❜ ⌗ septimo mes ⌗ ❜

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El tiempo después del ataque había empezado a correr con prisas y sin retención, siendo pasados dos largos meses

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El tiempo después del ataque había empezado a correr con prisas y sin retención, siendo pasados dos largos meses.

Neteyam había utilizado parte de su 6to mes de embarazo para ubicar a Spider, enterandose... que su madre, Neytiri (justo cuando él no podía hacer presencia con su familia hace ya más de 5 años), había usado al chico como sebo para el enemigo de su padre.

Eso le había pegado bastante fuerte en el corazón... ya que Neteyam siempre vio a Spider como un hermanito más para cuidar. ¿Y su madre amenazaba con matarlo?.

Conociéndola y si se hubieran dado las cosas mal... entonces spider estaría justo como el creía...

Muerto.

Suspiro con pesadez mientras tomaba asiento, incapaz de moverse y sin dejar de pensar en lo ocurrido durante todas esas semanas.

Su pancita ya había crecido lo suficiente como para no dejarlo caminar mucho, provocándole ligeros dolores de espalda y calambres en los pies. Dormía largas horas sintiéndose cansado por cualquier cosa, lo cual no era particularmente de su agrado.

Las naves enemigas y todos los muertos habían sido eliminados hace más de un mes, dejando el área del océano donde batallaron como si nada hubiera ocurrido allí.

Y los tulkun... bueno, se podría decir que ahora tenían a cierto par de tulkun's a las afueras del arrecife, machos y no tan solos, ya que se habían vuelto pareja antes de que todo pasará y nadie lo sabía.

Ese hecho molestaba tanto a Ao'nung como a Lo'ak al tratarse de sus hermanos espirituales. ¿Y a Neteyam?, bueno. Eso le daba risa.

Divisó como cierto alfa regresaba a casa tirando su lanza al suelo molesto y actuando como un niño enojado. Eso le confundió.

— se dice buenas tardes, amor. ¿Como estas? — bromeó al notar su terrible mal humor, sonriendo de lado.

— Net- Eywa — se sorprendió este, al parecer dándose cuenta apenas de que estaba ahí — perdón — se disculpó avergonzado, acercándose a él — ¿no haz salido hoy? — le pregunto, sentándose a su lado antes de acariciarle su pancita con una sonrisita, saludándole a él con un beso en la mejilla y a Kateye con un "papi ya regresó", que le hacía reír bastante y le avergonzaba.

— me canse apenas llegando a la entrada — confesó, provocando que el alfa de riera — Kateye cuando dice no, es no — se encogió de hombros admirando como el mal humor de su esposo se había transformado en alegría — ¿Porque estabas tan molesto? — preguntó con dudas, curioso.

Ao'nung suspiro enormemente,  dejándose caer de espaldas en la cama y mirando al techo. Rememorando gracias a su pregunta.

— Cierto hermano tuyo hecho a perder mas de 5 redes por montar un Tsurak y no saber controlarlo — contestó, haciéndole entender — estábamos discutiendo por eso y Tsireya lo defendió, así que me enoje y vine directo a casa — termino de contar, rodando los ojos y haciéndolo reír — mucho te ríes, pero sabes que Lo'ak es todo un desastre — pronunció. Sin pizca de su mal humor ya y cubriéndose los ojos con su antebrazo.

— es Lo'ak — contestó con simpleza, sonriendo — sorprendentemente aunque ya sea mayor, si nadie lo está viendo se mete en problemas — rió con diversión. Admirando eso de su hermanito aunque estuviese mal — y dudo que lo que hizo lo hiciera a propósito — continuó, recibiendo una queja de su pareja y un "otro más" de su parte.

— lo apoyan tanto que me sorprende — continuó quejándose, mirándole después de levantar su antebrazo un poco — pero si fuese yo, ¿quién me apoya?, si hago alguna tonteria me tiran los peces a mi — prosiguió, mostrandose un poquito de mal humor otra vez.

— hay alguien que siempre te apoyará — sonrió mirándole, antes de recibir una sonrisita hermosa de su pececito — no importa que, ese na'vi siempre estará ahí para apoyarte — continuó, hablando con cariño y de corazón.

— ¿y ese alguien quien es? — preguntó con un tonito coqueto, volviéndose a sentar solo para apegarsele y hacerlo reír en cuanto le rodeo con sus brazos — ¿y bien? ¿Quién es? — volvió a preguntar, haciéndose claramente el tonto.

— es un guerrero — contestó a este, dejando que lo rodeara sin problema — y también está casado con el mejor y todo poderoso jefe  de las islas Metkayina que haya existido — murmuró con cariño y diversión, disfrutando de hacer a su pareja reír con su ocurrencia.

— ¿y su nombre como era? Umh... ¿gatito salvaje? ¿Yam-yam? — le vaciló este, a lo cual negaba riéndose — ya me acorde — murmuró este desprendiendo su amor, rozando su nariz con la suya y haciéndole ruborizar — se llamaba Neteyam — termino por decir, haciéndole estremecerse ligeramente en cuanto escucho su nombre en un tono tan atractivo y profundo.

No pudo evitar empezar a reírse, habiendo quedado nervioso y abochornado. Le iba muy mal la resistencia en cualquier coqueteo con Ao'nung.

El se piel turquesa le beso acallando sus risas e hipnotizandolo.

— aún voy a seguirte diciendo de otras formas, lindo guerrero — burló este al separarse, mirándole a los ojos.

— y yo te seguiré llamando pececito, gran jefe — contestó con diversión, recibiendo un par de besos más antes de que se acostaran, empezando a charlar sobre más cosas sobre el día y algunas pasadas.

Le comento bastante sobre su día... a pesar de que este había sido relativamente aburrido, Ao'nung le escuchaba con interés y atención, haciéndolo sonrojar cada que lo encontraba mirándole fijo al hablar.

De paso, le habló sobre algunos pensamientos que le estuvieron rondando. Mencionando a Spider y en parte lo que este hizo... y porque, que era algo que tenía en dudas a medias.

Ao'nung sólo era capaz de responderle a sus dudas con el humano diciendo "tendrá sus razones" "los humanos son raros", y cosas así. Casi negaba ante la último, pero... si eran raros, la verdad.

Poco después, caída la noche y terminando de comer algo, se empezó a adormecer. Rendido ante lo cansado que era el embarazo y sobrellevarlo.

— Neteyam — escucho hablar a su pareja de repente. Manteniendole despierto y mirándole con una expresión de sorpresa — cariño, estas sangrando — comento poniéndose nervioso y buscando un trapo con el que lo cubrió la nariz.

— oh... — murmuró sorprendido. Tomando el trapo con sus propias manos avergonzado — no es nada malo, tranquilo — pronunció con un deje de tranquilidad bastante grande — Norm dijo que podía pasarme por mi cantidad de sangre en el embarazo — balbuceo limpiandose la nariz, mirando al otro con la carita roja.

— me asuste — susurro este con una mano en el pecho. Seguramente preguntándose que tan normal era eso en aquella cabecita suya.

Neteyam se rió un poco de su reacción, disculpándose y prosiguiendo a comentar que se estaba muriendo de sueño.

Ante eso, ambos se acostaron a dormir y esperar un próximo día, del cual deseo el cansancio no lo detuviera y pudiera salir por ahí.

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