La Magia de la Mafia © [La Mujer del Mafioso]

40:"El tiempo"

(Belinda)

¡La verdad el tiempo ha transcurrido muy rápido! Ya hoy es jueves, y Damián ha estado presente todos los días, ya han pasado 3 semanas desde que me quedé en su casa y arreglamos nuestros asuntos. Y desde aquel entonces no ha pasado nada fuera de lo normal. Damián quería volver a repetir lo mismo estos 2 fines de semanas, pero no. Tuve que ir a dónde mi mamá, ya hacia bastante tiempo no iba, estos dos fines de semana me fui a mi hogar. La verdad extrañaba a mi mamá, y a Sam.

Ahora estoy en mi última clase del día, solo espero que el timbre anuncié el final de las clases para irme a la habitación, Sop y Am no pueden esperar. Y pues la verdad que Am y Luke, ultimadamente están raritos, ellos dos esconden algo; aunque ya todo lo sospechamos, desde el primer momento hubo atracción. Y yo con Aarón, no he hablado mucho; la verdad el se alejó al enterarse de mi relación. Me duele Aarón es mi amigo y lo quiero, ahorita veré si lo encuentro y platicó con el. Ah y también es que necesitamos hacer algunos trabajos pendientes.

La verdad el instituto nos tiene hasta la sima, pero bueno. Todo con tal que cumplir nuestros sueños. Ya por fin solo la campana anunciando la salida de clases.

— Beli te espero en la habitación — dice Sop — Es que Am va a ir con Luke y últimamente Aarón y tú no se hablan. Así que pues; ya sabes — dice Sop algo apenada.

— No te preocupes por Aarón y yo, además quiero hablar con el — le aclaro y ella asiente.

— Bien entonces vamos — me dice Sop dirigiéndome hacia Am.

— Pero... ¿No le dijiste? — pregunta Am a Sop.

— Tranquila Am, necesito hablar con Aarón — le digo y ella asiente.

Caminamos hasta que llegamos al patio y en una mesa están Aarón y Luke esperando. Luke está viendo hacia Am, y Aarón está distraído. Llegamos pronto hacia ellos.

— Hola Luke — saluda con un abrazo no muy amistoso Am a Luke.

— Hola muñeca — le dice el.

— Hola chicas — nos saluda a Sop y a mí.

— Hola Luke — respondemos al mismo tiempo.

Aarón aún está en el teléfono y cuando por fin saluda es con la mirada hacia otro lugar:

— Hola chicas...— dice levantando la cabeza y cuando me ve, se queda en silencio.

— Hola Aarón ¿Cómo estás? — le pregunto iniciando la plática.

— Hola, hola pequeña. Disculpa Belinda — dice rápidamente.

— Bueno nosotros vamos por unas malteadas — dice y se van todos dejándonos solos.

— ¿Por qué lo corregiste? Me gusta que me digas pequeña — le digo bajando un poco la cabeza.

El parece percibir la tristeza por haberlo corregido así que me explica:

— Como tienes novio, ese apodó es un problema ¿o no? — me pregunta.

— No, no lo es. A mí me gusta mucho ese apodó y no quiero cambiar nuestra amistad porque yo tenga novio Aarón, tu eres mi amigo... — le digo.

— Pero tu novio... Es que... — intenta terminar la oración pero no puede.

— No te preocupes Damián... — no pude terminar la frase porque el me interrumpió.

— ¿Damián? ¿Estás hablando de Damián Montenegro? — me pregunta con una ceja arqueada.

— Sí. El ¿Por qué? — le pregunto confusa.