SI FUÉRAMOS LIBRES - BY NATH 🥀

57.

Capítulo 57.

Si tan solo la vida fuera tan fácil como esto, caricias y demostración de amor. Tan fácil que mi única preocupación sea demostrarle a quién amo cuán importante es para mí.
Son justamente estos momentos en que pierdo la noción del tiempo, en que todo pareciera desaparecer y solo existiéramos él y yo en la faz de la tierra.
Nuestras discusiones siempre serán insignificantes si nuestra manera de terminar el día es así; acurrucados bajo las sábanas, solo mirándonos y mostrando a través de las suaves caricias que podemos encontrar la manera de solucionar nuestras diferencias.

Cómo ahora, con su mano deslizándose perezosamente a lo largo de mi espalda desnuda mientras me observa. Me hace suspirar, constantemente.
Apoyada en mi propia almohada intento descifrar en qué está pensando, pero su semblante no me da las pistas que necesito.
Pero está bien, respetaré su decisión y no lo presionare para hablar. Quiero que sea él quién se decida hacerlo, que sea él quién quiera abrir su corazón y contarme con sus propias palabras sus miedos y temores al ser un nuevo líder en la organización.

—¿En qué estás pensando? —Dice, deslizando su mano en mi hombro y luego avanzando hacia mi cuello para terminar en mi mejilla.

—Nada en concreto —Musito —¿Y tú?

—En ti —Sonrío automáticamente.

—¿En qué exactamente?

Sonríe con malicia.

—En lo pecosa que eres —Entrecierro los ojos preparada para responder, pero él con una sonrisa encantadora añade —: Y en lo mucho que me gustan, eres preciosa, muy muy preciosa.

Vaya, si que sabe ser romántico cuando desea. Acercándome, dejo un beso en sus labios.

—En ese caso, gracias.

—No hay de qué, simplemente lo eres —Su dedo pulgar acaricia mi pómulo mientras me observa, y tengo la leve intuición que desea iniciar nuestra conversación.

—¿Qué ocurre? —Pregunto, apoyándome en mis codos para verlo mejor.

—Necesito hablar contigo.

Bien, entonces hablaremos de lo que ocurrió.

—Sí, por supuesto.

Niall asiente lentamente, y yo guardo silencio a la espera. El tiempo comienza avanzar y su rostro se llena de preocupación, haciéndome sentir incluso a mí preocupada también. Entiendo que su nuevo cargo dentro de la organización no sea de su agrado ¿Pero porqué se ve como si estuviera incluso nervioso?

—Tiene que ver con tu padre —Dice, apenas en un susurro.

Mi sangre se enfría, puedo sentir como es drenada de mi rostro y un dolor punzante invade mi pecho. Esperaba cualquier cosa, menos esto.
La seriedad de su rostro solo me hace saber que él lo sabe ¿Verdad?
Él sabe que mi padre está involucrado en el atentado que llevó a su madre a la muerte. Mierda, mierda.

—¿Mi-mi padre? —Mi voz suena aterrada y el dolor en mi vientre incrementa considerablemente —¿Qué ocurre con él? ¿Está bien?

—Sí, él está bien —Responde rápidamente en un intento de calmar mi preocupación.

Frunzo el ceño. Esto no tiene sentido. Sí él lo sabe ¿Porqué no está furioso? ¿Porqué no está gritando con frustración? ¿Y porqué no está sufriendo como creí que lo haría?

—Entonces... ¿Qué es lo que pasa?

—Ven aquí —Me pide, pero es él quién me arrastra a su lado, tomándome por la cintura —Abrázame.