Capítulo 37

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Elaia

Me iba acercando a los chicos cuando Pedri me vió y sonrió.

- Estás guapísima - dijo dándome un brazo.

- Gracias - contesté.

Nos acercamos a Gavi, me miró de arriba a abajo pero no dijo nada.

- Tío, ¿estás ahí? - preguntó Pedri moviendo su mano cerca de la cara de Gavi.

- ¿Qué? - respondió Gavi.

- Joder - rió el canario.

- Hola Ela, estás preciosa - se acercó a mí y me dió un abrazo.

- Gracias - contesté - ¿vamos?

Los chicos asintieron y nos subimos al coche. Llegamos al restaurante, que casualmente era el mismo que el del otro día, cuando pasó todo.

- Hola - saludaron todos al vernos entrar.

- Hola - dijeron Gavi y Pedri al unísono.

- Buenas - saludé.

Como siempre me tocó sentarme entre Pedri y Gavi.

- Elaia, nos gustaría hablar contigo - dijo Ansu rompiendo el hielo.

- Tranquilos, está todo bien. Gavi me explicó todo, se que fue por protegerme. De hecho, os quería dar las gracias - sonreí.

Estuvimos hablando y riendo durante toda la comida. Me sentía muy bien estando en ese grupito, me acogieron sin conocerme de nada y la verdad es que tenía confianza con todos, sobre todo con Gavi y Pedri.

- ¿Nos hacemos una foto? - preguntó Sira.

Todos aceptamos así que le pedimos a un camarero que nos hiciera una foto. Le devolvió el móvil a Sira y estuvimos mirando las fotos.

- Pásalas por el grupo - dijo Ferrán.

- Voy - contestó Sira - Elaia, ¿me das tu número y te meto en el grupo?

- No hace falta, ya me las pasará Gavi.

- No seas tonta anda - dijo Gavi - trae, te escribo su número.

Sira le dió su teléfono, y Gavi empezó a teclear en él. Me quedé sorprendida al ver como escribía mi número sin preguntarme cual era o sin mirarlo desde su móvil.

Cuando acabó de escribir Gavi le devolvió el teléfono a Sira.

- ¿Qué acaba de pasar? - preguntó Ansu confundido, igual que todos.

- ¿Qué? - dice Gavi al ver la cara de todos.

- ¿Te sabes su número de memoria? - preguntó Pedri en un tono divertido.

- Em... - Gavi se llevó la mano a la nuca, se puso nervioso y se notó.


Pablo Gavi

Si, me sabía su número de memoria. Durante esos dos días que se enfadó conmigo entré tantas veces en nuestro chat de whatsapp que al final me aprendí su número.

- Bueno, no sé - contesté nervioso.

- Va anda, dejarle - me defendió Sira - ¿la puedo subir a instagram?

Todos dijeron que sí, pero yo miré a Elaia esperando su respuesta.

- No hace falta - susurré a Elaia.

- Por mi si - respondió Elaia.

No le dije nada de nuestras fotos por su seguridad. Sabía que si ese rumor se hacía más grande todo el mundo empezaría a molestarle. Hay gente mala, y seguro que alguien le escribiría a Elaia cosas malas, o peor, cosas amenazantes.

Si ese rumor llegaba a la prensa le empezarían a seguir, acosándola a preguntas y a hacerle fotos. Quería evitar todas esas cosas, pero se que a Elaia le hacía ilusión subir esa foto. 

- Perfecto, os etiqueto y la subo.

- ¿Estás segura? - le dije a Elaia y ella asintió - las fotos pueden llegar a la prensa, y prepárate para que te sigan y te hagan miles de fotos.

- Me da igual, quiero disfrutar con vosotros estos días que me quedan aquí, y no voy a hacer o dejar de hacer por ese rumor. 

 Le sonreí, puse su pelo detrás de su oreja, le di un beso en la mejilla y apoyé mi cabeza en su hombro.

Me sentí tan bien de que Elaia dijera eso, me sentí aliviado, sentí que podía confiar en ella. 

Después de unos minutos finalmente nos trajeron los postres. Cuando acabamos vi como los chicos se pasaban el móvil de Sira entre ellos. Se lo pasaron entre todos menos Elaia y a mí.

Miré a Elaia y ella también lo hizo, estábamos igual de confundidos.

Golden boy / GaviDonde viven las historias. Descúbrelo ahora