Maratón (2/2)
(Aarón)
— Aarón... — escuchó decir la suave y hermosa voz de mi pequeña.
Se nota arrepentida por haberme lastimado, pero realmente no me interesa, me interesa es ella y su bienestar. El degenerado idiota la estaba intentando.. vio.. hacer suya. Cuando mi pequeña solo brota su pura esencia e inocencia.
¿¡Como se atrevió a tocar lo más sagrado para mí!?
Esto si no se lo voy a perdonar, logré ver como su cara, manos y pecho tiene algunos rasguños provocados por mi pequeña. Estaba intentando calmarme lo mas posible para no terminar de asustar a mi pequeña pero me fue casi imposible al ver la marca de una mano en su suave mejilla, mientras estabas completamente húmedas. Sus ojos rojizos solo me hizo abrazarla y ser su refugio.
— Aarón — dice mi pequeña llorando.
No me gusta escuchar su llanto cuando es mi inocencia y amor. Saco el celular de mi bolsillo y marco a unos de mis hombres para que se lleven a este imbécil, podrá tener dinero, si; pero no más que yo. Y lo utilizaré, nadie lastima a mi pequeña.
Me tengo que ir de aquí antes de que lo terminé por matar, no quiero asustar a mi pequeña, pero también tengo que preguntarle si se quiere ir conmigo.
— Pequeña — llamo su atención — Estoy muy enojado por favor vámonos. ¿Quieres irte conmigo? — digo tomando su rostro y acercándolo al mio.
— Sí Aarón, quiero ir contigo, por favor no me dejes sola — dice con miedo en su voz.
— Jamás mi pequeña — digo viéndola fijamente.
Termino por cargarla en mis brazos y tomar camino fuera de este lugar.
— Aarón — da dos palmaditas en mi pecho.
Eso ya es personal de ella, es algo de ella y mío que solo me demuestra más su ternura.
— No quiero ir por la entrada principal por favor — dice suave calmando un poco su llanto.
— Bien pequeña, iremos por otro lugar para no ir por ahí, relájate — digo besando su coronilla y ella asiente.
Ya desde hace bastante tiempo quería besar y abrazar a mi pequeña, no había podido hacerlo por las vacaciones, y sinceramente tampoco quería que fuera en una ocasión como está. Pero igual cualquier momento con mi pequeña será el mejor.
No me gusta ver su carita llena de lágrimas y lo único que me provoca hacer es hacer pagar al culpable de esto y cuidarla, cuidarla con mi vida; y si es necesario daré todo mi dinero para que mi dulzura esté a salvo y acabar con ese imbécil.
A mí pequeña no la tocan y quien le haga daño tendrá que vérselas conmigo, no dejaré que le hagan daño a lo más puro que tengo. Ya estamos frente al auto e ingresó a el con mi pequeña en brazos, ella empieza a acomodarse en mis brazos oara sentir mi protección y amor.
Yo se lo doy todo y doy la dirección del Bulgari Hotel London, mi pequeña por alguna razón voltea a verme con curiosidad.
— ¿Pasa algo pequeña? — digo viéndola y colocando un mechón detrás de su oreja.
— Nada, solo he escuchado sobre ese hotel — dice suave y retomando su posición.
— Sí, vamos allá. ¿O quieres ir a tu casa? — pregunto para no hacerla sentir incómoda.
Es lo que menos quiero.
— No. Quiero ir contigo y estar dónde tú olor este por todos lados — dice mientras se apega más a mí.
ESTÁS LEYENDO
La Magia de la Mafia © [La Mujer del Mafioso]
Random¿Dónde comienza la magia de las cosas? No lo sabes, pero sabes que en todo hay una pizca de ella, y cuando comience te darás cuenta que será la magia de la mafia. ¿Creerías que toda tu vida cambiaría solo por un viaje? Yo sí, y la mía fue así. Soy...