El Oscuro Brillo de la Luna. [TRILOGÍA DE ÁNGELES Y DEMONIOS] II

Capítulo 22: Muerte.

Un mes después de la llegada de Darling al mundo oscuro:

—Gratt, necesito que hagas lo que te pedí hace un mes...

—Lo se padre, solo estaba preparando todo para poder salir.

Gratt miró una última vez a su padre y se fue de su oficina yendo al patio central del palacio, Gio pasó volando por encima de todo.

Gratt mientras lo veía volar se preguntaba si Gio era realmente el heredero de los animales, creaba animales y lo había visto conviviendo con animales de todo tipo, se suponía que su cuerpo tenía una feromona diferente que atraía a los animales pero... En algunos momentos cuando volaba lograba darse cuenta de cómo el cielo se abría justamente como hacia el bosque con él, y las profundidades con su padre, dándole una entrada especial, ni siquiera estaba seguro de nada, ¿Se podrían heredar dos cargos al mismo tiempo...?

Comenzó a caminar de regreso a su casa pero su padre en la puerta de su oficina habia escuchado todos sus pensamientos, elevó la mirada hacia Gio creándose una duda en su mente.

¿Era posible heredar dos cargos a la vez?

...

Ya había pasado otro mes desde que el ángel y el hijo de Mikan habían llegado al mundo oscuro, y todo estaba yendo lo suficientemente tranquilo para que no tuviera que preocuparse, el olor no salía de esa zona específica en dónde vivían encerrados, y para darles aún más encierro los cubrió con una capa de su energía para aislar aún más, si es que eso se podía, el olor del ángel que tenía el cachorro, Darling, el ángel, ya no producía olor así que por él no se preocupaba ahora.

Gratt ya en su casa se equipó con lo que creyó prudente llevar. No sabía cuánto tiempo duraría fuera y no quería arriesgarse a llevar de más, o en todo caso llevar menos de lo que necesitaría. Heni estaba nervioso, era la primera vez que saldrían ellos dos solamente, sabía que debía mantenerse firme ante cualquier cosa, no iba a dejar por nada del mundo que Gratt considerará cambiarlo por otro guardián.

Al cruzar el portal y estar en el mundo humano sintieron inmediatamente el ambiente tenso que había. Un guardián apareció en una rama de un árbol cercano mirándolos a ambos.

—Señor...

—Llévame...

Lo guió hacia una parte alejada del bosque, acercándose peligrosamente a una zona infestada de angeles, el olor era intenso, solo habían ángeles, pero...

Atravesaron esa barrera y ahora todo era de ángel, vió como su piel se quemaba parcialmente, habían aprendido a crear una barrera de seguridad contra ellos, débil pero estaba ahí. Se detuvo cuando su piel comenzó a arder, dió unos pasos atrás y todo paró.

La primera parte era una prueba, la segunda parte era ya una clara advertencia.

Tenía como misión destruir esa base de angeles.