El Oscuro Brillo de la Luna. [TRILOGÍA DE ÁNGELES Y DEMONIOS] II

Capítulo 58: Alma.

Las llamas se alzaban por cada rincón de Kalyn. Aún mantenían las distancia de su padre, era demasiado fuerte como para ir de cabeza sin pensarlo, toda la gente peleaba a muerte, no había tiempo para pensar, no sé podía dar un paso en falso.

Mikan estaba buscando a su padre, y Gratt, él estaba buscando a Wiler. Quería deshacerse de Wiler lo antes posible pero se había desaparecido de su vista. Se cubrió con energía y Black y Cesil lo protegieron mientras él... Gratt enterró sus dedos en la tierra cerrando sus ojos.

Sus ojos y un árbol lo detectaron al mismo tiempo, en la rama más alta de un árbol, camuflandose con su balanceo de peso. Le dió esa misma imagen a Black y Cesil.

Un golpe en su cabeza lo hizo caer al suelo dándole un toque desesperado a Manly en su pecho. El filo de la espada cortó levemente la piel del cuello de Gratt haciéndolo retroceder curando su piel, Manly lo miró con furia. Gratt sonrió, si era cierto. Su padre se había enamorado de Wiler. Mikan en ese momento llegó al lugar y corto el brazo de su padre haciendo que retrocediera cubriendo a Wiler.

—¿Que mierda están haciendo? ¿Quieren que los mate?

—No lo harás... —se interrumpió cuando Black mordió profundamente el cuello de Wiler, él gritó y puso una mano en la herida buscando curarse.

Gratt se quedó en blanco, Mikan comenzó a pelear con Manly, y Black con Wiler. No sabía que hacer. Quería llorar. No quería que su padre muriera, pero tampoco quería que estuviera vivo. ¡¿Por qué todo debía ser tan complicado? Jaló su cabello con rabia.

Mikan a diferencia de él mantenía una mirada fría y una actitud y una voluntad inquebrantable, tenía una misión, debía cortar su cabeza. La protección de Gratt lo hacía inmune a la energía de cualquier dominante que estuviera en el lugar.

Gratt no lo aguantó más. Quería terminar con todo. Sabía lo que debía hacer, subió la cremallera de su abrigo y a paso firme se dirigió a la pelea de los guardianes. Mikan apretó el mango de la espada, Gratt había dudado demasiado.

Aceleró el paso y sacó su espada.

—¡Black! ¡Cesil! —las orejas de Black subieron.

Cesil congeló las piernas de Wiler dejándolo sin poder moverse, Black concentró su poder en sus puños, golpeó el rostro de Wiler logrando desconcertarlo por el dolor que le había causado. Gratt con lágrimas en los ojos tomó con fuerza la espada y temblando completamente lo hizo.

Mikan notó como los ojos de su padre se llenaban de lágrimas, de repente lo miró.

—No me disculparé Manly... —le susurró elevando su espada.

Todo el lugar se detuvo en ese instante, todo se detuvo cuando la cabeza de Manly rodó por el suelo.

...

Gratt respiraba agitado y enseguida las palabras de Black llegaron y retumbaron en su mente.

«Tome su alma, señor Gratt. No lo dejes ir...»

Gratt al ver que todos se detenían soltó su espada y corrió. Su respiración agitada solo hizo que las lágrimas salieran de sus ojos sin restricciones, veía esa llama azul brillar y alejarse de él.

¿Azul? ¡¿Estaba azul?! ¡No! ¡No podía irse así! ¡No podía dejarlo ir así!

«No lo dejes ir así...»

—¡¡Papá!! —notó como la llama se detenía—. ¡¡Ven conmigo!! —y continuó su camino. Gratt sacó sus alas, la llama estaba llegando al borde—. ¡¡No puedes irte así papá!! ¡¡Goy!!

Un grito salió de su garganta y con un impulso proveniente de Goy y justo estando en el borde estiró su brazo concentrando todo su poder para poder absorberla, y por suerte lo logró. El alma de su padre se detuvo y fue retrocediendo hasta llegar a sus manos. Gratt sonrió y cubrió su alma con su poder.

—Tranquilo papá... —levantó su mano izquierda haciendo aparecer el alma de Wiler que había arrancado con su espada, junto sus manos haciendo lo mismo con sus almas y las consumió dejándolos en el bosque—. Sean felices ahora... Ya nadie podrá decirles nada...

...

Yendo de regreso al centro de todo no había podido dejar de llorar. Al ver a Mikan acercarse a la cabeza de su padre soltó un suspiro, despojó a su padre de la corona y se la puso.

No había ningún ruido, solo se escuchaban las descontroladas respiraciones, pero todos estaban expectantes por qué era lo que diría. Mikan lo miró buscando alguna aprobación, Gratt le dió una sonrisa forzada y le asintió.

—Yo soy su nuevo rey ahora... —dijo y levantó la espada—. ¿Alguien en desacuerdo? —la contestación a su pregunta se dió cuando todos los presentes se arrodillaron.

Gratt suspiró, había salido mejor de lo que esperaba.

...

Black volvió al mundo humano caminando pesadamente por las calles, su casa jamás le pareció que estuviera tan lejos del portal como ahora, al llegar solo pudo estrellarse con la puerta sin fuerzas, respiraba entrecortadamente, Raven corrió escaleras abajo y arrastró el cuerpo a Black hacia adentro de la casa, lo cubrió con su poca energía y debido al cansancio cayó dormido en sus brazos.

El desgaste en su vitalidad lo había hecho desmoronarse en segundos.

Su rostro estaba destrozado, su cabeza estaba bastante golpeada, su brazo derecho estaba muy quemado, el izquierdo estaba congelado y una de sus piernas estaba rota en varias partes. Algunas horas más tarde entró Gratt por una ventana, entró con todos sus sentidos alerta pero al ver esas seis perlas doradas se relajó.

...

—¿Necesitas llorar? —le preguntó Raven en un tono divertido y Gratt negó sonriendo.

—Por ahora no siento nada, no me siento bien, pero... tampoco es como si me sintiera mal. —levantó sus manos y dejó ver las almas de Wiler y Manly. Raven vió como esas dos almas estaban más felices que nunca—. Wiler no se resistió cuando tomé su alma, mi padre intentó irse pero logré absorber su alma.

—¿Están bien ahí? —Gratt sonrió cuando vió que el alma de su padre dejaba ir un destello.

—Si... Increíblemente, ellos sabían que iban a morir y están bien con eso. Que sus almas estén azules da prueba de que están en paz. Junté sus almas para que estén juntos, eso es lo que ellos querían...

Los que estaban llorando ahora eran Chase, Grayson y Mikael. Habían pasado horas y horas y seguían llorando.

—Tranquilos... —Grayson junto con Chase estaban colgados en su cuello sin parar de llorar. Mikael era el único que se mantenía medianamente tranquilo—. Todo está bien ahora... Ya están a salvo todos...

Raven notó como la energía de Gratt envolvía a Black, estaba curandolo lentamente.

—Ya podremos estar todos juntos de nuevo...

Manly a dormir con los peces.

(¿O no?)

Siguiente capítulo en cinco minutos.

YohaLR