The Day That Never Comes

Secretos

La noche anterior...

*Visión de Pablo*

-¿Queda algo más en el coche? -preguntó Dave desde la entrada del bloque.

-No, esto es lo último. -dije cargando la última caja de mis pertenencias.

Tras Matthew echarme del apartamento y Dave pasar con su coche delante de lo que fue nuestra vivienda me ofreció instalarme con él y los demás chicos de Megadeth en su apartamento. No me dijo por cuanto tiempo, ni me dijo nada de "hasta que encuentres algo". Parece que no tiene intención de echarme ni nada por el estilo, por lo que fue sincero al decirme que podía irme con él.

John volvió a subir sus cosas esta vez al apartamento de Oliver y compartir piso con él. Se me iba a hacer raro vivir sin él. Me había acostumbrado a su presencia, me sentía bien a su lado. La verdad es que lo consideraba como mi hermano, igual que a Oliver.

Mary se empeñó en ayudarnos con la mudanza al apartamento de Dave. Siempre se preocupa bastante por mí y la verdad es que pocas personas en lo que llevo de vida lo han hecho. Recuerdo que quien lo hacía antes era Carol, pero ella ya no estaba...

-No te preocupes, yo cierro el maletero. -dijo Mary alzando sus manos para cerrar la puerta trasera del vehículo. -Dave, pásame las llaves.

Dave se giró ante la llamada de Mary y mientras sostenía una bolsa y una caja sobre una mano, con la otra buscaba en el bolsillo de su pantalón las llaves del coche. Desde su posición se las lanzó a Mary en su dirección.

-Ahí van, Mary. -dijo Dave.

-Las tengo. -contestó ella.

Los tres pusimos rumbo al apartamento de Dave, subimos las escaleras con dificultad debido a todas las cosas que llevábamos. De España no traje muchas cosas, la verdad. Pero desde que me instalé en San Francisco he ido comprando algunas cosas con el dinero que tenía y conseguía del negocio con Dave.

-Mary, cuidado con la guitarra, por dios. -dije preocupado debido a que ella llevaba consigo mi guitarra y mi amplificador.

-Tranquilo Pablo. No es la primera vez que llevo este tipo de cosas. -dijo ella molesta.

Dave soltó una pequeña risilla tras su comentario. No entendía por qué. En general había veces que no entendía a Dave. En ocasiones hacía o decía cosas que estaban fuera de lugar y que parece que solo él entiende.

-Vale, no te enfades. -dije de manera apacible. -Por cierto Dave, ¿qué piso es?

-El 2ºB. -dijo Dave mientras seguíamos subiendo escalones. -No os agarréis a la barandilla, está suelta y podéis caeros.

Inmediatamente solté la barandilla y con cuidado asomé mi cabeza hacia el hueco de la escalera. En ese momento me dio un leve mareo. Tengo muchísimo vértigo y desde luego si caía por ahí tenía la muerte asegurada.

-Joder... -dije con un hilo de voz intentando no pensar en el vértigo.

-Que marica eres, Pablo. -dijo Mary al notar el miedo en mi voz.

-Es más hombre ella que tú, Pablo. -contestó Dave riendo mientras miraba hacia atrás.

-Muy gracioso, Dave. -dije haciendo una mueca.

Llegamos a la segunda planta y Dave colocó las cosas que llevaba frente a la puerta. Comenzó a hurgar en sus bolsillos las llaves del apartamento. Pero finalmente desesperó porque no las encontró.

-¡Junior! ¡Ábreme, no encuentro las llaves! -dijo Dave aporreando la puerta.

-¿Y si no está qué hacemos? -dije preocupado.