Reunidos en la sala principal y escoltados por obras de arte de todos los tiempos y culturas, el grupo de humanos planeaba la estrategia a seguir.
–Repasemos una vez más el plan –dijo Oscar junto a Marta y Seb–. Te agotarás adrede física y mentalmente hasta casi desfallecer, pasarás a la Otra Realidad y esperarás que un torturador te posea, resistirás y, en ese momento, utilizarás la técnica del abuelo para encarcelar al espectro dentro de tu cuerpo. Lo mantendrás cautivo hasta que los psicoactivos desaparezcan de tu sangre y te traigan nuevamente. Una vez aquí liberarás al torturador. Este, al sentirse inseguro, creará un portal para volver al otro plano. Marta estará esperando ese momento y arrojará el objeto al otro lado inmediatamente. Solo tenemos segundos para hacerlo antes de que se cierre el portal.
–Fácil –y mirando los dos oyentes con una expresión irónica agregó–. ¿Qué puede fallar?
Marta tenía los ojos iluminados y más cristalinos que nunca, hasta su rostro había perdido algunas arrugas. Su alma juvenil había retornado a su cuerpo.
–¿Cuándo lo harán? –continuó.
–Antes de someterme al martirio, quiero tener un tiempo para relajarme y concentrarme en el plan –respondió el muchacho.
–¿Dentro de treinta y seis horas, te parece? Es mi número de la suerte.
–Me parece bien y, si viene con una cuota de buena fortuna, mejor aún.
Dicho esto, el maestro se retiró a la habitación del botica-rio para afinar la fórmula del brebaje. Esta modificación permitiría que el joven aprendiz permaneciera menos tiempo del otro lado, pero con igual efectividad.
Cuando la puerta de la habitación se cerró detrás del chamán, la anciana se incorporó para retirarse. En ese momento, Seb la tomó del brazo y le susurró:
–Marta, espera. Este tiempo que solicité es para que me ayudes a planear un detalle que no está contemplado en el plan. Es tiempo de que sepas qué es lo que debemos cruzar, ya que serás la encargada de empujarlo.
La mujer, sorprendida, se detuvo y volvió a sentarse en el lugar donde estaba.
–Lo que debemos transportar es el cuerpo en coma del ex director del museo, Herr Ring–. Al decir esto, la expresión vivaz de la anciana cambió drásticamente, como si hubiera visto un fantasma.
–Tú sabes que él fue parte de los Centinelas, ¿no? Es el enemigo de Oscar, con todo lo que eso representa.
–Ya no –dijo Seb mirándola fijamente a los ojos–. Es la llave que nos llevará al renacimiento del Renovador. Tampoco es tu enemigo, tú eres neutral, siempre lo fuiste. Por esta razón acepté tu designación por parte de Oscar. ¿Estás arrepentida? No te presionaré para que lo hagas.
–Claro que no, no te fallaré. Soy una asistente confiable, siempre lo fui. Yo elegí alejarme y dedicarme al cuidado y educación de Oscar de niño, y no estoy arrepentida, pero quiero volver a la acción.
–Siempre estaré agradecido por tu ayuda y por supuesto que confío totalmente en ti. En unas horas, visitaremos el hospital donde está internado Ring, en donde...
–Espera, no entiendo algo... –interrumpió Marta–. ¿Herr Ring no está muerto desde hace años? Recuerdo perfectamente cuando le llegó la confirmación de su deceso a Os-car.
–No está muerto. Ahora lleva el apellido Maurer. Yo mismo lo he visto con vida. Se encuentra en un estado de coma profundo desde hace unos años. No sabría decirte cómo o por qué pudo mantenerse indeterminadamente en la Otra Realidad. Pero tiene los días contados –continuó–. Su cuerpo carnal envejecido no aguantará mucho tiempo más y, si muere, él morirá también en el otro lado.
ESTÁS LEYENDO
RENOVATIO - La realidad puede cambiar
Fantasy¿Te atreverías a entrar a la "Otra Realidad" para cambiar al mundo? Acompaña a Seb en esta aventura épica en busca de la Semilla. Si la encuentra, el mundo no volverá a ser el mismo. Seres desconocidos, chamanes psicodélicos y realidades alternativa...