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Estaba feliz, tan feliz estaba que las lágrimas bajaron por sus mejillas sin darse cuenta. En tan poco tiempo había logrado no solo terminar la preparatoria, sino también la universidad antes que su hermano, y en menor tiempo.

Yuuichi se sentía completo.


--Estoy orgullosa de ti --el mensaje de su madre le hizo sentir calor dentro de su ser, olvidando en ese momento su abandono.


Estaban en un restaurante elegante donde un amable caballero le guio hasta la mesa en donde tomaría los alimentos junto a su madre, la cual llegó unos minutos tarde.

Celebrando aquel momento, Yuuichi no estaba muy cómodo en aquel sitió nada usual a los restaurantes que frecuenta —Creo que ya es tiempo que pienses en ti –dijo ella para beber de la copa con vino blanco.

Las personas al rededor, gente importante, algunas celebridades y gente de mundo, se sentía distinto, ella sonrió —cariño –le tomó la mano y apretó con suavidad —debes de ver por tu futuro.

—Mi futuro es con mi hermano –aquello no le agrado a la mujer, quien suspiro y miro a otro lado —¿Qué te ha hecho mi hermano para que los desprecies así? El también es tu hijo –quería entender.

—No estamos aquí para hablar de eso. Estamos celebrando tu esfuerzo –dijo ella manteniendo la calma. El mesero trajo el primer plato: lechugas varias con ralladuras de zanahoria, col morada, y aderezo —es un momento especial que debemos de disfrutar, de convivir.

—Y lo sería, su el abuelo y Kyou estuvieran aquí.

—¿En serio quieres arruinar mi apetito? –bufó. Se lacio el cabello y le miro fijo —no deseaba más hijos. Kyousuke solo me arruino los planes contigo –dijo por fin liberándose de aquellas palabras.

Pero causando dolor en alguien —¿Cómo puedes decir eso? –se puso de pie llamando un poco la atención de la gente.

—Yuuichi –llamo de manera delicada —por favor...

—Un hijo más no puede arruinar a ninguna madre... Eso no... –negaba aun de pie —¿Cómo puedes decir eso? –más gente se percataba de lo que estaba sucediendo.

—Yuuichi –volvió a llamar, esta vez con un tono más autoritario —toma asiento.

Estaba molesto, más de lo que imaginaba. Pensó en otras razones, otros motivos por los cuales su madre se alejo de ellos, y no la juzgaba aun con ello ¿Quién era él para hacerlo? Solo pensaba en las razones que puedo tener, una mujer bella e inteligente como ella aun tenía mucho por dar, pero cuando es madre, su mundo empieza a ser algo más que ella.

Pero no siempre sucede así.

—Escucha –sentía las miradas de algunas personas sobre ellos, muy discretas y otras no tanto, empezando a musitar algunas cosas —no soy la mujer perfecta, mucho menos un ser humano que haga las cosas correctamente. Las cosas no resultaron como yo esperaba, las cosas no eran fáciles y con el nacimiento de Kyousuke... Las cosas no fueron mucho mejor –bebió —no lo deseaba, no lo quería desde que estaba en mi vientre. Quise abortar pero pasaron otras cosas... –toma aire, el ambiente no es el mejor —no soy ni seré una buena madre, pero si se una cosa y eso es que te amo a ti. 



—¿Y esa cara? –el abuelo le miro con el ceño fruncido, agradecía que Kyousuke estaba con los amigos —¿Esa mujer te hizo algo?

Negó —mi padre... –aquello tenso al anciano —abuelo ¿En verdad mi hermano fue lo que acabo por completo con la relación de papá y mamá? –Yuuichi es un ser amable y puro, en cuyos ojos se puede ver la pureza de su corazón.

El anciano tomo asiento junto a su nieto mayor, dio un bocado de aire y miro al frente —Yuuichi... ¿Qué es el amor para ti? –aquello fue extraño para el chico —¿Crees que el amor sea algo frágil o duro?

Pensó un poco —el amor es un sentimiento puro y sincero que nace del corazón, uno que no daña, que no lastima...

El anciano le escucho y rio un poco —el amor es una moneda, tiene dos caras. Hoy en día solo parece ser parte de la diversión de muchos, decir "te amo" ya no da el mismo sentimiento que antes dado a que este es usado como una palabra simple que pueden decir como si nada, como si no valiera.


Aquel anciano recordaba bien su juventud, la belleza del amor puro, el deseo agraciado, la hermosura de una piel delicada libre de maquillaje de una joven chica de sonrojadas mejillas por el sol, de labios color durazno, de esa dulce y equilibrada esencia del perfume en su piel.

El amor era apreciado, trabajado y una labor de ambas personas.

Lo hermoso de ver crecer una relación, con sus pendientes, obstáculos y dificultades, aprendiendo, valorando y creciendo mutuamente.

Y cuando menos se dio cuenta, estaba dando el sí en el altar.

Comprando los muebles para la casa.

Corriendo al hospital por la llegada de su hijo.


—Ellos no lograron entenderse. La vida no es fácil, mucho menos ahora un matrimonio en donde ninguno pone de su parte, y los hijos no deben de llevar las cargas de sus padres. Kyousuke es tu hermano, y tu el suyo, es lo que importa –sonrió y se puso en pie, el agua estaba empezando a hervir.



—Se te ve mejor –sonrió Okita —¿Duermes mejor?

Yuuichi le miro y devolvió la sonrisa —de hecho... creo que estoy empezando a manejar las cosas desde otra perspectiva –aquello no fue comprensible en primer momento para el moreno, pero Yuuichi estaba ahora convencido de lo que debía hacer.


29/09/2023

Debo ser honesta, si alguien esta esperando romance de primera mano, o acostones específicos, esos están aun lejos de estar presentes, o al menos de ser descrito con claridad de cristal limpio.

Otra cosa, si hay palabras, o momentos, o situaciones que no sean de su agrado, o que les "piquen" de algún modo, o saltan el momento o pasan/esperan a otro capítulo, tratado de poner situaciones que sean un tanto reales lo mejor posible, tanto eso de estudiar y trabajar que lo he vivido, como del querer de una madre a un hijo más que a otro, entre otros temas que, se van tratando lo mejor y más desarrollado posible, quienes leen lo que escribo entenderán.

Agradezco los que leen este escrito o cualquier otro, la verdad lo hago dado a mi gusto por hacerlo, de crear realidades y momentos con estos personajes que pueden dar mucho más. Los comentarios son en verdad un extra que alienta y me hace saber de alguna manera que no soy solo yo quien disfruta.

Gracias y que sigan disfrutando.

Y sobre la otra realidad del dragón y el caballero, como de ese otro Haku que salió en el capítulo 25, tendrá otras participaciones.

Lazos paralelosDonde viven las historias. Descúbrelo ahora