Siempre fuiste tú

CAPITULO 47

Pov: Atenea

Em hoy está muy sentimental, y mimado, seque casi siempre es así pero se niega a soltarme, no quiere que lo baje de mis brazos.

— Bebé tengo que salir a dar entrenamiento.

— No, domil.

— Te puedo llevar con tu abuelito así puedes dormir un rato más.

— Pelo yo tigo— llora y se mete a mis tetas.

Tanteo su pañal y necesita un cambio así que a cómo puedo, acomodo todo el sofá. ¿A qué edad será bueno quitarles el pañal? Estoy por acostarlo pero llora más.

— Do, do tigo.

— Solo cambiaré tu pañal amor— beso su carita y quito su ropita.

Para evitar accidentes le paso la toallita como Christopher lo hace y sus piecitos himperactivos comienzan a moverse.

— Mi vida papi no está así que ayúdame y no te muevas mucho.

Se ríe y los mueve aún más. Con dificultad le quitó el pañal y comienzo a limpiarlo. Medio se comporta pero no puede evitar moverse.

Antes de que pe ponga el pañal limpio me habla.

— No ongas, quielo ati— suelto una carcajada por eso.

— No puedes quedarte así mi vida, sabes estas parecidas de tu cuerpo son privadas, por el momento solo tu papi y yo podemos verlas al bañarte, o cambiarte, no más. pero en algún punto nadie más lo podrá hacer solo lo podrá solo tú— termino de decidir y no se ha dado cuenta de que le puse su pañal, y estoy por terminar de ponerle su body negro.

— Te amo mami.

— Yo también te amo mi amor hermoso— le beso su pancita y nariz— Vamos soldadito.

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Llego a la bola de tenientes y solo de ver a la mujer se me revuelve el estómago.

— ¿No quieres bajar amorcito?

— No, tigo— insiste.

— Levántese vamos a empezar.

Todo acatan la orden, la mujer está no trae ni siquiera el uniforme.

— ¿Se puede saber por qué no trae el uniforme? — le pregunto a la mujerzuela, trae un top demasiado pequeño, unos shorts y tenis.

— Es que me siento más cómoda así.

— Vete a cambiar tienes 3 minutos.

— Pero....

— Es una orden, lárgate. Los demás quiero comiencen a calentar mientras su compañera regresa— sus ojos son de furia total— Antes de que vengas ve con mi secretaria pídele el canguro de mi bebé.

— Ese no es mi trabajo.

— Te equivocas, tu trabajo es seguir órdenes y yo te estoy dando una así que te callas y la acatas. ¡¿Qué esperan?!

Todo se van y solo le sonrió a mi niño.

— ¿Te gustaría hacer algo especial hoy mi vida? ¿Podemos ir al cine, a cenar o a un lugar a jugar?

— ¿Tú y do soditos?

— Sip, tú y yo sólitos.

— ¡Siii! — sus manitas se mueven ansiosas.

— Pregunta bebé.

— ¿E es un ti-tine?

— ¿Nunca has dio con papá? — niega— Es un lugar donde pasan películas, la gente suele ir, comer palomitas de maíz, dulces, hay una pantalla grande, y asientos.