Golden boy / Gavi

Capítulo 38

Elaia

Los chicos se pasaban el móvil de Sira entre ellos, cuando llegó a manos de Pedri, esperaba que me lo diera a mí, pero no fue así. Volvieron a pasarlo hasta llegar a Sira.

- ¿Qué pasa? - pregunté.

- Nada - contestaron todos.

- Ya claro, pues entonces enséñame el móvil - me dirigí a Sira.

- Tu lo has querido - contestó Sira.

Sira extendió el brazo, y me dio el móvil. En cuanto lo vi no pude evitar sonreír como una tonta

- ¿Qué es? - preguntó Gavi.

Le enseñé el móvil y en cuanto lo vio me miró y sonrió.

El móvil proyectaba una foto hecha por Sira, esa foto era de cuando Gavi tenía su cabeza en mi hombro.

- ¿Puedo subirla? - me preguntó Gavi.

- Claro - contesté mientras le devolvía a Sira su teléfono.

- Sira pásala por el grupo porfa - dijo Gavi.

Me extrañó que Gavi quisiera subir la foto, por lo que sabía él no era de publicar muchas cosas en sus redes sociales, y menos de su vida privada.

- Oye, ¿os apetece tarde de piscina en mi casa? - preguntó el canario mientras salíamos del restaurante.

- Por mi si - contestó Ansu.

- Va - respondió Gavi.

- No tengo bikinis - dije.

- ¿Por qué? - preguntó Pedri.

- He venido para hacer fútbol, supuestamente, no para ir a la piscina de uno de los jugadores del Barça con parte del equipo.

- Vamos a comprar uno - dijo Gavi.

- ¿Vamos? - pregunté confundida.

- Te acompaño.

- Mejor la acompaño yo - intervino Sira.

Sira me llevó en su coche a un centro comercial. Me compré 2 bikinis, un bañador y aproveche para comprarme algo de ropa.

Cuando pasó una hora más o menos llegamos a casa del canario y piquemos al timbre.

Pablo Gavi

- Mejor la acompaño yo - dijo Sira.

No me dió tiempo a decir nada más ya que las chicas se estaban alejando.

Pedri y yo fuimos en su coche, y Ferrán y Ansu en el de Ferrán.

Nos reencontramos en casa del canario y entramos.

Subimos cada uno a una habitación y nos pusimos los bañadores. Pasábamos mucho tiempo en casa de Pedri, y todos teníamos bañadores, ropa y más cosas en su casa.

Bajamos todos y fuimos a la piscina. Estábamos todos dentro menos Ferrán que estaba sentado en el borde con los pies dentro del agua.

Empezamos a hablar de los próximos partidos, de entrenamientos... pero como siempre salió el tema que tanto les interesa a los chicos.

- ¿Y Elaia? ¿Qué tal todo? - preguntó Ansu.

- Bien - contesté.

- ¿Cómo lo arreglasteis? - preguntó Ferrán.

 Entre Pedri y yo explicamos lo del plan en vestuarios y también explicamos a Ferrán lo de las fotos de Elaia en casa del canario.

- Y le dijiste que le quieres, no lo olvides - dijo Ansu.

- No lo niego - contesté.

- ¿Pero te gusta? - preguntó Ferrán y yo me quedé callado.

- ¿Pero no lo ves? Solo hace falta ver cómo le mira y como habla de ella - respondió Pedri.

- Si tanto te gusta pidele salir - siguió hablando Ferrán.

- Se va en una semana y media - contesté - además, sólo le conozco desde hace poco más de una semana.

- Bueno, pues aprovechad el tiempo que os queda - dijo Ansu.

- Pero aunque se vaya os podéis ver - habló Pedri y yo asentí - entonces lo de que se va es una excusa, no se lo pides porque eres un cagueta.

- Eso también, imagina que yo no le gusto.

- Tío, fue al partido sin gustarle el fútbol.

- Bueno, pero no sé.

Unos minutos después llegaron Sira y Elaia. Vinieron al jardín, donde estaba la piscina, para saludar y luego fueron al baño a cambiarse.

Sira bajó en bikini, pero Elaia llevaba una camiseta ancha larga.

- ¿No te metes? - le preguntó Sira a Elaia.

- No me apetece - contestó y se sentó en las hamacas.

El canario salió de la piscina y se fue donde estaba Elaia. Empezaron a hablar y minutos después se abrazaron. Pedri volvió a meterse a la piscina, Elaia se quitó la camiseta y se tiró al agua.

No puedo negar que el bikini le quedaba perfecto. Tenía un cuerpo precioso, ya lo sabía porque a veces llevaba vestidos ajustados, pero verle así en bikini... Esa chica era perfecta de pies a cabeza.