El Oscuro Brillo de la Luna. [TRILOGÍA DE ÁNGELES Y DEMONIOS] II

Capítulo 55: Víspera.

En el palacio dolía cada segundo, Manly sentía esa presión en su pecho, se acostó en su cama junto con Wiler a pasar, la que sería, su última noche. La oscuridad y el silencio era lo único que los acompañaba. Sus respiraciones nerviosas y rápidas se perdían en la habitación. Estaban solos, Rest se había ido con sus hermanos al mundo humano escapando de todo el desastre sin dar alguna pista de si volvería.

Suspiró y sintió los brazos de Wiler rodearle el cuello acariciando su cabello, Manly cerró los ojos y lo abrazó por la cintura.

—¿Esto es lo último señor? —le dijo de repente en un susurro—. ¿Está será la última noche?

—Si... —dijo en un suspiro—. Tal parece que si...

—¿Será la última vez que nos veamos?

Manly abrió los ojos reconociendo el momento, las miserables ganas de llorar volvieron a golpearle el rostro, levantó la cabeza y Wiler también estaba a punto de llorar. Este era el momento...

—Creo que si... —Wiler le sonrió.

—Me gustó haber pasado todo este tiempo con usted mi señor... —dejó un beso en su frente y lo abrazó de nuevo—. Gracias por dejarme amarlo...

Este era...

—Fueron los mejores años mi señor... Desde que lo conocí...

Está sería la primera vez que lo llamaría por su nombre...

—Todos estos años han sido los mejores de mi vida...

—Cállate Wiler... —apretó la camisa del guardián y las lágrimas salieron de sus ojos enseguida.

—Si no se lo digo ahora... ¿Entonces cuando lo haré?

—No lo digas... —Wiler soltó una risita junto con lágrimas.

—¿Sabe lo que diré, no es así? —Manly se quedó en silencio—. Si lo sabe al menos... solo déjeme decirlo... —al no tener algún reproche respiró profundo y volvió a mirarlo—. Te amo Manly... —Wiler sonrió y las lágrimas bajaron de sus ojos—. Está es la primera que digo su nombre señor... —Wiler sintió una inmensa felicidad en su corazón al decir esas palabras, Manly comenzó a llorar sin control en su pecho abrazándolo con fuerza.

—¡Vete de aquí Wiler! —sollozó—. ¡Ellos te recibirían sin dudarlo! ¡Eres bastante fuerte...!

—Preferiría morir antes que traicionarlo mi señor...

—Vete Wiler... Por favor...

—Quédese tranquilo señor... Estaremos bien...

—¡No quiero que mueras...! ¡Por favor solo vete...!

—No lo dejaré... —Manly lo tomó con fuerza y enterró su cabeza en su hombro mordiendolo con rudeza, Wiler cerró sus ojos apretando los dientes aguantando el dolor. Lo había mordido. Manly lo miró con su boca llena de sangre.