una de mis favoritas por eso no la mandaré apagar.

Me levante y fui directo al baño, cogí mi cepillo de dientes y me puse a cantar en vez de cepillarme.

—Fui como Pedro, dije que te amaba, pero con mis hechos yo te negaba, el gallo canto, mi corazón tembló, te negué tres veces, falle tantas veces.