Lazos paralelos

11

Nervioso.

Ansioso.

Desesperado.

¿Qué debía responder?

Mentir no era una opción.

Pero decir la verdad...

¿Qué sabían ellos?

¿Quién?

—Responde ¿Haz tenido contacto con algún dragón? –repitió la pregunta el líder.

Apretó los labios. No quería traicionarlo, pero tampoco podía mentir al líder, menos delante de sus padres ¿Qué pensaría Vlad?

Asintió con la cabeza baja. 

—¡¿Lo ve?! ¡Se lo dije! –aquel otro hombre a lado del líder, aquel regordete y de baja estatura le señalaba y hablaba al líder sobre lo que había visto, que no era una mentira.

Aquel hombre le había visto con el dragón.

—Podríamos hacer una fortuna si nos ayuda a atrapar a ese dragón... –el veneno que aquel ser desprendía en cada palabra era una porción pequeña del gran daño que causaría.

Víctor empuño con fuerza.

Lo traiciono. 

«¿Te gusta?» se repitió de nuevo la pregunta de aquel chico, el cual le seguía viendo.

—¿Gustarme? –se cuestiono ante la mirada gris del chico.

—Haby bebé –su brazo fue preso por Aoi, quien sonrió animada a Tenma —oh... Tenma –saludo coqueta —eres lindo en persona.

Este alzó la ceja por aquello y rio leve —es lo que dicen... –dos del grupo de amigos volvieron por él, según ellos estaba tardando mucho, y agradeció aquello, no le agradaba esa chica —charlemos de nuevo, Hakuryuu –se despidió sin más tiempo de nada.

Aoi arrugo el ceño e inflo las mejillas —que chicos tan mal educados –se quejo, giro a ver a Haku quien seguía ensimismado —¿Sucedió algo?

Reacciono y le miro. Negó —No es...

—Deberías hablar más con él... ¡Ya se! Podría organizar una fiesta e invitarlo ¿No te parece genial? Puedo pedirle a mi padre que... –no presto atención a todo lo que Aoi empezó a decir, ni en que momento lo arrastro a la mesa con el resto de los amigos de ella.

Su mente se quedo en aquella pregunta, sus ojos se fueron sobre el cuerpo dormido de Tsurugi mientras el resto de los amigos de ambos al rededor de este charlaban cada cual, protegiendo el sueño de este.

«¿Me gusta... Tsurugi?»

Las llaves fueron lanzadas y atrapadas por Kyousuke, Hayato le sonrió —¿Qué haré contigo? No tiene remedio.

El primer turno de descanso se lo ofrecieron al chico al ver que estaba casi desfalleciendo por ello, incluso dijeron que podía tomarse aquel día para descansar, pero siendo muy terco, al menos acepto salir a descansar primero.

Y eso haría hasta que...

—Eres el chico de esa ocasión –escucho a Nagumo al verle, ya que este después de lo sucedido, decidió volver a ese lugar para agradecer la atención y sobre todo, el llevarles a casa.

—Usted es él de la corbata... apenas podía mantener los ojos abiertos —¿Necesit...? –tropezó por su propio pie, siendo atrapado en el proceso de caer por el hombre —Es... 

Entre abrió los ojos, estaba en un lugar diferente. 

—Por fin despiertas, si que tienes sueño retrasado –Nagumo le acercó un vaso con jugo de naranja y miel —hable con el jefe del lugar, no te preocupes.

Aceptando el vaso, bebió un poco. Aquel lugar era mucho más grande que su hogar, aquella persona sin duda era de un buen estatus —te enviaron un poco de comida, ya la traigo –dicho ello, le dejo solo en la estancia.

Amplia, grande, limpia. Con objetos de calidad y pinturas elaboradas como sencillas, escucho una música suave provenir de otro habitación, colocándose en pie, fue dirigido por la música hacía aquella habitación donde un hombre de cabello blanco estaba delante de un lienzo blanco.

—Hace tiempo, alguien me dijo que nuestras vidas son parte de una larga transición que por años va acumulando recuerdos de otros siglos –esa voz era fría, y suave —rencarnamos las veces necesarias para cumplir con el objetivo que se nos encargo, y entonces...

Esos ojos eran gélidos, pasó saliva y retrocedió unos pasos —liberar el peso que llevamos cargando.

Se quedo viendo aquellos ojos por un corto tiempo que pareció demasiado. 

—Si que eres curioso –dio un sobresalto al escucharlo cerca, de igual modo parecía tener ojeras debajo de esos helados ojos azules —¿Te gusta el arte?

—No se mucho sobre ello... –sincero.

—El arte es como todo en la vida, diferente para todos. Se ve de un modo distinto dependiendo de la persona, pero...

—¿Pero?

—Hay ciertas personas que llegan a conectar en una, teniendo una misma idea, un mismo sentir...

En ese momento no comprendió aquellas palabras...

Pero lo haría en algún momento.

09/07/2023.