29.

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Capítulo 29.

No me emociona ver a Irina aquí, pero decido callar cuando la veo cruzar el umbral de la puerta. Su novio Edmund está aquí, es lógico que ella también lo esté, por él.
Lenay la saluda con una sonrisa forzada, sé que no existe una buena relación entre ellas y lo comprendo totalmente. Hay algo en Irina que aleja a las personas, sobre todo a las mujeres.
Estoy segura que es su manera de ser, rara vez la veo sonreír y actuar como se supone que lo hace una chica de su edad. Por Niall sé, que apenas tiene 21 años, pero actúa la mayor parte del tiempo como una señora de 50. Es amargada, aburrida y me odia. No debería juzgar su manera de ser, todos somos diferentes, pero me gustaría que fuera diferente, me gustaría que al menos no me mirara como si yo fuera una intrusa.

Quizás su aversión a mí, es porque soy mitad británica. Nací aquí, en Irlanda, pero mi padre es británico, y contra eso no puedo hacer nada. Aunque siempre me he sentido más irlandesa que británica... Bien, tampoco importa como yo me sienta, el punto es, que ya no puedo encontrar más motivos por los cuales Irina me detesta.
Por supuesto, tengo un motivo más, pero poco a poco pierde sentido. Sobre todo por la manera en que abraza a Edmund y su sonrisa es exclusiva para él.

-Te echaba de menos —La escucho murmurar mientras rodea la cintura de su novio y lo besa en los labios con cariño.

-Y yo a ti, linda —Acercándose, le besa la nariz y ambos sonríen.

-¿Escuchando conversaciones ajenas? —Susurra Niall en mi oído y me ruborizo.

Dándome la vuelta lo noto mirándome con diversión.

-Nada que ver, pesado.

-Sí, seguro —Se burla y no puedo evitar darle un golpecito en las costillas —¡Vale, no seas agresiva!

-¿Yo agresiva? Jamás.

Sus brazos rodean mis hombros y me abraza contra él mientras me arrastra hasta la cocina, lejos del grupo que está en el salón.

-Tú sabes que me hubiera gustado mantenerte alejada de los chicos, para evitar problemas —Dice —Pero siento que del solo hecho de tenerme, ya estás en peligro, así que ya no lucharé contra la corriente, Isabella. Quieren ir a un bar, un bar clandestino que está a las fueras de Belfast, Caleb te invitará y sé que insistirá si dices que no —Sigue diciéndome —Sí tú quieres ir, está bien. Te mantendré a mi lado, en todo momento.

Sonrío contra su pecho. Es la primera vez que él acepta que salga con el grupo. Aquella vez que fuimos al lago, no estaba feliz. Me alegra que ahora sea diferente.

-Sí tú estás a mi lado, no tengo nada que temer —Le hago saber —Gracias por aceptar que sea parte del grupo.

-Un momento —Él me observa —No digas que eres parte del grupo. Jamás lo menciones.

-¿Porqué? Siento que son mis amigos ¿O no?

-No son tus amigos, no deben serlo.

-¿Porqué? —Insisto —Sé lo que hacen, sé lo que haces tú. Los he protegido de Ben...—

-Lo sé —Me interrumpe —Es solo que... —Se detiene.

-¿Qué? Dímelo.

-Si la policía en algún momento nos atrapa, debes decir que te hemos secuestrado, es lo correcto. Así estarás a salvo ¿Comprendes?

-¿Qué? No, jamás diré algo así —Respondo herida por lo que está diciendo —No voy a negarte, no me salvaré para culparte a ti, eso jamás.

-Isabella —Se queja —Haré lo que sea para evitar que vayas a la cárcel por estar con nosotros.

SI FUÉRAMOS LIBRES - BY NATH 🥀Donde viven las historias. Descúbrelo ahora