Pablo Gavi
Me desperté por el pequeño rayo de sol que entraba por la ventana.
Me levanté y bajé al comedor. Estaban todos menos Elaia.
- Buenos días - dije.
- Buenos días - contestaron todos.
- ¿Quieres desayunar? He hecho pancakes - hablo Pedri.
- Ponme 3 por favor - respondí - ¿y Elaia?
- Sigue durmiendo - contestó Ansu.
- Estoy aquí - dijo entrando al comedor dando saltos, ya que iba sin muletas.
- Estamos desayunando, ¿cuantos pancakes quieres? - preguntó el canario.
- No, no quiero, pero gracias.
Acabamos de desayunar y Elaia nos pidió que la llevaramos de vuelta, así que eso hicimos, Pedri y yo la llevamos.
Me bajé del coche para acompañar a Elaia hasta recepción.
- Oye - hablé.
- Dime.
- Esto... - me puse nervioso -¿Me das tu número?
- Mucho estabas tardando - rió.
- Toma - le di mi móvil y ella apuntó su número.
- Ela - leí cómo se añadió.
Elaia me guiñó un ojo para luego acercarse al ascensor e irse.
- - - - - - - -
Elaia
Llevaba 8 días en la Masia. Han pasado 4 días desde que fui a casa del canario. Desde que fui a casa de Pedri hasta ahora no pasó nada interesante, solo comía y cenaba con Pedri y Gavi, y a veces venían los chicos.
Me estaba preparando, ya que venían a buscarme Gavi y Pedri, quienes me iban a llevar al hospital. Llegó el día que por fin me quitaban la venda del pie.
Gavi me avisó de que estaban abajo, así que salí de la habitación y fui al ascensor.
- Buenos días - dije subiéndome al coche.
- Buenos días, ¿preparada? - preguntó Gavi.
- Más o menos - reí.
- Pues venga, vamos allá - dijo Pedri arrancando el coche.
Llegamos y Pedri nos dejó en la entrada, mientras él se iba a aparcar. Entré junto a Gavi, pasé el código de barras de la fotocopia de la tarjeta sanitaria y nos sentamos.
Estaba tan cansada que apoyé mi cabeza en el hombro de Gavi.
A los minutos entró Pedri, y cuando nos vió así, sonrió.
Después de una media hora me llamaron, entré junto a Gavi, quien no se separó de mí en esos días.
- Buenas chicos - dijo el doctor al vernos - Elaia, siéntate en la camilla.
Me senté y el doctor se sentó delante mío. Puso mi pie encima de su rodilla y empezó a quitarme la venda.
- Ya está, mueve un poco el pie - le hice caso y empecé a hacer círculos con mi tobillo - ¿te duele?
- Nada - contesté.
- Perfecto, pero deberás llevar muletas unos días más.
- No hace falta, siento mi tobillo bien
- ¿Segura? - asentí - pues perfecto, me quedo las muletas.
- Vale, ¿nos podemos ir? - pregunté.
- Si, cualquier cosa pedir cita.
Nos despedimos del doctor y salimos de la sala.
- ¿Te ayudo? - preguntó Gavi.
- Tranquilo, puedo caminar bien.
- Hace una semana que no apoyas el pie.
- Tu tranquilo.
Fuimos donde estaba Pedri, para luego salir del hospital e ir al coche. Gavi no se separaba de mi, no quitaba su mirada de encima mío y cuando perdía el equilibrio me agarraba para que no cayera.
Nos subimos al coche y nos dirigimos a la Masía. Salí del coche y Gavi hizo lo mismo. Antes de entrar Gavi me paró.
- Oye - habló.
- ¿Si?
- Esta noche vamos a cenar todos, ¿vienes?
- Claro.
- A las 8 te pasamos a buscar.
- Tranquilo, pasame la ubicación y voy yo.
- ¿Segura? - asentí.
- Esta bien, luego te la paso.
- Perfecto - sonrió y se fue.
ESTÁS LEYENDO
Golden boy / Gavi
FanfictionDebido a un viaje de negocios de sus padres Elaia se ve obligada a pasar 3 semanas en la Masía. Elaia no tenia ni idea de fútbol, pero tampoco tenia intención de aprender. Eso estaba apunto de cambiar, ya que conoce a una persona que hace cambiar to...