💞<<{Annetta}>>💞
Una rabia silenciosa se encendió en mi interior al ver cómo tan rápido el brillo de Edeline se extinguió, ella es luz, amor y paz.
No puedo culpar a la mujer, los que deberían de haber respetado la relación tendrían que haber sido ellos, sus novios.
Algo de culpa tengo, yo la orille a aceptarlos, pero solo quería que sea feliz, que salga de su cabeza llena de comentarios negativos y viva.
Admito que me dio un poco de celos no tener más su completa atención, pero todo eso se esfumaba en el momento en que su sonrisa aparecía.
El beso que prácticamente yo le di frente a las escorias, no debería haber removido alguna fibra sensible en mí, pero lo hizo.
Es... algo difícil de explicar, la besé con toda la intención de que sea un pico, pero no tenía idea de que me iba a devolver tremendo beso.
De algún modo siempre supe que había una chispa ahí, por lo menos de mi lado, pero jamás pude ni podré aceptarla por miedo a mis padres.
De hecho, ahora que estoy llegando a mi casa los nervios empiezan a aparecer, las palmas de las manos me transpiran, escalofríos recorren mi columna vertebral.
Nunca le dije a nadie, ni siquiera a Edeline lo que hacen, si le he contado que me quieren obligar a casar con viejos, mi carrera la eligieron ellos, toda mi vida está basada en sus decisiones.
Menos mi actual relación, que sigue oculta para ellos y el beso de hoy, solo espero que los hombres que mandan a seguirme no lo hayan visto.
Renzo: Llegamos, ¿Estás bien?
Lo miro intentando adivinar a qué se refiere, pero sus ojos están puestos en mis manos, donde me estoy clavando las uñas para esconder los temblores.
Abro mis palmas y le doy la sonrisa más falsa que tengo, esas que mi madre me obligó a aprender en sus clases de etiqueta.
Anne: Estoy bien, solo enojada con tus amigos, pero ya está, no importa, me tengo que ir, te quiero chau.
Salgo apurada del auto despues de darle un corto beso, sin dejarlo contestar, cuando llegó a la puerta me doy la vuelta y él sigue ahí, le hago una seña con la mano diciendo chau otra vez y me meto a la casa.
Lo primero que me recibe es mi madre con los brazos cruzados y mala cara.
Madre: ¿Quién es el que te trajo? Sabes que no tienen permitido estar con ningún hombre, estás comprometida.
Anne: No porque así lo quiera.
Madre: El trato ya está hecho, lamento que a ti no te preocupe el bienestar de la familia.
Anne: ¿El de la familia o el de sus bolsillos?
Madre: Somos tu familia.
Anne: ¡Me vendieron! Nunca, escúchame bien, sobre mi cadáver me voy a casar con ese señor.
El dolor empieza a aparecer en mi cuero cabelludo debido a su agarre, me va arrastrando a no sé dónde.
Madre: No me importa lo que elijas o no, somos tus padres y decidimos por ti, ahora te voy a llevar con tu padre, tienes muchas cosas que explicar.
Lágrimas brotan sin parar de mis ojos, sé lo que quieren, se enteraron, y temo a lo que harán, no me golpean, aparte de galonearme el cabello claro, no quieren dejar muestras que alguien pueda ver.
Llegamos a la sala de la casa, mi padreestá sentado en el sillón tan tranquilo que me da miedo, levanta su vista a mí, asco, eso veo en sus ojos.
Padre: Necesito que me expliques qué es esto.
Lanza un teléfono a mis pies, con una foto del beso, me veo tan conmocionada y feliz en esa imagen.
Anne: Me volvieron a seguir.
No es pregunta, estoy segura de que eso fue lo que pasó.
Padre: Te equivocas, la foto me la mandó Carlo —el viejo verde con el que me comprometieron— está queriendo cancelar el trato por tus acciones inmorales.
Anne: ¿No ve inmoral casarse con una mujer a la que le triplica la edad?
Padre: ¡Cállate! —saca la mano de mi madre de mi pelo y agarrando del mismo lugar me tira al suelo— Vas a convencer a Carlo que estás dispuesta a ser su esposa.
<<Luego del casamiento, no sueñes con volver a ver a esa niñata, no vas a salir de tu nueva casa, vas a hacer herederos y criarlos dentro de tu hogar.>>
Genial también tengo que hacer de incubadora.
Anne: Primero muerta.
Padre: Eso se puede solucionar.
Otra vez tirando de mi pelo me arrastra hasta un armario donde solo te puedes sentar si llegas tus rodillas a tu pecho lo más que puedas.
Anne: ¡No!
Padre: Vas a aprender quien manda.
Anne: ¡No por favor! Hago lo que quieran, pero no me vuelvan a meter ahí.
Padre: Es tarde, sin estas lecciones, tu vida sería un desorden.
Madre: Deberías dejarla más tiempo, para que vea que no es normal estar besando a otras zorras marimachos.
Anne: ¡Ella es más mujer que tú!
Me lanzan dentro del armario, no puedo dejar de llorar, a pesar de que esto es algo normal en mi vida, nunca deja de doler el hecho de que tus padres, los que deberían de amarte con sus vidas, te lastimen de tal forma.
Me gustaría contarle a Edeline, o Addy, incluso a Renzo, pero sé que todos tienen sus propios problemas y no quiero ser una carga.
Soy fuerte, yo puedo solucionarlo.
Espero que lo que me digo sea verdad, porque en verdad prefiero morir que casarme con ese asqueroso señor.
<<{María}>>
Míos.
Ellos van a ser míos, aunque tenga que matar a todo el que se me atraviese, empezando por ella.
Te metiste con los hombres de la mujer equivocada, voy a ser tu pesadilla más recurrente.
Tu vida va a ser miserable, yo me voy a encargar de eso.
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Edeline. 2°
RomanceSegundo libro de la saga Legado. (Independientes) ¿Que opinas si te dijera que un casi accidente automovilístico podría cambiar totalmente tu vida? No me crees, ¿no? Pues eso es lo que le paso a Edeline y a los gemelos Vitale, su vida dio un vuelco...