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—¿Por qué lo trajiste? –de nuevo esa pregunta. Ambos recostados en la cama, Víctor con la espalda de Haku sobre el pecho, abrazándole por detrás.

¿Debía tener un motivo?

Si lo pensaba mejor, es un extraño que solo ha visto un par de veces, y de la nada lo lleva al departamento con su prometido, quien le apoyo en aquello en cuanto miro a ese chico con parecido a su futuro esposo.

¿Por qué le ayudo? No tiene que ser tan difícil responder, entonces ¿por qué esta tardando?

—Te vez a ti mismo en él –escucho, sintiendo como Haku se pone sobre de él —le ayudas como deseaste que te ayudarán.

—¿En qué exactamente necesitaba ayuda? –cuestiono alzando la ceja. Sujeto las caderas de su pareja.

—Recuerdo que eras el "Casanova", te metías con todos, cualquiera que llamará tu atención.

—No con todos... La mayoría –Haku le miro fijamente —de acuerdo. Si ¿Y? El no es como yo.

—No le conoces lo suficiente para saberlo.

—Ni tú –le beso la nariz –le ayudo porque me nació hacerlo, además, tu no te quedaste atrás.

—Solo le sostuve, no es gran cosa.

—Es mucho cuando alguien no puede con lo que le esta pasando –sonrió —a veces se necesita de dos extraños para salir de un problema –le beso el mentón —y que mejor que nosotros.

Sonrió. Si su Yo presente hablará con su Yo pasado sobre esto, que estaba por casarse con el "Casanova" seguro negaría aquello y diría que es lo más absurdo. Haku entendió que Víctor en realidad buscaba cariño, no uno familiar, sino de amor, una pareja con quien estar aun si su actividad frecuente era el sexo con la gente, aquello era por no saber bien de que manera buscar lo que quiere.

Y ahí estaba él, amándolo y siendo amado.

Jadeo sabe por los besos y mordidas de Víctor a su cuello —tenemos visitas.

—No creo que se de cuenta... 

—Víctor –ambos se vieron —mejor hay que dormir.

Tampoco es que tuviera muchas ganas de hacerle el amor a la persona que ama y con la cual desea pasar toda la vida. 



—¡Tsurugi! –Tenma había tocado a la puerta de manera desesperada después de ver todo el drama que Aoi armo para terminar diciendo que estaba bien.

Yuki en cuanto abrió fue empujado por Matsukaze, el cual empezó a buscar por todo el departamento a Kyousuke, tiene que hablar con él, tiene que resolver las cosas y explicarle la verdad que debía decirle hace mucho tiempo.

—El no esta aquí –hablo con seriedad Yuki, sabiendo por parte de Akane lo sucedido —largo.

—¡Deja de ocultar a mi pareja! –regaño con enojo Tenma, el cual fue estampado contra la pared por Yuki, el cual no tenía la paciencia para tolerar a quien atormentaba a su amigo —se que esta aquí.

—Mira imbécil. Aun si estuviera, que no esta. No dejaría que lo vieras ni que le hables. Ten un poco de dignidad y déjalo, que esta muy claro que su relación dejo de ser desde hace mucho tiempo –le soltó con molestia.

—¡No eres quien para juzgarme!

Tenma sintió el puño de Hyouga encestarle un buen golpe en el rostro haciéndole retroceder y casi caer de nalgas —largo. Ahora.



El no quería que las cosas pasaran así ¿por qué dejo que Aoi hiciera con él lo que quisiera? Es un estúpido que perdió a quien más ama por una aventura que tuvo a escondidas con Aoi, aunque si piensa mejor las cosas, fue a Kyousuke quien dejo escondido y dejo salir más su relación con Aoi delante de todos.

El palpitar del golpe en la mejilla le hacía dar quejidos de dolor, aquello le ayudo a pensar y bajar su enojo equivocado hacía Tsurugi, el cual no tenía en verdad ninguna culpa de las malas decisiones que tomo.

—Te vez horrible, espero que te sientas una mierda –escucho al costado derecho, Ibuki estaba acompañado por una chica a la cual despidió diciendo que le llamaría luego, algo que en realidad no pasaría y camino hacía Tenma.



La herida fue limpiada y tratada en un silencio que jamás imagino tener con el más alto. Tsurugi se había vuelto buen amigo de sus amigos, recuerda aquellos buenos momentos cuando estaban en la universidad, su vida cuando eran niños ¿las cosas no pueden ser como eran antes?

Claro que no. Ellos, sus amigos, todos eran ya adultos con sus vidas hechas, superando las adversidades, construyendo el mañana.

—No entiendo la razón por la cual dejaste que esto avanzará –escucho al fin.

Incluso Ibuki era alguien querido por sus pacientes, lo cual en verdad es algo extraño pero no por ello bueno. Aquel que pensaron que pasaría su tiempo vendiendo en una tienda hasta su jubilación tiene una lugar donde atender a sus pacientes, lo cual logro con esfuerzo y fe.

Le miro —¿Lo sabías?

—Desde el principio –se puso en pie y camino por el consultorio —no me agradaba para nada ver como tú y Aoi andaban de lo más felices mientras tratabas mal a Tsurugi.

Se levanto y le enfrento con seriedad —si lo sabías, y es tu amigo ¿por qué no le dijiste?

Sonrió el mayor para luego ponerse serio —no es mi trabajo decirle que le estabas poniendo el cuerno, aunque no soy el único que lo sabía, y se que Kyousuke nos odiara a todos por tu culpa, se también que él desearía, o hubiese querido que tu fueras sincero con él. 

—Un amigo dice la verdad –¿Quién era para decir aquello? Mune se rio.

—Si, pero una pareja no miente cuando ama.



02/05/2024

Lazos paralelosDonde viven las historias. Descúbrelo ahora