Alterno

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-Narración ajena a cualquier personaje-

La guerra comenzó hace mucho tiempo tiempo y la población que queda en el reino ha vivido de una manera pacífica. Sin embargo, esa inquietud por saber la situación del campo de batalla es más grande que la paz que viven.

Sorpresivamente, desde que la guerra comenzó, los demonios no han puesto un pie en el reino ni por accidente. Si bien, las bestias demoníacas son otra cosas, ellas no llegan a hacer la gran cosa debido a quienes aún protegen el reino. Mayormente es gente de Mazushi y unos cuantos aventureros de Shinshi, sin olvidar también a la gente que no estaba totalmente capacitada de los otros reinos.

La mayor amenaza que se presentó en el reino, fue un gran número de bestias demoníacas yendo al mismo tiempo a los campos de cosecha, pero fue controlada rápidamente por cuatro personas, personas que conocen muy bien.

Yuma: ¡Haa! Por poco arruinan la cosecha.

Axel: Y que lo digas.

Zant: Ahora tenemos que deshacernos de lo cuerpos antes de que contaminen el suelo.

Karim: Déjame eso a mí.

Cuatro personas de Mazushi son quienes protegen a toda costa en reino, no importa en qué extremo de éste se encuentre la amenaza, ellos van a controlarla de inmediato. Ana los nombró como "Los cuatro escondidos"

...

->10 de agosto - 10:00 p.m. - reino Gralsmer<-

Luego de un día de arduo trabajo en los campos, la cosecha estaba lista para ser enviada al campamento de guerra donde todas las tropas descansan, solo faltaba que las carrozas partieran.

Karim: ¿Están seguros que no es pesado?

Carrocero: No se preocupe, es una buena cosecha. Nos aseguraremos de darle un buen descanso a los caballos.

Yuma: Muy bien, espero que no tengan complicaciones durante el viaje.

Dos de los cuatro escondidos terminaron de ayudar a subir los suministros a las carrozas, pronto esa carga tardaría alrededor de dos días en llegar.

Los carroceros partieron y luego de un par de minutos, el otro par de los cuatro escondidos se reunieron con Karim y Yuma.

Zant: Últimamente las bestias no dejan de salir del bosque del oeste, lo bueno es que ellas también tienen que dormir.

Axel: Me encantaría poder decir que mi trabajo es fácil, pero con todo lo que tenemos que hacer en la herrería y el entrenamiento que me están dando, me estoy muriendo.

No parecía un día fuera de lo ordinario, pero hay un factor que nadie tomó en cuenta; bueno, solo una la tomó en cuenta a pesar del riesgo que conlleva.

A lo lejos, unos 50 metros, detrás de un árbol, yacía un figura extraña. Esa figura estaba al tanto de cada movimiento que hacían los cuatro escondidos, durante todo el día estuvo pendiente de ellos.

No intervino en su trabajo, fue una sombra todo el tiempo, alguien que una persona normal no podría detectar.

Karim: Ah, casi lo olvido.

Axel: ¿Qué co~

Yuma: ¿A dónde fue?

Karim abrió un hoyo en la tierra y desapareció de la vista de los otros. Hizo un túnel donde avanzó rápidamente, pues se mueve como un pez en el agua, solo que en este caso sería por tierra.

Se colocó debajo de esa persona que los estuvo vigilando y lo tomó del pie. Rápidamente se movió por debajo de la tierra con ese intruso y salió frente a los otros tres.

Isekai MexDonde viven las historias. Descúbrelo ahora