El Oscuro Brillo de la Luna. [TRILOGÍA DE ÁNGELES Y DEMONIOS] II

Capítulo 17: Transición.

200 años después...

Mikan estaba en su oficina junto con Chase descansando después de pasar unas seis o quizás siete horas escuchando a Manly hablar sobre cómo liderar de buena manera el reino.

Chase soltó un resoplido mientras sentía un fastidioso dolor de cabeza, sentía un cansancio mental y físico algo desesperante, Manly era bastante intenso y estricto cada vez que hacía algo o decía algo, siempre quería que todo se hiciera a su modo, y no se podía cuestionar su palabra porque se molestaba bastante.

Que fastidioso le parecía prepararse para ser rey.

Ni siquiera quería ser rey.

Le encantaría que por alguna razón, sin ninguna explicación, Grayson desarrollará los ojos de rey.

Ambos levantaron la mirada cuando un escándalo se instaló en la planta baja del palacio, cerca del almacén, Chase sintió un extraño toque en su pecho, Mikan frunció el seño y suspiró, corrió escaleras abajo en dirección a la cocina, al ir llegando olió ese típico olor dulce, Grayson...

Maldijo internamente y abrió con desespero la puerta de la cocina.

Al llegar, su padre tenía agarrado del cuello a su hijo menor, mientras esté forcejeaba con él para liberarse de su agarre.

—Papá, lo siento, déjalo...

—Este niño me está desesperando Mikan. —dijo apretando su agarre y enterró las uñas en su piel haciendo que Grayson comenzará a llorar de miedo. Mikan al ver la sangre gotear en el suelo se desesperó y miró a todos lados buscando en su mente alguna excusa o manera de hacer que su padre no hiciera una locura.

—Lo siento, lo siento...

—Le daré de mi veneno.

—¡¡No!! —gritó dejando todo en completo silencio—. Por favor... No lo hagas.

—¿Por qué no?

—No le darás de tu veneno a mi hijo. —Manly dirigió su mirada a Mikan cuando esté le hablo, su voz había sonado muy oscura. No había sido una petición.

—¿Y si no que? —dejó salir su energía pero para su sorpresa Mikan estaba más concentrado en proteger a su hijo que quitar su concentración y percibir su energía.

Toda la tensión del momento se deshizo en el aire cuando Gratt llegó al palacio entrando por una ventana. Manly lo miró y suspiró.

—Siempre debes llamarlo, ¿no Mikan?

—¿Que sucede? Suelta a Grayson papá. —Manly sonrió y lo soltó haciendo que Grayson callera fuertemente en el piso, él salió corriendo de la cocina y fue directamente al cuarto de Chase.

—Le daré de mi veneno si sigue colmando mi paciencia.

—Papá... —intentó decir algo Gratt, pero Manly apretó su mano cerrando su boca para que no hablara.