SI FUÉRAMOS LIBRES - BY NATH 🥀

54.

Capítulo 54.

Entramos en una cafetería ambientada en los años 50, de estilo americano. Mis ojos viajan desde las cerámicas negras y blancas, hasta las luces celestes y púrpuras. Todo es demasiado llamativo, nuevo y pulcro. Quizás un lugar recién inaugurado por sus relucientes azulejos multicolores.
El aroma del café y panecillos recién hechos se cuela en mis fosas nasales y termina abriéndome el apetito.

El lugar esta prácticamente vacío, por lo que conseguir una mesa lo suficientemente grande para todos nosotros no es difícil.
En silencio nos acomodamos y esperamos que la mesera nos atienda.
Niall a mi lado, sostiene mi mano y acaricia mis dedos en silencio. A pesar de haber solucionado el problema con Bendt, está muy distraído.

Siento que de alguna manera, las palabras de Bendt se han quedado en su cabeza. Quizás algunas más que otras, como por ejemplo; que él podría ser perfectamente un líder, y que sus opiniones y decisiones podrían ser tan importantes como las de Michelle, Bobby y Gerry. Y que aquél lugar se lo ha ganado por todo lo que ha contribuido a la organización.
Sin embargo, Niall no lo siente así. Si bien es una persona que cuenta con las cualidades, ya sea empleando la calma, teniendo claras sus responsabilidades, siendo determinado y teniendo una voz de liderazgo aunque no lo sea, él no se siente preparado para tomar un cargo de esa envergadura.

Quizás, en el fondo de su corazón, teme terminar como Michelle, Gerry o su padre. Si bien su vida se trata de esconderse y ser un miembro de una organización terrorista, es diferente cuando eres reconocido. Así como Gerry, que siendo un miembro del IRA oficial y teniendo lazos directos con el Sinn Féin, debe ocultar su liderazgo en el IRA provisional, un grupo terrorista que desea buscar la independencia de Irlanda mediante atentados.
O como Michelle, un miembro del IRA provisional, un hombre reconocido por los ingleses y que en más de una ocasión han intentado asesinar. Un ejemplo de ello fue cuando murió la madre de Niall, cuando en realidad el blanco era él.

—Mi padre decidió que será un funeral tradicional de la organización —Comenta Caleb, sacándome de mis pensamientos —Con todos los honores incluidos —Añade.

—¿Estamos realmente preparados para un funeral masivo? —Pregunta Edmund —Llevar nuestra indumentaria nos haría el blanco de los francotiradores.

—En esta ocasión, no será masivo —Continúa Caleb —Ya sabes, en el pasado solían respetar el duelo y la bandera blanca, ahora es diferente.

—En ese caso, está bien. No quiero morir sin antes haber ido a Londres —Añade Edmund antes que la mesera nos entregue la carta y comience anotar nuestra orden en su libreta.

Definitivamente, todos están más que preparados para viajar a Inglaterra. Y no puedo evitar el dolor que nace en mi vientre al saber lo que harán.
Temo por las personas que morirán, temo que se conviertan en Maura, una víctima en el lugar equivocado.
Pero también temo por los hombres que están sentados a mi alrededor, en especial por Niall, quién es todo para mí.
Desearía que todo fuera diferente, pero lamentablemente no existe nada que yo pueda hacer para cambiarlo.

Minutos después, nos traen nuestra orden. Nadie menciona nada más, solo escuchamos las noticias que transmiten en la televisión mientras desayunamos. Algunos con más entusiasmo que otros, mientras Caleb se devora sus hotcakes, Bendt apenas a tocado la taza de café.

—¿Todo bien? —Susurra Niall en mi oído.

—Sí —Beso su mejilla —¿Tú estás bien?

—Lo estoy —Me observa somnoliento —Un poco cansado, pero bien.

—¿Que debes hacer después?

—Esperar las indicaciones de Gerry.

—¿Y si no hay indicaciones? —Pregunto y observo una pequeñísima sonrisa en sus labios.