AMOR SUFRIDO. {Resubida} ©️

31) ¡¿CITA?!

—¿Como crees eso? —se sintió rechazado, pero es que..—, Eres con quien compartiré mi vida, ¿Y no te tendré confianza? —me miró con impotencia.

—Lo siento, es que..

No sé cómo darle la cara ahora. Él respiró hondo y me atrajo a su cuerpo para darme un abrazo.

—Tranquila, no tiene de que disculparte —comenzó hablar más tranquilo—, Yo fui quién dejo que pensaras mal.. ahora somos dos y no supe manejarme. Lo siento —me beso la frente—. Vamos, que Leonor debe de echarte de menos.

Y tiene razón porque ella hace el papel de una madre osa.

—Vamos.

Me puse mí gorrito y salimos agarrados de las manos camino a mi casa. No hay muchas personas afuera solo unas que otras personas que van caminando, pero no es algo que me sorprenda porque el barrio es tranquilo, por lo que se recogen temprano.

Mientras vamos caminando me di cuenta de un detalle, el cual me llamo mucho la atención de Joon-gi y es que mis manitas son más pequeñas delante de las suyas, por lo que parezco una mujer en cuerpo de niña cuando estoy a su lado.

Seguimos caminando en silencio, disfrutando del ambiente, porque ese silencio deja mucho que expresar cuando se trata de nosotros.

Y gracias a ese silencio tuve más acceso a su perfil; el es apuesto, mi novio es apuesto y mi futuro esposo es apuesto, solo pensarlo me saca una sonrisa boba. Soy muy afortunada de tenerlo conmigo a estas alturas y no haré que se arrepienta.

Por fin estamos frente mi casa y las luces están apagada, así que supongo que Leonor está durmiendo ya.

—Gracias por traerme hasta aquí.

Le di el frente y me aferré más a sus brazos para ponerme de puntillas y poder besarle la frente, pero como no alcanzo el se echó a reír y se agachó para darme el acceso.

—No hay de que —me puso una mano en la cabeza y me miró fijamente—. ¿Sabes?

—¿Que? —lo invité a continuar porque esas miradas de él me dan curiosidad, siempre tienen algo que decir.

—Mañana será nuestra primera cita oficial, pasaré por..

—¡¿CITA?!

No lo deje terminar porque estoy perpleja en estos momentos por su tranquilidad. ¿Como que cita? El no puede proponerme algo tan rápido, ¡Ni sé que ponerme para mañana!

—Si, ¿No te lo hubiese dicho, Ena? —preguntó con confusión e inocencia fingida, ¡Ay, la vida!

—¿Crees que si me lo hubieses dicho estaría tan alterada? —le di una sonrisa que más bien parece una mueca.

Es que esto es demasiado para mi y no, no quiere decir que no quiero mi cita con el, claro que no.

—Pues ahora lo sabes —alzó los hombros restándole importancia y me dio un toquecito en la nariz para que reaccioné. ¿Como que cita? Aún no lo creo.

—¿Si sabes que mañana hay culto? —curiosee.

Si quiero la cita, aunque me lo ha dicho hoy, pero Dios está primero y solo tengo los domingos para asistir a está.

—Lo se, por eso pasaré por ti para ir —mi boca se abrió formando una O, ¿De que me perdí?—. La cita comenzará desde la mañana —se rasco la nuca nerviosamente, buen momento para mostrar los nervios—, Así que.. será un día completo para ambos.

—¿Ah? —Fue lo único que pude decir porque no se que decir. Él tragó en seco.

—Quiero pasar el mayor tiempo contigo—me miró con sinceridad.