AMOR SUFRIDO. {Resubida} ©️

66) Sospechas.

A pasado una semana y joon está un poco mejor, creo que le hizo bien eso de la pasantía y Botas, el está más cariñoso que de costumbre, no se despega de mis piernas o pies, siempre está cerca y sigue enanito por su raza, pero está grande, fuerte y super lindo.

A joon solo le toca hoy hasta el medio día porque es fin de semana y aquí me encuentro haciendo el almuerzo para él, para cuando venga.

Estos días los he pasado bien, a excepción de un día que me desmayé y unos que otros mareos leves que me agarrarn a veces y gracias a Dios que él ha estado en casa en esos momentos, pero después todo bien. Cómo todo gracias a Dios, menos ramen y tteokbokki, le he cogido un poco de recelo por estos días.

Para que no se queje le hice unos Hopi Hopi, domblines dominicanos, con to'o de to'o, así que no hay arroz hoy, aunque si es por mi siempre comería arroz porque me encanta, pero hay que variar de vez en cuando, por cierto, en unos minutos estará listo.

La puerta se abrió y por ella entró joon con una funda de comida; sin embargo, no se qué hay adentro.

—Ya llegué —se acercó, puso la funda en la mesa y me dio un besito en los labios.

—¿Que es? —comencé abrir la funda como si es mía.

—Lo más bueno del mund.., ¿Sarah, estás bien? —se me acercó rápidamente a verme taparme la nariz para apaciguar las náuseas.

Lo que él ha traído es tteokbokki y ahí supe que pasó por donde la suegra y que ella se lo ha dado.

—Si.. estoy bie.. —mis ojos se voltearon por la fuerte arcada que me mandó de nuevo al baño.

Joon mando su enfermedad con Diosito y salió corriendo conmigo directo al baño para agarrarme mi poco de cabello y que así pueda botar todo si impedimento.

¿Que es esto?

Necesito hablarlo con mi mamá porque ella sabrá que hacer, lo necesito, pero de urgencia.

—¿Le dijiste a tu madre para un remedio de estómago? —suspiró al ver que negué—. Sarah..

—Uhm.. no llegue a decirle, pero.. —comencé hablar estando ya frente al lavamanos, y me enjuague la boca sin mirarlo.

—Pero nada, Sarah, me dijiste que le dirías, ¿Acaso quieres ponerte peor? —cerre los ojos porque está enfadado con todas sus razones.

—Lo siento, no vi la necesidad de hacerlo porque se me había aliviado —mantuve mi mirada baja.

—¿Aliviado? —preguntó serio—. Te has desmayado dos veces y suerte que estuve cerca —enfatizó—, ¿Y a eso le llamas alivio?, Te dan mareos repentinos, náuseas y vómitos, ¿Y eso es alivio? —lo mire con los ojos cristalinos y su mirada se ensuaviso—. Ena.., si no hablas con ella lo haré yo —salió del baño.

No quería tener que hacerlo porque ya soy mayor y debo de saber cuidarme, pero no lo he hecho del todo bien porque joon me está reclamando con todas sus razones, y si dije que le que hablaría a mi madre, pero era para hablarle de las náuseas que ya no me daban y los mareos son cosas de un mal día, así que no pensé que fuera tan grave lo que me está pasando.

Entre en la habitación, pero él no está aquí, así que aproveche para hablarle a mi madre. Le marqué y ella lo cogió después de un rato.

—¿Aló, mamá?

—Hola, hija mía —contestó una voz que no es la de mi madre, pero que reconozco perfectamente.

—¿Leonor? ¿Que haces con el teléfono de mi madre? ¿Donde esta ella? —me entró la ansiedad.