La Magia de la Mafia © [La Mujer del Mafioso]

67:"¿Fotos?"

(Belinda)

Después de que la lluvia paró totalmente volvimos a la mansión y el tuvo que ir a trabajar mientras yo fui en busca de ámbar. Ya eran más de las doce del mediodía así que me debería de haber buscado como una loca. Y sí, le pregunto a todos los empleados del lugar por mi o por Damián, y creo que solo Oleg y Alex sabían nuestro paradero.

— ¡Por Dios Belinda! ¿Donde te habías metido? — exclama exagerada cuando me ve.

— Tuve una cita con Damián. Bueno una sorpresa — me defiendo.

— ¿Si? Cuenta todo — dice entusiasmada.

Termine por contarle a Ámbar y Sophie lo que Damián había echo. Y por la presencia de Sophie Ámbar no había mencionado palabra del tema del que te estaba ansiosa, ahora no lo sé; Damián me hizo esta sorpresa bonita y tomando con detalle cada uno de mis gustos. Al igual que también me contó un poco más de su vida, cosa que es muy difícil y lo lastima aunque lo quiera ocultar.

No sé si aceptar por la parte de mi que exige venganza o simplemente guiarme por cuerpo y alma no haciendo nada. Mis ojos se desvían hacia Sophie, está sonriendo mientras habla con Ámbar y se ve muy feliz. No me imagino lo que habrá sufrido ese día, el dolor inmenso que se debe sentir aquello me hace sentir miedo y náuseas.

Aunque ya conozco y duermo con Damián, mi cuerpo aún no se siente en completa confianza como para tener intimidad.

¿Como sera el que te obligen?

Que en vez de sentir placer, deseo o quere más. Sientas asco, repugnancia y que pare.

La ayudaré.

Todos tenemos un mínimo deseo de venganza por más buenos que seamos, queremos ver sufrir a quien nos hizo daño. Y ella no es la excepción, también entiendo a ámbar. Teniendo a Aarón y Damián hay más seguridad de que el no nos haga daño alguno, se que ellos nos protegerían de ese pervertido.

— Beli, ¿Tu si quieres ir? — pregunta Sophie sacándome de mis pensamientos.

— ¿A donde? — pregunto confundida.

No estaba prestando atención a nada de lo que hablaban.

— Al centro comercial, Jack no puede ir porque tiene trabajo con Damián. Am no quiere y mi única opción eres tú — dice viéndome fijo.

— No puedo Sophie. Necesito hacer algunas cosas del trabajo de Damián, ayudarlo en algo y ciertamente hoy quizás.. estemos juntos — miento.

Es la única forma de que ella si me quiera dejar en la casa.

— Bien. Pero si no te gusta lo paras de inmediato ¿Vale? Disfruta — festeja mi rubia favorita moviendo sus hombros y senos a la vez.

— Ay boba — ruedo los ojos.

— Chao baby's. Saldré con Sonia, necesito novedades de la casa — dice pensativa.

Sophie era muy chismosa.

Yo me terminé por ir a mi habitación y ámbar se fue junto con Sophie para ayudarla a planear su outfit del día de hoy. Yo por mi parte estaba pensando en comí convencer a Damián de que me de un lugar para hacer una fiesta de no se cuántas personas.

Intento distraerme un poco tomando mi celular y viendo las últimas tendencias en redes, le escribo a mi mamá y a Sam intentando despejar mis ideas. Llaman a la puerta y puedo asegurar que es ámbar, indicó que pasen y si es ella.

— Hola Beli — saluda.

— Hola Am.

— Se que es un poco fastidioso y disculpa. Pero... ¿Lo pensaste? — en sus palabras siento como claramente hay nervios.